Crisis del Estado de bienestar, neoliberalismo y agotamiento de la modernidad.
Enviado por Sebastian Monsalve • 24 de Noviembre de 2016 • Ensayo • 1.839 Palabras (8 Páginas) • 617 Visitas
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Crisis del Estado de bienestar, neoliberalismo y agotamiento de la modernidad.
Profesor: Carlos Duran.
Ayudante: Daniela Ortiz.
Cátedra: Historia Comparada de la Modernidad.
Fecha: 08/11/2016
Alumnos: Sebastián Hinojosa.
Diego Román.
Paulo Monsalve.
Tras la irrupción del paradigma moderno en la sociedad occidental, las concepciones sobre la organización social han constituido al sujeto como transformador del mundo, dándole un nuevo sentido a su devenir y estableciendo la racionalidad como pilar fundamental en las relaciones sociales. Es en este contexto donde nace la política moderna, entendida como el espacio en el que se constituye, disputa y produce el orden social. Uno de los mecanismos más eficientes para mantener el poder político es la estatalidad, herramienta cuya función es- bajo la lógica hobbesiana- un espacio cuya función es resguardar la autodestrucción del hombre. Ahora bien, teniendo en cuenta lo anterior, podemos encontrar distintos modos de regulaciones de la entidad estatal, entendidas como el conjunto de subsistemas que se articulan en función del Estado y sus diversas formas que se han constituido a lo largo de la historia moderna occidental: El Estado Liberal, el Estado de Bienestar y el Estado Neoliberal.
Este ensayo tiene por finalidad destacar los fundamentos principales del Estado de bienestar, el contexto de su surgimiento, su desarrollo y posterior crisis, dando paso al Estado neoliberal. Pues bien, debemos saber que la aparición del Estado de bienestar está íntimamente relacionada con la crisis económica de 1929, las fallas en el mercado capitalista liberal y la sobreproducción. Por ende, el capitalismo como modo de producción permitió hacer crecer exponencialmente las fuerzas productivas, haciendo que estallasen en su máxima capacidad, pero empeorando las relaciones sociales de producción a través de la explotación y la implementación del salario. A partir de esto se vio impulsado el rol del Estado en la regulación del mercado y en la organización social, garantizando el bienestar colectivo de la esfera pública a través de un “contrato social”, es decir, el Estado se desarrollara como agente interventor de la economía.
Es por esto que surge una nueva “legislación social”, en un contexto de postguerra, el cual se extendió por gran parte de Occidente, siendo estos en gran medida beneficios en donde se buscaba que las personas viviesen en mejores condiciones de las que se encontraban (resultó inevitable la invisibilidad de los efectos sociales producidos por la producción capitalista en la sociedad, sobretodo en el mundo obrero). Claro es que las ayudas difirieron en la forma dependiendo de cada país, con esto nos referimos a que en cantidad y calidad fueron distintas.
El pilar teórico de la nueva economía keynesiana se basa en la crítica impuesta hacia el principio de equilibrio general de la economía a largo plazo de la lógica liberal ortodoxa y que la “mano invisible” no sirve como herramienta para afrontar los problemas socio-económicos a corto plazo. La solución a la imperfección del liberalismo individual posesivo sería otorgarle atribuciones a la entidad estatal como garante de desarrollo y agente activo en el proceso de modernización de la sociedad. Es de este modo como se plantea la idea de bienestar social, modo en el cual el Estado debe garantizar legitimidad política y social por medio del reemplazo de la lógica de la ética del trabajo por la de bienestar. El autor Zygmunt Bauman, en el capítulo “Ascenso y caída del Estado de Bienestar” del texto Trabajo, consumismo y nuevos pobres señala que el bienestar público “podía ser considerado como una forma de seguro colectivo contratado en conjunto, que cubría individualmente a todos los miembros de la comunidad; esto es, una póliza de seguro que promete compensaciones proporcionales a las necesidades individuales, no al monto de las cuotas pagadas por cada uno”[1].
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