GUIÓN PARA DINAMIZAR LA TERTTULIA DIOLÓGICA DEL DIARIO DE ANA FRANK

GUIÓN PARA DINAMIZAR LA TERTTULIA DIOLÓGICA DEL DIARIO DE ANA FRANK

Bienvenida

-- Buenas tardes, sean bienvenidas todas y todos a la segunda sesión de la tertulia dialógica del Diario de Ana Frank.

-- Mi nombre es Jessica Belén Robles José y soy alumna del 6ºA, en la escuela Profr. Rafael Hernández López vespertina.

-- Vamos a dar unos minutos para que la mayor cantidad de niñas y niños se integre.

-- Mientras esperamos, les voy a presentar a las maestras que nos acompañan, esperamos que sus participaciones sean muy enriquecedoras. Favor de saludar cuando diga su nombre, gracias.

Profr. Elizeth Poluzeno de 6ºA, Profr. Félix Nepomuceno de 6ºB, Profr. Elizabeth Paz subdirectora, Profr. Martha Aguilar Subdirectora, Profr. Verónica Vázquez Directora y  Profr. Verónica Belmont supervisora.

-- También contamos con la presencia de madres de familia y otros familiares, igualmente les damos la bienvenida y les invitamos a opinar y expresarse.

(4:05 pm)

-- Siendo las cuatro con cinco de hoy lunes 12 de octubre, estamos presentes __________ niñas y niños. Bienvenidos sean compañeros y compañeras de 5ª y 6ª,  les recuerdo que en éste espacio nuestras voces, nuestras lecturas y nuestras opiniones son igual de valiosas, aceptadas y respetadas que las de cualquier adulto.

Lo más importante en la Tertulia Dialógica es que se de con base en el DIALÓGO IGUALITARIO. Es decir, dialogar con respeto a las diferencias, en igualdad.

Lo más importante es la validez de los argumentos, no quién los dice. Por lo tanto, los invito a opinar libremente, sin pena porque todas y todos estamos aprendiendo y la practica hace al maestro.

-- Si alguien no entró el a la Tertulia el lunes anterior, le cuento que se dialogó acerca de las primeras páginas del Diario de Ana Frank. Empieza el día 12 de junio de 1942 con estás breves pero sentidas palabras: “Espero poder confiártelo todo, de un modo como no he podido hacerlo hasta ahora con nadie, y espero que seas un gran apoyo para mí.”

-- Varias opinamos que es muy importante llevar un diario de vida porque a veces es la forma más indicada para desahogar nuestros sentimientos más profundos e íntimos: “Tengo deseos de escribir y, ante todo, quiero sacarme algún peso del corazón. El papel es más paciente que los seres humanos.” -- escribía Ana, y es cierto ya que a veces no se puede hacer amigas o amigos verdaderos por muchas cuestiones, a veces una se siente sola. Nos sentimos identificadas y empáticas con sus reflexiones porque a todos nos pasan cosas difíciles, ahora mismo el encierro que vivimos por la pandemia.

Ana Frank, recibió su diario como regalo al cumplir 13 años, era 1942 en Holanda. Ella y su familia habían nacido en  Alemania pero se vieron forzados a migrar en 1933, huyendo de los nazis que habían tomado el poder en Alemania, haciendo la vida imposible para los judíos, comunistas, negros, morenos, gitanos, homosexuales, y casi todos en Alemania. Luego 1939 iniciaron la segunda guerra mundial y el odio se extendió por toda Europa, Asia y África.

-- Iniciaré con una breve reseña del contenido de las páginas que vamos a tratar el día de hoy, que van del miércoles 24 de junio de 1942, al miércoles 8 de julio de 1942.  

Esos días seguían siendo muy duros para los judíos en Holanda ya que eran discriminados y maltratados en todas partes, pero Ana conoció a su primer novio llamado Harry, un chico de dieciséis años, que aunque ya tenía novia no evitó enamorarse de Ana.

El padre de Ana ya se había dedicado a preparar el refugio para que la familia pasara a la clandestinidad, en caso de ser citados por la policía, por eso sacaban ropa y sus cosas de la casa para llevarlas a otras casas que servían de refugios secretos para las personas perseguidas.

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