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HECHOS OCURRIDOS POST LEVANTAMIENTO DE JOSÉ GABRIEL CONDORCANQUI TÚPAC AMARU (Mayo 1780 – 1784)


Enviado por   •  22 de Mayo de 2017  •  Ensayo  •  3.825 Palabras (16 Páginas)  •  419 Visitas

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INDICE

                                                                                                PAG.

  1. INTRODUCCION………………………………………………………………  03

  1. HECHOS OCURRIDOS POST LEVANTAMIENTO DE JOSÉ GABRIEL CONDORCANQUI TÚPAC AMARU  (Mayo 1780 – 1784)………………  05

  1. DIEGO CRISTÓBAL TÚPAC AMARU……………………………………..  06
  1. JULÍAN APAZA (TÚPAC CATARI)………………………………………… 10
  1. SITUACIÓN SOCIAL DEL VIRREINATO TRAS LOS             LEVANTAMIENTOS POSTERIORES A LA EJECUCIÓN                                  DE TÚPAC AMARU…………………………………………………………… 12
  1. CONCLUSIONES……………………………………………………………… 13
  1. BIBLIOGRAFIA………………………………………………………………… 13
  1. INTRODUCCIÓN

Entre los años 1780 y 1783 se produce una gran revolución, un levantamiento masivo desencadenó una larga lucha contra los españoles, situando la Rebelión de Túpac Amaru en el contexto de la historia global, sin perder de vista la perspectiva local y los cambios ocurridos en la cultura política durante estos años en los Andes. El impacto hace referencia al hecho esencial de que la rebelión fue derrotada, las autoridades españolas ejecutaron a Micaela Bastidas y a José Gabriel Condorcanqui en mayo de 1781, desplegando las partes de sus cuerpos a lo largo y ancho de la región cusqueña. Y en el temprano año de 1783 lograron derrotar a la segunda parte de la rebelión.

Pues el levantamiento fue una rebelión masiva mas no una revolución exitosa, tuvo un considerable impacto en la América española y más allá, y que pese a ser derrotada, contribuyó a reconfigurar las relaciones entre el estado colonial y la mayoría de peruanos en este periodo: el campesinado indígena, el cual de modo mayoritario pero no homogéneo apoyó la revuelta.

La rebelión tupacamarista, por otro lado, tuvo en la mira los “abusos” y “excesos” de las reformas borbónicas que habían incrementado la explotación física y laboral de la población indígena, la rebelión andina fue vista más bien con cierta curiosidad. Los ingleses reportaron las nuevas sobre el avance de la rebelión tupacamarista con satisfacción –dado que la veían como un signo más de la decadencia española- pero no apoyaron a los rebeldes ni mostraron preocupación ante un eventual triunfo de las tropas de Túpac Amaru, el que los rebeldes no ganaran y que no pusieran en peligro una institución como la esclavitud.

En términos militares, las tácticas de ataques por sorpresa, los brutales cercos y la movilización permanente caracterizó la segunda fase (luego de las ejecuciones, de mayo de 1781). Estas tácticas provocaron el horror y la frustración entre los comandantes realistas. Las escaramuzas fueron más comunes que los enfrentamientos entre batallones y varios de los eventos más sangrientos tuvieron lugar luego de las batallas, cuando las tropas realistas asesinaron a todos los sospechosos de apoyar a los rebeldes o cuando los insurgentes tomaron pueblos como Chucuito y Juli. No existe una forma sencilla de conocer la ideología de Túpac Amaru o lo que él buscaba.

El hecho que perdieron es clave. Nunca implementaron su plan de acción, su utopía. Los analistas se ven forzados a confiar en sus escritos (nunca lanzaron algo parecido a un plan de gobierno) y sus acciones o prácticas mientras duró la rebelión. Los indígenas que conformaban las tropas rebeldes tenían una idea bastante amplia de quién era el enemigo y cuán lejos podían ir las represalias. Luego de la brutal ejecución de sus líderes, los rebeldes se mostraron cada vez menos reacios a usar la violencia abiertamente; los realistas, por otro lado, dejaron de diferenciar entre rebeldes y población andina, convirtiendo ambos términos en sinónimos.

Así, el levantamiento derivó en una guerra sangrienta, muy difícil de considerar un motín de naturaleza conservadora. Los españoles admitían que tuvieron suerte de haber podido derrotar a los rebeldes y que su control sobre los Andes y América del Sur era más bien débil. Curiosamente, la campaña de represión se concentró más en los criollos y quienes apoyaron el levantamiento en Lima que en las masas rebeldes, la rebelión alteró de manera radical las relaciones entre el estado y la población indígena.

La rebelión y las medidas que le siguieron socavaron la autonomía local, la centralidad de los curacas, la voluntad del estado español de mantener alejados a los foráneos de los recursos de las comunidades, la confianza hacia los indígenas en las cortes, y todos los demás ingredientes del pacto, Por más que los españoles trataron de silenciar la rebelión de Túpac Amaru al punto que no se convirtiese en un ícono de las Guerras de Independencia o una herramienta en manos de los ingleses, su recuerdo no se desvaneció. Su nombre no pudo ser borrado.

En 1802, Jean-Jacques Dessalines, el comandante general del Ejército Revolucionario de Haití y en ese momento gobernador general, bautizó a sus fuerzas como “el Ejército de los Incas” y los “Hijos del Sol”. En las batallas que tuvieron lugar en 1812-1814 por el control de Montevideo, los realistas en Río de la Plata solían referirse a los insurrectos como Tupamaros. Aún falta mucho por conocer sobre la memoria del levantamiento, especialmente entre los descendientes de quienes conformaron su base social, los indígenas. El nombre de Túpac Amaru continuó resonando hasta el siglo XX. Túpac Amaru se volvió el símbolo visible del régimen de Velasco Alvarado en el Perú (1968-1975), con su nombre e imagen pop adornó todo lo que fuese posible adornar, desde plazas hasta programas políticos y folletos. Además, habría que incluir en la lista a dos grupos guerrilleros, los Tupamaros de Uruguay y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru en Perú, así como a un joven que eventualmente se convertiría en el más famoso rapero a nivel mundial, Tupac Amaru Shakur.

La rebelión de Túpac Amaru no llegó a crear un estado soberano. Esta es la gran línea divisoria entre una rebelión y una revolución. La rebelión cambió la política colonial en dos formas. Primero, hizo evidente su alto costo en vidas humanas, circuitos económicos, infraestructura y otros aspectos. Los analistas han indicado que esta evitó una alianza entre Lima y Cusco y/o entre criollos y campesinos quechua, abriendo aún más la brecha entre la Ciudad de los Reyes y el Ombligo del Mundo, la costa y al sierra y los criollos e indios. Una ola de manifiestos anti-indígenas comenzaron a aparecer a medida que la rebelión decaía La rebelión de Túpac Amaru cambió el mundo andino en muchas formas. No solo aterrorizó a la élite sino a grupos medios que Micaela y José Gabriel buscaban reclutar; le dio a los indígenas una demostración de la debilidad de los españoles y el sueño de una alternativa, así como el enorme costo que ello tendría de fracasar; y destruyó un acuerdo político que había durado por más de dos siglos.

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