Nada ni nadie puede contra el amor: el amor contra la razón

Nada ni nadie puede contra el amor: el amor contra la razón

“El amor corre al amor como el colegial huye del libro y como el que va a clase se aparta de él con cara triste.” Ésta es una de las frases más populares de la obra “Romeo y Julieta”, en la cual queda muy bien explicado como es visto el amor, ya que es un sentimiento tan fuerte; de hecho el más fuerte de todos en el campo de la bondad; que cuando invade nuestro ser somos capaces de hacer cosas que antes de sentirnos así tal vez pensaríamos como locuras. Así es, el amor hace que todo a nuestro alrededor se vuelva color de rosa, los problemas desaparecen y solo pensamos en nuestra amada o amado, no existe nadie más importante para nosotros, tan es así que se roba nuestros pensamientos las veinticuatro horas del día. Pero, ¿cómo es posible llegar a amar a alguien con tanta fuerza y pasión? Principalmente y en la mayoría de los casos, porque ese sentimiento es bien correspondido, por ello estamos conscientes que ambas partes estarían dispuestas a dar el todo por el todo sin importar los riesgos que nuestras acciones y decisiones conlleven.

Sin embargo como en todo debe de haber un “pero”, es el caso del amor, todos los peros vienen cuando cometemos locuras por el estado en el que nos encontramos y normalmente éstas nos traen problemas; la clave está en llevar muy bien de la mano el amor con la razón, ya que si se hace así, además de conseguir nuestro objetivo, éste no ocasionará ningún problema. Lamentablemente en la mayoría de los casos no se hace así y nos dejamos dominar por tanta pasión que invade nuestra alma, en ocasiones es bueno, porque todo lo realizamos con espontaneidad y con las mejores intenciones, y esto termina siendo agradable hacia nuestra pareja. Finalmente al estar enamorados conseguimos aumentar nuestros niveles de felicidad, lo cual está excelente, ya que a este mundo venimos a disfrutar la vida y una gran forma de hacerlo es junto con otra persona de la cual estemos enamorados.

Concluyendo, la mejor manera de conseguir una relación espontánea y sobre todo duradera es mantener un equilibrio entre la razón y el amor. Con esto conseguiremos una plenitud y un bienestar para uno mismo y tu pareja.

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