La Ciencia Como Base Del Saber
Enviado por yancaroli • 9 de Diciembre de 2013 • 2.037 Palabras (9 Páginas) • 334 Visitas
NOMBRES:
MATRICULA:
ASIGNATURA:
TEMA
La ciencia como base del saber
AULA
HORA
PROFESOR
Introducción
La ciencia conocimiento cierto de la cosas por su principio y su causas y con una cierta base, experimental que se diferencia de la elucubración meramente especulativa y de la opinión subjetiva o popular.
La ciencia se especifica por el campo a que se aplica (el hombre, la naturaleza) y por el método que se utiliza (Especulativo, Matemático, Experimental).
Rama particular der saber humano. Saber en erudición de una persona.
Destreza en un arte u oficio, conjunto de las ciencias exactas, fisioquimicas y naturales. Ciencia ocultas. La que la antigüedad se ha inspirado en la alquimia, la magia, la astrología.
La ciencia como base del saber:
Los mencionados supuestos sobre el saber y su transmisión–racional, proposicional, consciente, verdadero, humano- permanecen actualmente en algunas esferas dela vida, entre otras razones, gracias a la influencia de la racionalidad científica que, por estructura, hace abstracción de las características constitutivas del obrar con el fin de poder generalizar. Wieland afirma que: “en la intención de la ciencia se hace abstracción de todo aquello que no es repetible o, al menos, en cuanto no es repetible. También esta repetibilidad fundamental de todas sus acciones es una de aquellas ficciones necesarias que cuentan entre las presuposiciones de la ciencia Sin embargo, debido a la evolución del conocimiento científico, se puede plantear legítimamente si aún hoy en día es imposible abordar el asunto del saber ético desde una perspectiva científica. Cuando decimos ‘aún hoy’, nos referimos a que la epistemología ha evolucionado bastante, especialmente en el siglo XX.
Los supuestos sobre el saber se refieren básicamente a la ciencia propuesta por el positivismo lógico, para cuyos representantes lo que debe guiar el método científico es el análisis lógico, formal, eliminando todo aquello metafísico, es decir, todo lo que no es susceptible de ser tratado lógica y empíricamente. Posteriormente, desde la perspectiva de Popper, se amplía un poco el rango otorgado al saber. En este caso la metafísica tiene papel importante en la ciencia como guía heurística Kuhn, ante estos inconvenientes de la propuesta popperiana, va a ampliar el saber científico a un campo más allá de la racionalidad. Este autor muestra cómo la racionalidad se presenta sólo al interior de la ciencia normal, en el periodo en el cual la comunidad científica trabaja dentro de un paradigma. Para él hay dos aspectos históricos que se deben abordar en la ciencia: la historia externa, que se refiere en gran medida a los elementos que resalta
Kuhn, pero también, y fundamentalmente, la historia interna, que constituye una reconstrucción racional de los hechos científicos, no tal y como fueron sino como son
Racionalmente pensados. De esta manera Lakatos amplía aún más el campo del saber en general, y postula una gran injerencia de los aspectos “irracionales” en el saber científico en sentido estricto, y a la vez salva la racionalidad de la ciencia. hoy en día. El saber científico es otro saber más sin ninguna prevalencia sobre las otras clases de saber.
Desde la perspectiva de Campbell (Martínez y Olivé, 1997), quien sigue a Kant, pero con herramientas de la biología del conocimiento, la fundamentación del saber no puede encontrarse en el mismo saber, sino en otro nivel diferente que es el de la biología. En esta línea trabaja la epistemología evolucionista mostrando que el conocimiento científico, al igual que todo saber, es producto de la evolución y tiene un valor adaptativo el conocimiento en el transcurso de la evolución (natural), cómo desde la perspectiva específica de la génesis del conocimiento en el niño, y las diferentes fases de complejidad que alcanza a medida que éste se transforma gradualmente en adulto. Análogamente, estudia la evolución del conocimiento científico. Considera que el estudio del desarrollo del niño es un modelo adecuado para representar el avance en la ciencia.
El saber ético, no se ajustan a la racionalidad científica positivista. El saber ético pertenece al ámbito de lo que tradicionalmente se ha denominado doxa, u opinión, por oposición a episteme, o ciencia. Sin embargo, ya desde Platón, la doxa se consideraba fundamental en la estructura de la vida humana y, al igual que lo hacen Polanyi y Ramírez, se planteaba la imposibilidad de eludirlo en el acercamiento al conocimiento y al saber en general.
Para finalizar, queremos mencionar la relación existente entre el saber tácito, el saber ético y la doxa griega (Ramírez, 1996; Lopera, 2004). El término tácito proviene del latín tacere, callar, y quiere decir silencioso. Hay indicios de que lo que los griegos llamaban doxa es un saber de esta clase: silencioso, que al intentar decirlo, articularlo mediante razones, se puede convertir en conocimiento (episteme).
La doxa es descrita por Emilio Lledó en su texto La memoria del Logos como un saber que se fundamenta en el lenguaje humano (logos), mas no por ello habla de él como un saber determinado. “Platón afirma en el Teeteto (190a) que la doxa es un logos que no se expresa hablando con otro, sino, en silencio, consigo mismo” (Lledó, 1996,p. 225).
La doxa verdadera, en tanto saber indeterminado que existe en el alma bajo la forma de logos, se transformen episteme (conocimiento, ciencia) con base en el diálogo y en la pregunta socrática. Lledó cita a Platón: “«Tiene opiniones verdaderas que, despertándose con las preguntas se convierten en saberes» (86a)” (1996, p. 156). Ese saber difuso puede llegar a convertirse, parcialmente, en un saber claro y distinto. Es un poco también la tesis que muchos años después va a plantear el psicoanálisis como propuesta ética: hacer consciente lo inconsciente. La indeterminación de la doxa “…le presta libertad, la hace, al par, insegura y precaria” (1996, p. 157). Según
...