Las grandes respuestas éticas

Segundo parcial de Ética. 12/11

Las grandes respuestas éticas

Ética Aristotélica:

El fin último, según a Aristóteles corresponde a la política. Esta es considerada como la disciplina que se ocupa del obrar humano en sociedad, actúa siguiendo fines mediatos o inmediatos para esto es importante un fin último, la felicidad.

En cuanto a la felicidad Aristóteles la llama como bien supremo, es decir, sinónimo de dichoso. Explora las concepciones de la felicidad más importante. Tres tipos fundamentales de estas concepciones son:

1. La vida de placer (aspiran a la satisfacción plena de sus impulsos)
2. La vida política (tiene que ver con la búsqueda de gloria y honores)
3. La vida competitiva (no se encuentra analizada)
4. Y un cuarto tipo de vida es La de negocios (cuya finalidad es la riqueza)

Virtudes: Aristóteles las entiende como perfecciones del carácter y de la inteligencia del hombre que contribuye a realizar su esencia. Una vida virtuosa es la que  nos lleva a la felicidad. La virtud es el estado de equilibrio entre  el exceso y el defecto. Ejemplo: Temeridad y el defecto la cobardía.

La virtud del hombre está relacionada con la justicia, la fortaleza y la templanza

• Justicia: es el acto de respetar los derechos y deberes, es la disposición de dar a cada uno lo que es suyo de acuerdo con la naturaleza, la igualdad o la necesidad. Tiene que ver con la equidad.
• Fortaleza: tener esa fuerza para poder enfrentar esos actos.
• Templanza: hacer las cosas con moderación. Es el medio justo entre el exceso y la falta.

KANT:

Ética formal, es una ética de la intención.

Habla de la ETICA FORMAL, ya que no le otorga ningún contenido concreto a su fundamento, sino que tiene en cuenta solo la forma, es decir, la manera que tiene el hombre de hacer y no lo que hace. Junto con este formalismo, también puede decirse que la ética de Kant es una ética autónoma y del deber, autónoma porque es el propio sujeto el que se determina a sí mismo a obrar, a darse a sí mismo su ley.

Kant considera que solo la BUENA VOLUNTAD puede ser considerada como absolutamente buena, ya que ésta es buena por el querer, buena en sí misma, independientemente de que se alcance o no el fin deseado, lo que interesa es el querer o la intención.

 MORAL DE LA INTENCIÓN: Postula que no son las consecuencias del acto las que determinan si se trata de un acto moral o no, si no que, lo importante es la INTENCIÓN con la que se realiza dicho acto.

1. Una persona se está ahogando en el rio, hago todo lo posible por salvarla y no lo logro, la persona muere. (acto bueno, buena voluntad)
2. Hago todo lo posible por salvarla y tengo éxito, salvando su vida. (acto bueno, buena voluntad)
3. La persona se está ahogando y la atrapo por casualidad mientras pesco con una gran red.

En el primer caso no se logra, en los otros dos sí. Teniendo en cuenta el valor moral de estos actos, puede decirse el primero y el segundo son actos de buena voluntad, es decir, moralmente buenos, y aunque en el primer caso no se haya logrado el fin propuesto (salvar a la persona) y en el segundo si, tienen el mismo valor, porque esto es independiente de lo realizado. En el tercer acto, a pesar de que se ha salvado a la persona, carece de valor moral porque ocurrió sin que se tuviera la intención o voluntad de realizarlo, fue casualidad, por lo tanto es un acto moralmente indiferente, ni bueno, ni malo.

1. formas de obrar:

• OBRAR POR DEBER: Se obra de acuerdo a la Ley, es decir, de acuerdo al IMPERATIVO CATEGÓRICO, el cual postula que debemos obrar según una MAXIMA (principio subjetivo según el cual actúa cada persona) tal que podamos querer al mismo tiempo que se torne LEY UNIVERSAL (obrar de manera que nos gustaría que obrasen los demás).

EJEMPLO: El que se ahoga es un ser que me es indiferente, es un desconocido, o peor, es un enemigo. Pero MI DEBER es salvarlo y lo hago, contrariando mi inclinación. Este es  un ACTO MORALMENTE BUENO, ya que se actúa por deber, y no se sigue ninguna inclinación.

• OBRAR CONFORME AL DEBER: Coincidiendo con lo que el deber manda, pero no es realizada por deber, si no por alguna inclinación.

EJEMPLO: Quien se está ahogando es alguien a quien amo y por lo tanto trato de salvarlo. Este acto, es realizado por una inclinación (amor).

• OBRAR POR INCLINACIÓN: Actuar de acuerdo al conjunto de tendencias a las que nos impulsa nuestra sensibilidad (amor, odio, orgullo).

EJEMPLO: Supongamos que disponiendo de todos los medios necesarios para salvarlo, decido no hacerlo, porque le debo dinero a esa persona y su muerte me libraría de la deuda, ahí he obrado por INCLINACIÓN, esto es, no siguiendo mi deber, si no mi deseo de no saldar mi deuda y quedarme con el dinero.

Si no se hace uso de una buena voluntad, los actos no pueden ser considerados absolutamente buenos, como por ejemplo la audacia o la sangre fría, estos, sin los principios de una buena voluntad llegan a ser actos malos.

En cuanto a las críticas hacia las éticas que consideran que la felicidad es el fin último de los actos humanos, Kant postula que si el fin último del hombre fuera el logro de la felicidad, la naturaleza no habría dotado al hombre de razón, postula que nos ha sido concebida la razón como facultad práctica, la cual puede dirigir a la voluntad, el destino verdadero de la razón tiene que ser el de producir una voluntad buena en sí misma, independientemente de lo que efectúe o realice, cosa para lo cual la razón es absolutamente necesaria.

Kant no aceptaría que se dijera una mentira si con ello se salva una vida, ya que él postula que debemos obrar de modo que quisiéramos que todos obraran como nosotros, es decir, debemos apuntar a actuar de modo que nuestra máxima se transforme en Ley.

Texto los valores: Graciela Brunet 

Subjetividad de los valores

Sartre: afirmar que los valores son subjetivos supone considerar que su validez depende del sujeto y sus valoraciones. Lo que niega Sartre la validez de dichos valores  y afirma por el contrario que ellos necesitan ser reinventados libremente por el sujeto en cada elección.

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