TOMAS DE AQUINO

Tomas de Aquino nació en Italia en 1225. Destacado en us estudios ingresó pese a la oposición de sus padres en la orden dominica. En 1245 marchó a la universidad de Paris donde estudió artes y teología bajo la dirección de San Alberto Magno, que le transmitió su interés por el pensamiento griego introducido por los árabes y a quien en 1248 acompañó por cuatro años a colonia. Tras su regreso a Paris recibió su doctorado en teología y ese mismo año comenzó a enseñar en la universidad, al tiempo que daba a la luz sus primeros escritos en los que reflejaba ya su deseo de mostrar la necesaria concordancia entre teología y filosofía y su admiración por el pensamiento de Aristóteles.

En 1259 Tomás se trasladó a Roma en calidad de profesor y asesor de la curia. Durante este periodo termino la redacción de “La suma contra gentiles” (1258-1264) e inició “La suma teológica” (1265-1273), sus dos principales obras.

Tomás de Aquino murió en Fossanuova, el 7 de marzo de 1274 cuando se dirigía al segundo concilio de Lyon. Llamado Doctor Angélico fue canonizado en 1323, pese a su exceso racionalismo se ha convertido en la fuente más importante de inspiración del pensamiento católico.

Santo Tomas adopta como base de su pensamiento el aristotelismo. Concibe a la filosofía y la teología en dos ámbitos diferentes, autónomos y cada una en su dominio, es soberana. Pero no excluye la idea de una colaboración entre ambas, y aun una sumisión de la razón a la fe en las cuestiones que l razón no pueda definirse. La adopción del aristotelismo como la relación entre la razón y la fe, conducirá a Santo Tomas al desarrollo del “Realismo Filosófico”, replanteando cuestiones que se habían considerado ya decididas.

Este teólogo afirma que Dios no es una verdad evidente para la razón por lo que, quienes la afirmen, deberán probarla. La existencia es evidente considerada en si misma, pero no considerada respecto al hombre y su razón finita y limitada. Tanto es así que las diversas culturas o religiones tienen distintas ideas de Dios, e incluso en una misma religión, cada hombre difiere en su concepción de Dios. Con ello pretende recalcar tanto la importancia del tema como la legitimidad de solicitar una garantía de la razón. Si la existencia de Dios no es una verdad para nosotros es necesaria que sea demostrada de un modo evidente para la razón.

Santo Tomas establece su teoría Las cinco vías en donde argumenta la existencia de Dios desde el uso de la razón. Estas vías son:

El movimiento: por los sentidos el hombre acepta que hay seres de este mundo que se mueven, pero todo lo que se mueve es movido por otro, y como una serie infinita de causas es imposible, hemos de admitir la existencia de un primer motor no movido por otro, inmóvil. Y ese primer motor inmóvil es Dios.

La eficiencia: sabemos que las causas no pueden ser causas

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