4 Filosofías de la educación.

4 Filosofías de la educación

La filosofía y la educación están muy estrechamente relacionadas en cierto modo, ya que la filosofía es el amor por saber amor por la sabiduría y tener una vida buena, y la educación es un proceso por el que aprendemos a tener una vida buena.

La filosofía, según dice la palabra, es “Amistad con el saber”

Suponemos que la educación tiene como meta decirnos o ayudarnos a saber llevar una buena vida.

Así que la filosofía y la educación, tratan en cierto modo como vivir bien, bien en el sentido más pleno de la palabra.

Comprender es la mejor manera de estar en el mundo o uno de sus aspectos esenciales, se hace 3 preguntas:

¿Cómo educar? Como deberíamos educarnos

¿Cómo es una vida buena? Hay que preguntarnos esto para saber qué es lo que queremos

¿Qué somos?

Según Sócrates, no sabemos adecuadamente que nos conviene hacer y padecer mientras no sepamos que somos.

El creyó que lo mejor que podemos hacer es acatar el mandato de Polo que aconsejaba: “Conócete a ti mismo” una vida sin examen, sin reflexión, comento ante el jurado que lo condeno a muerte. “No merece la pena ser vivida”.

Kan decía que todas las preguntas que nos hagamos, ¿Qué puedo hacer? ¿Qué debo hacer? ¿Qué me cabe esperar? Se resumen en una sola, ¿Qué es el hombre?

Es decir la antropología en sentido pleno sería la primera o ultima pregunta filosófica. De acuerdo con lo creamos que somos contestaremos, como nos conviene vivir y aprender a vivir. 

Todas las pedagogías son por lo tanto el cierre de su corazón una teoría del hombre de que somos y para qué estamos en este mundo.
Se comenta de unas cuantas concesiones filosóficas del hombre cuatro en concreto deduciéndose en cuestión pedagógica de la educación.

Tiene sus preferencias en unas, aunque comenta que podemos sacarles lo positivo a todas mucho más que de negativo, sobre todo si las interpretamos intentando en ellas sacar lo mejor para nuestras vidas para complementar y armonizar. De todas ellas podemos aprender que la educación, es un proceso de hechos de comprensión de libertad y de felicidad; nada justifica una pedagogía aún método educativo basado en la memorización en el aburrimiento y en la cuestión.

Esquema de platón:

Según su esquema, el hombre consta de tres partes principales: el intelecto, la fuerza de voluntad y los deseos. Que están ubicadas en la cabeza, el tórax y el abdomen, simbolizadas en el mito del carro a lado por el cochero y los dos caballos a ellas les corresponde como virtudes la sabiduría, la valentía y la moderación de equilibrio. 

 Se entiende de otra manera se renombra ligeramente esas partes fundamentales 11 años de la psique se habla de los sentimientos o emotividad, voluntad e intelecto. Se insiste de en que no debe creerse que ninguna de ella puede realmente funcionar separada de las otras, por lo tanto, esos 3 aspectos del año:
El aspecto emocional: siente todos los matices posibles entre los dos polos sentimentales, positivo y negativo, del placer y el dolor de la felicidad y la tristeza, miedo, esperanza, alegría y melancolía. Hay muchos animales que tienen sentimientos, pero unos son capaces de sentimientos más complejos que otros. El ser humano es capaz de sentir no solo hambre, frio, miedo, etc. Si los sentimientos mucho más sublimes como los que provoca la música o los sentimientos religiosos y metafísicos, como la angustia o el transporte místico.

El aspecto colectivo: toma decisiones, elige y tiene dos formas positivo y negativo, queremos o rechazamos algo.

El aspecto intelectivo: piensa, comprende, intuye, razona, duda, el hombre tiene una gran capacidad intelectual y racional como queda manifestado en sus actividades culturales y vitales en general, es la razón por ejemplo la que le permite representar su vida y destino como un todo y plantearse cosas como su identidad y su supervivencia o sin ir más lejos, qué hacer con su vida.

Para el problema de la educación el más influyente es que respuesta damos a la cuestión siguiente: el ser humano por naturaleza tiende hacia el bien o hacia el mal es decir si somos optimistas o pesimistas las personas se distinguen entre los que ven la botella medio llena y quienes la ven medio vacía

Optimismo y Pesimismo:

Vamos a contestar a la pregunta si tendemos a lo bueno o a lo malo por naturaleza. 

El Pesimismo: buscando una explicación al mal, cree que la persona tiene por naturaleza lo malo es decir que es pecaminoso, en un lenguaje teológico, salvo por una providencial gracia divina o en su sustitución regido por padre o profesor, el hombre no haría una derechas

El Optimismo: como él mismo, si fija más en la asistencia del bien a la belleza y el sentido del mundo. Piensa en cambio que tendemos también por naturaleza, aunque por accidente nos equivocamos y hacemos el mal, este factor influye la educación mucho más que la ideología pedagógica que uno tenga, también es cierto que ese factor hace mejor juego con las ideologías que con otras.

 Un profesor pesimista o amargado difícilmente promoverá un ambiente amistoso y feliz como el que se requiere en la verdadera educación y recurrirá habitualmente a la coerción y al miedo no confiará en la naturaleza del educando y creerá que debe decirle cuándo, cuanto, que y como tiene que comer, dormir, respirar y también entenderá todo lo demás dinámico y vivo como una molestia, como desorden preferirá un alumno silencioso a crítico y mecánico realmente hay una impulsión hacia lo inercial y no muerto en si mismo.

 Nosotros adoptaremos una posición optimista a la hora de leer cada teoría filosófica pedagógica sin detenernos en justificarlo mucho, desde un punto filosófico como desde lo científico, hay buenas razones para rechazar el pesimismo. 

La primera: de ellas es que científicamente puede decirse que somos el fruto de una larga pero muy selectiva historia evolutiva es impensable que tengamos por naturaleza hacer lo contrario de lo que nos conviene. 

La segunda: desde la filosofía, si uno adopta alguna posición cómoda de Sócrates, Platón o Aristóteles y cree que las cosas tienen por naturaleza a realizar su fin propio tiene que confiar en lo que cada ser hace así como las plantas y animales saben que les conviene y solo se equivocan por accidente así el hombre desde su primer instante en el útero tiende a lo que lee sin beneficios esta idea es la base de cualquier pedagogía respetuosa y alegre.

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