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Definición Y Objeto de la Teologia


Enviado por   •  24 de Octubre de 2012  •  Monografía  •  4.337 Palabras (18 Páginas)  •  581 Visitas

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1.1 Definición Y Objeto de la Teologia

El término de la Teología es de origen griego, y etimológicamente significa: tratado, ciencia de Dios. El término comienza a utilizarse por los cristianos a partir de Eusebio de Cesarea. A partir de entonces será entendido como la exposición metódica y estructurada de la Revelación aceptada por la fe.

Sería comprender y ahondar en las verdades reveladas a la luz de la razón iluminada por la fe.

O mejor, la podríamos definir como: la ciencia en la que la razón del creyente, guiada por la fe teologal, se esfuerza en comprender mejor los misterios revelados en sí mismos y en sus consecuencias.

B. EL OBJETO DE LA TEOLOGIA

Distinguimos:

1) Objeto material - Es la realidad de la que propiamente se ocupa la Teología. El objeto es Dios y todas las realidades por El creadas y gobernadas por su designio salvador. El objeto material primario o principal es Dios y el objeto secundario es todas las cosas creadas en cuanto ordenadas a Dios.

2) Objeto formal - Uno es el objeto formal "quod": lo que es propio de Dios. "Deus sub ratione Deitatis" y el otro es el objeto formal "quo": luz intelectual bajo la que el objeto es considerado. En este caso, la razón iluminada o guiada por la fe.

1.2 Fe Y Teología

Decimos que a las verdades de la Revelación podemos acercarnos a través de la fe, en cuanto los contenidos de la Revelación son creibles (ut credibilia), y por medio de la Teología en cuanto esas verdades reveladas son inteligibles (ut intelligibilia), es decir, como susceptible de una comprensión cada vez mayor.

La fe es asentir a una verdad en cuanto digna de ser creída. Lo propio de la Teología es analizarla. El motivo formal de la fe es la autoridad de Dios que revela; la de la Teología, es la percepción por la razón de la inteligibilidad de lo creido. La fe es siempre presupuesto absoluto de la Teología, no sólo porque es su materia prima, dado que la Teología se hace partir de la fe, sino porque la buena Teología se debe hacer desde dentro de la fe, y es así algo más que una simple reflexión racional sobre los datos de la revelación.

Por eso afirma S. Agustín:"intelligere ut credas, credere ut intelligas" (has de entender para creer y has de creer para entender).

S. Anselmo de Canterbury entiende la Teología como "fides quarens intellectum"; la fe que busca entender, no por curiosidad sino

por amor y veneración al misterio. El creyente no discute la fe, pero manteniéndola firme para buscar razones por las que la fe es así.

Por tanto la Teología es desarrollo de la dimensión intelectual del acto de fe. Es una fe reflexiva, fe que piensa, comprende, pregunta y busca. Trata de elevar, dentro de lo posible el credere al nivel de intelligere. El Teólogo se apoya en la solidez del conocimiento de Dios por la fe, pero apoyándose también en la razón humana y en sus adquisiciones ciertas. Entonces, con todo esto, el Teólogo intenta ordenar e interpretar los datos de la creencia católica de modo que se vean sus encadenamientos tal como Dios los ha dispuesto.

1.3 Teologia Como Ciencia

Para mostrar el carácter científico de ciencia, antes hay que decidir el concepto de ciencia.

Si entendemos por ciencia solamente aquella disciplina caracterizada por una aproximación a la verdad (con un método y un poder sobre lo real) ligado a una gestión cuya exactitud es dirigida y verificada por una experimentación, ciertamente la Teología no es una ciencia, puesto que lo científico sería sólo lo rigurosamente verificable.

Pero si entendemos como ciencia aquella discipina que pueda probar un objeto, un método propio y pueda desembocar en condiciones que se puedan comunicar a otros; en este sentido se podría hablar de ciencia canónica, ciencia bíblica, y ciencia teológica (en razón del rigor).

Santo Tomás responde manteniendo el carácter científico de la Teología basándose en dos argumentos.

1. Normalmente la ciencia tiene evidencia de sus principios, pero las ciencias cuyos principios vienen de otra ciencia superior que consigue demostrar la evidencia de aquellos principios. Hay ciencias que se basan de unos principios dados por otras ciencias superiores, de modo que no parten de la evidencia de sus principios sino que parten de unos principios que son evidentes en otras ciencias superiores. Estas ciencias sa llaman ciencias subalternas.

La Teología es una de estas ciencias subalternas que se basan en unos principios, cuya evidencia no la demuestra la Teología: son las verdades de fe. Sin embargo, hay una ciencia, superior a la Teología, para la cual los principios sí son evidentes: es la ciencia de Dios. En efecto, la visión directa de los misterios, existe en Dios y en los bienaventurados, con quienes la fe nos pone en comunión.

Por tanto concluimos que la Teología es una ciencia , una ciencia subalterna de la ciencia de Dios.

2. También cobra razón de ciencia cuando logra construir racionalmente lo revelado de tal manera que determinadas verdades se presentan religadas a otra como a sus raíces reales, se presentan religadas a una situación de consecuencia por referencia a un principio. Es decir, la Teología es una ciencia porque hay verdades-conclusiones que parten racionalmente de verdades-principios, de modo que resulte que ambas (conclusiones y principios) sean igualmente reveladas. Es decir, es ciencia porque se logra obtener unas conclusiones de unos principios revelados de tal forma que las conclusiones también se consideren reveladas.

Se logran adquirir conclusiones más allá de lo revelado formal por una elaboración teológica. Si esto no fuera así, no podríamos salir de Kerigma, y nos perderíamos gran cantidad de verdades secundarias que parten de un desarrollo racional de la revelación y que, por tanto, también son verdades. (cfr. Congar, Fe y Teología)

1.4 Método Propio de la Teología: las Fuentes Teologicas

El método que la Teología utiliza se suele desarrollar en tres etapas: (1) expresión de la doctrina de la Iglesia sobre una determinada verdad de fe, (2) demostración o esfuerzo de comprensión de la doctrina a partir de la Sag. Escritura y Tradición y por último (3) reflexión especulativa. De esta forma la Teología va desarrollando su discurso científico.

Este modo de proceder permite apreciar los componentes o fases esenciales de su método, que busca la comprensión científica de la revelación a través de dos caminos:

(1) Fijación del contenido de la Revelación lo más exactamente posible: auditus fidei .

(2) comprensión y síntesis de ese contenido: Intelectus fidei . Ambos son aspectos

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