Qué Significa Ser "humano"

¿Qué significa ser “humano”?

La humanidad ha hecho grandes esfuerzos para dar con la respuesta de lo que significa ser “humano”, esos esfuerzos han sido infructuosos o, insuficientes. Han pretendido hacernos creer que somos un ente que vale solo por lo que tiene o produce y no por lo que es. Para captar nuestra verdadera dimensión necesitamos ubicarnos en el cosmos conocido y recurrir a las principales fuentes de información de que disponemos: la ciencia, la filosofía y la religión.

La ciencia dice que fue hace aproximadamente cinco o seis millones de años cuando surgió la vida. Sir Charles Darwin dio a conocer al mundo su teoría de la evolución de las especies. A partir de entonces la anatomía comparada, la paleontología, la embriología, la biogeografía, la genética, y la antropología han aportado tantos argumentos en apoyo de su teoría. El organismo inferior o más remoto siempre quedaba como inmerso en la estructura u organismo más reciente en el que resultaba trascendido, aunque la especie inferior continuara existiendo en su forma original. Hace apenas unos 25 a 40 mil años, apareció la especie de la que formamos parte: el “Homo sapiens”, en nuestro idioma, “ser humano”, desarrolló la capacidad de comunicar lo aprendido a sus congéneres mediante una herramienta vital que el mismo creó: el lenguaje. La ciencia nos permite tener ya un acercamiento para contestar a la pregunta de quienes somos en el cosmos conocido: somos el producto final de un prodigioso y tenaz esfuerzo de la evolución de la vida.

El punto de vista de la filosofía, “Sin el ser humano toda la creación no sería más que un desierto, un acto en vano que no tendría finalidad última”. El ser humano, alguien en quien el universo encuentra su razón de ser, ¿Cómo podría saberse de la existencia del universo si no hubiera observadores conscientes que dieran cuenta de ello? ¿Qué sentido podría tener un universo desierto sin nadie que lo contemplara y se preguntara sobre su origen?

La versión de la religión << Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza>>, y Dios creó al hombre a su imagen y semejanza. A imagen de Dios lo creó. Al igual que la ciencia, la Biblia reconoce también un proceso evolutivo, Dios ha sido quien, haciendo surgir siempre de lo inferior algo superior, lo ha impulsado y dirigido con un proyecto definido: que al final surgiera una especie preparada para recibir su espíritu.

Somos unas creaturas en la cúspide de una evolución que dura ya 13,000 millones de años, testigos del universo e imagen y semejanza del Creador.

Los criterios populares que se toman en cuenta para decir de alguien que es una persona “muy humana” o por el contrario, afirmar de alguien que es “inhumano”. El calificado como “muy humano” lo es porque sus acciones están ligadas a la justicia, a la bondad, a la generosidad, al amor, a la verdad, a la solidaridad.

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