El Ser Humano. El Sentido De La Vida Y El Poder

Consignas:

*Fotocopiar el apunte N° V, (en fotocopiadora) y leerlo a conciencia.

*Hacer una reflexión personal, basada en el texto, teniendo en cuenta lo siguiente:

-¿Cómo describirías el “ser humano?

-¿Qué diferencias encuentras entre “ser y hacerse”?

-¿A qué llamarías “el sentido de la vida”?

-¿Qué es “trascender”?

-¿Qué puedes decirme sobre: “tener” y “poder”?

-Háblame del “saber”

RECUERDEN QUE ESTE ES UN TRABAJO CRÍTICO, REFLEXIVO, NO ES PARA QUE ME PONGAN RESPUESTAS TOMADAS DEL TEXTO, SINO TOMADAS DE SU PROPIA REFLEXIÓN PERSONAL ACERCA DEL MISMO.

MODALIDAD DE EVALUACIÓN, SE TENDRÁ EN CUENTA:

LA CAPACIDAD DE HACER UNA CRÍTICA, UNA REFLEXIÓN PERSONAL, DE UN TEXTO DADO.

COMPRENSIÓN DEL MISMO.

Ser humano, Ser y hacerse.

El ser humano es un ser social, histórico, encarnado de una realidad y es allí en donde se manifiesta como ser de posibilidades. Abarca la realidad físico-química, más lo espiritual.

El Ser humano, goza de un carácter único que lo convierte en entidad irrepetible. Por ello goza de cualidades, características que lo constituyen, definen y distinguen.

“Cada uno de nosotros somos un Ser humano. Yo, como Ser humano arrastro una historia y proyecto un futuro.”

Para conocer la realidad humana no bastan las ciencias de la naturaleza: es preciso abrirnos, a partir de lo biológico, a una comprensión cultural e histórica del complejo fenómeno humano.

Como seres humanos somos subsistentes en el orden del espíritu, tenemos una profunda anterioridad, somos auto-conscientes, libres y podemos auto-determinarnos. Gozamos de una corporalidad y nos caracterizan dimensiones como: la coexistencia, la alteridad y la comunicabilidad, la libertad (como elemento fundamental) y la dignidad (como valor absoluto).

Somos seres sociales por naturaleza, trascendentes e irrepetibles. A diferencia de los animales somos seres inteligentes, tenemos instintos y hacemos uso de la razón. Poseemos palabra, el sentido de lo bueno y de lo malo.

Aristóteles sostenía que “El hombre es un animal político”.

Los animales tienen reacciones instintivas que los obligan a hacer ciertas cosas y les impide hacer otras.

Somos libres, tenemos conciencia de nuestra grandeza y limitaciones. Luchamos por vivir cada vez mejor.

“El hombre no nace entero, debe constituirse en el hombre que quiere/debe ser.”

Los seres humanos estamos compuestos de esencia (lo que somos) y existencia (lo que realmente poseemos). La esencia no está predeterminada, sino que la vamos configurando a lo largo de nuestras vidas, en el curso de nuestra existencia: “Cada hombre se hace existiendo.”

La existencia es indefinible, inobjetivable. No se nos presenta como “una cosa”. En nosotros mismos se realiza el existir.

“Depende de nosotros construirnos o destruirnos”: La existencia implica comprometerse a elegir, a rellenar nuestra existencia con esencia, a ser.

Sentido de la vida.

Existir es la única posibilidad de ser. El sentido de la vida es una definición y una opción.

Los animales cumplen un propósito, sus existencias forman parte de ciclos en la naturaleza, tienen el mismo destino del primero al último. Nosotros compartimos un lado animal; pero también lo trascendemos. No tenemos que someternos totalmente a los dictados de la naturaleza, sino que podemos forjar libremente el camino de nuestras vidas. Ese sentido nosotros lo descubrimos y lo intuimos a lo largo de nuestras experiencias de vida y terminamos asumiéndolos como propios; de lo contrario, nuestras vidas carecerían de rumbo, de sentido.

Este sentido debemos encontrarlo -no es universal sino único y lo redefiniremos a lo largo de nuestra vida, a través de las experiencias personales propias- y definirlo como una misión frente a la realidad y en el mundo.

La existencia alcanza su verdadera dimensión cuando se ubica frente a un quehacer que la involucra: entonces allí tiene sentido los sufrimientos, las relaciones sociales, los esfuerzos, sacrificios, el trabajo y hasta la muerte.

SENTIDO DE LA VIDA HUMANA:

“La vida tiene sentido”

Inteligencia (verdad) porque el hombre es consciente y libre; negar el sentido de la vida sería

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