Uso Celular en Clases

Uso Del Celular En Clases

 Curso: 2° medio

     El celular es un aparato que en sus inicios sólo tenía la función de hacer llamadas, pero con el pasar de los años ha ido adquiriendo nuevas funciones, lo que hizo que finalmente pasara de ser un instrumento meramente de comunicación a uno de ocio. Esto se ha hecho notar en los colegios. Hoy en día es común que los estudiantes posean y lleven celulares a las clases, pero lo que se supone debería ser un elemento que permita la comunicación entre estos y sus padres, se ha vuelto un elemento distractor que se empleado de forma indebida durante las horas de clases por el alumno (ya sea chateando, jugando, escuchando música, etc.) el cual afecta su correcto aprendizaje. Por estos motivos, los colegios prohíben su uso, pero… ¿Vale la pena? Puesto que el alumno al ser sorprendido utilizándolo, será reprendido por su profesor, lo cual no permite que la clase se desarrolle correctamente debido a las constantes interrupciones que ocasiona esto. ¿Entonces no se debe prohibir su uso, dejando al alumno la decisión de utilizarlo o no? Podríamos decir que si lo hiciésemos solucionaríamos el problema de la constante interrupción de la clase y probablemente permitiría su desarrollo normal, pero lo más probable es que el alumno siga utilizándolo y deje de ponerle atención a la clase. Y si nadie pone atención ¿Podemos realmente decir que la clase se desarrolla de forma correcta y hay un aprendizaje? Entonces, ¿Qué se puede hacer? Por supuesto ya vimos que no tomar alguna medida no es la opción, entonces lo que se puede hacer es que los alumnos por su propia voluntad no lo utilicen. Suena ridículo hacer tal afirmación, pero hay un método. La Universidad de California ideó un ingenioso método para que los alumnos no utilizaran su teléfono, consiste en una aplicación para el móvil en que a medida que el alumno no prenda la pantalla de su teléfono y logre que otros compañeros instalen la aplicación, gane puntos. A simple vista no tiene ningún atractivo, pero su gracia es que los puntos acumulados pueden ser canjeados por descuentos en comida o compras en la tienda del campus. Aunque sea un emprendimiento experimental, enfoques como estos son los que podrían permitirnos hacer que el alumno efectivamente no utilice el móvil por su propia voluntad y que pueda ser parte íntegra de la clase. Con sólo dar los incentivos correctos, la clase podrá desarrollarse de forma efectiva, dejando de lado las interrupciones que el mismo profesor causa por tener que llamarles la atención a sus alumnos cuando usan su teléfono y que estos lo utilicen escondidos y no aprendiendo nada.

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