Confederación Rosista

Confederación Rosista(1829-1852)

Primer Gobierno de Rosas

En 1829 Rosas llegó al poder con el apoyo de comerciantes y hacendados. Logró imponer el orden, por medio de la delegación de las facultades extraordinarias, y también realizó una política intransigente con respecto a sus enemigos. Su gobierno fue un período de prosperidad económica para Buenos Aires.

Durante el gobierno de Rosas, como en otros, se produjo la expansión sobre territorios indígenas, tomados estos por medio de batallas a bien realizando alianzas con algunas comunidades. Teniendo en cuenta que la base de la economía era la ganadería de tipo extensiva, era necesario, para aumentar la producción, aumentar las tierras.

Por otro lado, en 1825 se había firmado entre Gran Bretaña y las Provincias Unidas el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación. Este tratado aseguraba el comercio entre ambos. Se les aseguraba la libertad de cultos y se los eximía del servicio militar.

La Liga Unitaria y El Pacto Federal

Para 1830 la confederación nacional se encontraba dividida en sectores dominados por la Liga Unitaria y otro por el Pacto Federal (Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires).

Al mando de la Liga Unitaria se encontraba el General Paz quien luego de tomar la provincia de Córdoba, intento avanzar e imponer sus ideas sobre el resto del territorio.

Pero cae prisionero Paz y la Liga del Interior finalmente es vencida y las provincias que la integraban se suman al Pacto Federal. Quedaron al mando de las distintas regiones Quiroga en el Interior, López en el Litoral y Rosas en Buenos Aires.

Segundo Gobierno de Rosas

En 1832 fue elegido Rosas para su segundo mandato, el cual fue rechazado porque no le renovaban las facultades extraordinarias. Rosas se marchó a la campaña del desierto donde realizó alianzas con los indígenas, ésta política fue apreciada por el grupo de los terratenientes de la Provincia de Buenos Aires. Mientras tanto, en Buenos Aires se sucedieron tres gobiernos (Balcarce, Viamonte y luego Maza) hecho que mostraba la inestabilidad política de la provincia y a esto se le sumó el asesinato de Quiroga (ampliando la inestabilidad más allá de Buenos Aires) , razón por la cual la sociedad comenzó a tener miedo y a sentir necesidad de que Rosas vuelva al poder para reestablecer el orden.

Rosas volvió al poder ayudado por su esposa quien realizó una importante campaña en los sectores populares de la sociedad. Se llamó a un plebiscito y accedió al poder con amplio apoyo ciudadano.

La Confederación Rosista es el resultado de las medidas represivas, de la falta de oposición tanto en la legislatura porteña como en el Interior. La falta de caudillos, hará más fácil a Rosas poder gobernar y demorar el llamado a Congeso Constituyente para declarar la Constitución Nacional.

Rosas fue apoyado por amplios sectores de la población, es decir, hacendados, comerciantes y las clases populares. Todos estaban convencidos de que el imponía el orden, el cual era necesario para generar una situación de estabilidad política y por ende prosperidad económica.

La oposición rosista, La Mazorca.

Para lograr el orden, no se tuvieron miramientos en los métodos utilizados, así fue como se creó la sociedad popular restauradora, que de allí saldrá la mazorca, órgano represor rosista que se encarga de exterminar a la oposición.

Como resultado de dicha situación, había grupos que debieron emigrar, por ejemplo, los jóvenes integrantes de la generación del ’37. Grupo de intelectuales

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