Propuesta De Robinson Crusoe

Retroceso y desarrollo en soledad en Robinson Crusoe de Daniel Defoe.

La lectura de Robinson Crusoe lleva a comprender elementos superficiales de la vida cotidiana del ser humano, como cubrir sus necesidades básicas de supervivencia. Sin embargo, también se pueden encontrar en su lectura, elementos profundos que en apariencia no se ven, como por ejemplo el uso de códigos para la comunicación.

Robinson es un personaje de quien se puede decir demasiado tras haber estado en soledad durante gran tiempo, esto lo llevó a necesitar de la comunicación: “Esto hizo que mi vida solitaria fuera mejor que la vida social, porque cuando empezaba a lamentarme de la falta de conversación, me preguntaba si no era mejor conversar con mis propios pensamientos” .

La idea de la comunicación supone, dos conceptos: el de relación y de transmisión, sin embargo Robinson no estaba en contacto con ninguno de los dos conceptos anteriores, “En realidad y como es natural, el estudio de los signos siempre ha relacionado con el concepto de comunicación, así como con el de pensamiento. Decíamos: no hay pensamiento sin signos; y decimos: no hay signos sin comunicación. En estricta lógica podemos decir: no hay pensamiento sin comunicación” . Él obtiene comunicación con su propio pensamiento, ya que no tiene interacción social. En él era imprescindible esto.

La ciencia que se ocupa del estudio de los signos donde se puede decir que forma parte de la lingüística que es la noción que se obtiene por concepto de semiótica, y pensemos aquí, en esta historia, en el poder de un gesto, no somos conscientes de este componente de la comunicación, es así como lo da a entender Sebastiá, “Nos es tan natural y familiar como el respirar. Pues bien, este proceso tan común y tan familiar se había simplemente aceptado hasta hace poco pero no se había intentado analizar de una forma rigurosa a fin de explicitarlo.”

Robinson lo adecúa a su manera, refiriéndose a que uno de sus actos era estar bautizando, así, apodando o nombrando lo que descubría ó encontraba durante su estancia en la isla. Tomando en cuenta que no toda su vida la vivió en una isla solitaria y desierta de humanos, aun así tenía el conocimiento de muchas cosas o esencias. Dando a entender que la consciencia previa que tiene desde un pasado, procrea la idea que plantea un futuro que supone ser feliz.

Él nombraba, designaba y denominaba las cosas. Decidía la nominación con lo que creía que era su propiedad otorgándole un título a su gusto, puede ser como con el loro que domesticó, al respecto dijo: “Pasé la mayor parte de ese tiempo con el complicado asunto de construir una jaula para mi Poll, el loro, que ya empezaba a mostrarse domesticado y a conocerme” . Que después de tres años de esfuerzo, de convivencia y de relación recíproca, logró que le hablara.

El humano le enseñó al animal a actuar como humano, y el animal le enseñó al humano a actuar como animal. En este sentido, Robinson le enseñó al loro a hablar, pero para que lo lograra tuvo que actuar a semejanza, en la medida de sus posibilidades, como un animal, para que se estableciera la empatía entre los dos, y trató de imitar sus gestos y emular sus movimientos, Sebastiá Serrano afirma que “El contexto histórico incluye un conjunto de factores de tipo psicológico, sociológico, y físico que configuran el entorno en que tiene lugar el acto (relación + trasmisión) comunicativo,

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