Trabajo Etica

El anillo de Giges Capítulo IV (Joaquín García Huidobro)

1. ¿Por qué se dice que los hábitos son una ayuda?

Los hábitos al ser conductas autómatas nos permite tomar decisiones de modo espontáneo, y concentrarnos sólo en algunas que parecen más importantes, es decir al tener algunos problemas elementales ya resueltos (decisiones ya tomadas anteriormente), podemos concentrar nuestros esfuerzos en las que son más relevantes y aprovechar mejor nuestro día.

2. ¿Qué quiere decir que la virtud sea atrayente?

Las virtudes son nuestras fortalezas; nos permiten ser hombres que aprovechan los recursos al máximo y que están abiertos a las necesidades de los demás; Es atrayente ya que genera el desarrollo de las propias facultades, multiplicación de capacidades y no perdemos libertad; es decir, refleja la variada plenitud a la que está llamado el ser humano en condiciones de actuar más y mejor.

3. ¿Cómo se adquieren las virtudes?

Las virtudes se adquieren por repetición de actos; con el paso del tiempo, si se realizan los actos adecuados y de la manera correcta, entonces se origina un hábito virtuoso, es decir se adquieren eligiendo y actuando, las cuales nos permiten conocer mejor, dominar ciertas destrezas o transformar mejor las cosas; repercutiendo directamente en cómo somos.

4. ¿Qué significa que lairtud sea justo medio? ¿Es esto sinónimo de mediocridad?

La virtud consiste en un justo medio cuando se la compara con el exceso y el defecto que se le oponen, "pero es un extremo en lo que tiene de óptimo y de bien, es decir, en la conformidad con la razón"; nada tiene que ver con la mediocridad. El bien jamás estancará al hombre, ya que esta permite un crecimiento espiritual y físico, siempre respetando la libertad personal y ajena.

5. ¿Puede el hombre establecer que sus propios hábitos son virtudes, según él los prefiera?

No, ya que la virtud es objetiva, una cualidad que acompaña a un sujeto, un modo de ser y de comportarse aquí y ahora. Siendo libres para hacer lo que queramos, no lo somos para constituir la bondad o maldad de lo que hagamos. La virtud nos provee de objetividad a la hora de juzgar la realidad; por ende las diferencias entre las apreciaciones de los hombres se pueden deber a muchos factores, pero en forma muy importante dependen de la disposición de cada uno. Por lo tanto, resulta posible que haya individuos que gocen con lo que a uno le desagrada, porque no tienen la misma disposición de juicio, sin embargo al igual que la ley natural estamos obligados a determinar racionalmente nuestro actos atendiendo a las características del sujeto y las circunstancias en las que se encuentra.

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