Libertad Y Vida

“La vida sin libertad no es vida, pero la libertad absoluta sólo se consigue con la muerte.”

Para entender esta frase debemos saber como se definen y relacionan la vida y la libertad.

La vida en si es todo lo que nos rodea desde el nacimiento. Es un reflejo de mi universo, familia, infancia, mis parejas, amigos, deportes, es todo lo que hacemos, cuando nos es otorgada lleva consigo a la libertad siendo esta la capacidad del ser humano de tomar decisiones, haciéndose responsable de las consecuencias que puedan ocurrir en base a esto.

Realmente la libertad del ser humano se encuentra limitada, en si es relativa ya que existen diversos aspectos que nos frenan. Por ejemplo si un reloj me gusta, y no tengo como comprarlo, debo de esperar hasta tener el dinero para hacerlo o ver la posibilidad de sacarlo al crédito. Es decir, como ciudadano de un país estoy obligado a respetar las reglas del juego de los negocios y las leyes mercantiles que lo rigen; otro ejemplo podría ser si conduzco mi carro por una zona urbana, posiblemente niños, ancianos y demás peatones pasaran las pasarelas, y por ende, debo de respetar el limite de velocidad para no poner en peligro la vida de nadie: esa es mi obligación. Tengo el derecho de conducir mi carro, pero la obligación de respetar las reglas del tráfico. Mi libertad pues, está limitada precisamente donde están mis obligaciones como ciudadano.

A lo largo de la existencia cada persona se ve en la necesidad de tomar decisiones bajo una libertad relativa.

Existen diversos tipos de libertades y algunos son:

• Física: a poder ir y venir, entrar y salir, subir o bajar, hacer esto o aquello.

• De culto: poder creer y tener la religión que quiera.

• De expresión: derecho a opinar e informar.

• Biológica: no se depende de otros organismos para vivir.

La libertad nos permite la vivencia de experiencias, estas a su vez nos van generando conocimientos en la vida, de algún modo siempre estamos expuestos a la constante toma de decisiones que van a influir de manera positiva o negativa en nuestras vidas, es quizá la proeza más grande que habremos de determinar pues se de ser tan sencillo como escoger entre un helado de fresa o chocolate también con esto nos podremos estar jugándonos la vida.

El hecho de pertenecer a una sociedad nos obliga, aún así aunque no estemos de acuerdo, a seguir o limitarnos por unas reglas impartidas por la misma sociedad y aunque estemos en constante búsqueda y pensamiento por el “yo”, esta dependencia es más fuerte y mucho más grande que nosotros mismos, los seres humanos somos de libres de hacer con nuestra vida lo que queramos, mas no tenemos la potestad de atentar contra nadie bajo ninguna circunstancia. El límite bueno de nuestra libertad es la libertad de los demás La libertad por su parte va mas allá del pensamiento individual, se trata de defender esta

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