UN RINCON DE LECTURA

COMO TENER UN RINCON DE LECTURA

Un buen RINCÓN DE LECTURA asegura una marcha diferente en el

aula pues a nadie se le escapa que es como una ventana que, con su claridad, nos facilita la

labor de aprender.

La cercanía entre los/as alumnos/as y los libros ayuda a que éstos formen parte de sus horas

escolares y extiendan sus historias y su magia a toda su vida, ayudando al crecimiento

saludable y activo del alumnado.

Estando tan habituados a esta presencia podemos, de vez en cuando, internarnos

juntos en aventuras lectoras para compartir, es decir, leer, comentar, modificar, releer,

dramatizar…obras que ayuden a ascender escalones en la dificultad de comprensión de la

estructura narrativa, en las formas de actuación de los personajes, en el formato de los

diferentes géneros literarios que aún no hayamos probado.

Es importante hacer estas excursiones junto al profesor/a que, sirviendo de guía, les

enseñe a ver, a conocer, a distinguir y apreciar nuevos temas o formas de hacer Literatura,

autores clásicos o nuevos y, con ellos, diferentes maneras de degustar y de aprender, de

razonar, reflexionar y crear con el libro como guía de esa etapa.

Es en este marco de presencia del libro, de libertad de elección, de superación de nuevas

metas y de normalidad en la relación alumnado-libros, en el que podemos realizar estas

actividades de animación porque, sin que la Literatura forme parte de la vida escolar, son

prácticas muy poco eficaces y, por tanto, la realización de un encuentro con autor/a o

cualquier otra acción esporádica encaminada a hacer que nuestros/as alumnos/as se

encuentren con la lectura no será nada más que una bengala en una noche oscura.

Será una actividad agradable, nadie lo duda, pero tras ella permanecerá la desolación

previa, esa monotonía de la que debemos apartarnos siempre que nuestro trabajo, que

debiera aportar luz y energía, se desarrolle en un aula, lugar vital por excelencia

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