Los dos mundos

     En cada momento asecha el terror, el miedo, la descompostura, y el grito, es un mundo de caos, un mundo de ruina, un mundo en donde las almas más débiles, se pierden inminentemente en la desesperación, desolación, en un vacío gigante lleno de desolación de su propio mundo, de su propio universo, de su mismo mundo interior, en donde abunda estos y muchos más términos por nombrar, donde me demoraría una época entera en contarlos, no obstante, si narraré lo más abundante allí, pues todo ser e individuo lo ha vivido de alguna manera la “Soledad”.

     Este desdicho es perjudicial gratamente hacia cualquier persona que lo abunde en su vida, pues será considerada como un ser lleno de desolación, de asocial y de extraño; humano tachado totalmente de todo estima que se tenga hacia alguna persona, pues será considerado como anormal, por la poca vivencia que ha tenido socialmente, siendo retirado totalmente. Paradoja es lo presente acá, como un ser tachado puede entrar en una sociedad que no acepta a los raros? Es paradójico el hecho mero de estar.

     La soledad es una desdicha, nadie quiere estar solo, todos esperan una relación sea real o falsa ¿Cómo puedo estar solo yo? Las personas suelen enloquecer cuando permanecen un tiempo estimado a solas, no son capaces de estar en plena conciencia y derivan en su mundo, que horror seria estar allí, en ese caos, en ese desorden interior, la soledad conlleva estar en mero vacío, por la falta de confianza y determinación de vivir en comunidad, es absurdo el hecho de convivir con los demás.

Meras palabras superficiales, dichas por presuntuosos ciegos, incapaces de observar la verdadera realidad presentada actualmente, los mismos incapaces de observarse a si mismos y permanecer en convivencia consigo mismos, los mismísimos que huyen de la realidad con sustancias o con artefactos actuales, no siendo capaces ni permanecer un solo minuto a solas consigo. Estos individuos solo ver el mundo presentado hacia ellos, mas no lo observan, inhabilitándolos a estar en verdadero contacto y conexión con el todo.

    La persona incapaz de conocerse no puede vivir en un mundo social, el ser insuficiente de trascenderse a sí mismo en un pedestal para observar todo su saber desde el más minúsculo al más glorioso, no podrá vivir con los demás, pues ni el mismo se conocer, y al ocurrir esto, es incapaz de amarse, el solo esta consigo mas no convive con él; si ni el mismo es capaz de amarse ¿Cómo pretende amar al otro? ¿Cómo espera tener buenos triunfos y frutos al relacionarse con los demás, si ni siquiera se tolera a sí mismo? Cuan insoportable es la levedad del ser.

Lo primordial frente a la sociedad, es aprender a convivir en esta y poder deliberarse y perderse en la más profundas enseñanzas que la misma proporciona, pero, no se brinda esto con el fin de merecer al ser un buen estado de felicidad y conformidad; todo lo contrario, se proporciona para que brinde comodidad a la sociedad, incapaz de conocerse a si mismo, y siendo esclavo de su propia comunidad, esto enseñado con el único fin de no imponer los beneficios propios frente a los sociales, cuanta estupidez y necedad, pues nadie que no se conozca a si mismo primero, no es capaz de amar y simplemente estará, mas no vivirá

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