En linea Cassany

En_línea: leer y escribir en la red

Daniel Cassany (2012). Barcelona: Anagrama (pp. 21-116).

Daniel Cassany describe, en la primera parte de su libro "En_línea", las diferencias existentes entre la forma de escribir y leer en el mundo digital frente al tradicional modo analógico consignado en los libros. Esta situación plantea nuevos retos a la educación y a la escuela. Cassany propone como tesis central que las diferencias entre lo digital y lo analógico "no describen sólo nuevas maneras de leer y escribir, sino también modos distintos de acceder, usar, construir y concebir el conocimiento, que puede constituir un cambio de paradigma cultural" (Cassany. 2012. pág. 26).

Para profundizar en estas diferencias comienza su texto analizando las distintas metáforas que hacen referencia a los comportamientos de las personas ante el mundo digital: “nativos e inmigrantes digitales”, en donde critica a los "nativos" por la falta de pensamiento crítico para hacer uso de internet de manera significativa (Cassany. 2012. pág. 27); “residentes/visitantes y consumidores/productores”, manifestando que internet es un ejercicio de lectura pero también de producción escrita (Cassany. 2012. pág. 33); “web 2.0, la colmena y las abejas”, en donde plantea que los internautas son parte de una comunidad digital basada en la colaboración y la participación (Cassany. 2012. pág. 34);  “el vino y las botellas” en donde reta a cambiar las prácticas, los conocimientos y los valores de quienes hacen uso de esta tecnología (Cassany. 2012. pág. 36); “la letra digital y sus superpoderes”, en donde reconoce la brecha que se abre entre los letrados y los iletrados digitales (Cassany. 2012. pág. 40); por último afirma que no se puede confundir el uso de la tecnología con el aprendizaje pues lo que genera realmente conocimiento es el uso de las potencialidades de esta herramienta en situaciones reales y significativas de la vida (Cassany. 2012. pág. 40-42).

Cassany ante este cambio de paradigma cultural reconoce que "hoy se lee y se escribe más que ayer y es más difícil hacerlo y aprender a hacerlo, aunque las apariencias engañen" (Cassany. 2012. pág. 58). Esto gracias a las particularidades que tiene la escritura digital en contraposición a la escritura en papel: hipertexturalidad, intertextualidad, multimodalidad, plurilinguismo, multiculturalidad, nuevos géneros discursivos (chat, whastsapp, correo electrónico). También se debe a los cambios drásticos que enfrenta la lectura y la escritura en la red, gracias al acceso a multitud de recursos, la cantidad de textos y de personas que acceden a ellos, la libertad de expresión, la escritura ideofonemática, lo que "genera unas culturas y experiencias comunicativas diferentes" (Cassany. 2012. pág. 83). De esta manera, plantea el autor, se da un salto de una cultura local, inmediata y homogénea a una cultura digital, global y heterogénea, que impacta significativamente a los alumnos de hoy, cuya cultura es "más variada, imprevisible y cambiante y con muchas lagunas" (Cassany. 2012. pág. 83).

En conclusión, Cassany reta a la escuela a ser "más flexible y sensible a los intereses y a las necesidades de los aprendices" (Cassany. 2012. pág. 83), pues hoy los niños y los jóvenes pasan mucho tiempo conectado a la red, lo que incide sustancialmente en sus vida y en su educación. (Cassany. 2012. pág. 91). En definitiva, afirma el autor,  "la red ofrece contextos reales y significativos para desarrollar un saber práctico y cotidiano, para motivar al alumnado que pueda sentirse más alejado del saber teórico y académico de la escuela" (Cassany. 2012. pág. 115).

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