El empirismo de Locke y Hume

1. EL EMPIRISMO DE LOCKE Y  HUME

La filosofía de Locke y Hume se debe comprender en el contexto del movimiento ilustrado que el mismo Locke comienza en Inglaterra en el s.XVII, centrando su filosofía en el desarrollo de una explicación sobre el ser humano basada en dos cuestiones: ¿qué conocimientos puede lograr el ser humano? ¿cómo se debe organizar la sociedad? Hume, por su parte, se propone estudiar al hombre aplicando los mismos métodos de indagación de las ciencias empíricas (observación, experimentación y generalización inductiva), para no sólo saber cuál es el alcance del conocimiento humano, sino también qué ciencia es posible hacer, y si es posible el conocimiento metafísico.

En su obra Ensayo sobre el entendimiento humano Locke estudia el alcance y los límites del conocimiento humano. Según él, nada hay en el entendimiento humano que no haya sido percibido por los sentidos.  Al contrario que Descartes, Locke descarta que existan ideas innatas. Según el empirismo de este filósofo, la mente va acumulando ideas (contenidos mentales) gracias a la experiencia, ya sea externa (dando lugar a ideas de sensación) o externa (ideas de reflexión). A su vez, las ideas se dividen en:

-Ideas simples. Son ideas que derivan de le experiencia sensible o de las percepciones internas del sujeto. Según su origen, se clasifican a su vez en:

      1. Ideas simples de sensación. Este tipo de ideas se originan en nuestra mente, derivando de experiencias sensibles de un solo sentido, como por ejemplo colores; o de varios sentidos conjuntos, como la idea de figuras.

      2. Ideas simples de reflexión. Estas ideas se originan en la mente derivadas de percepciones internas del ser humano, como las emociones; y de los actos de voluntad.

-Ideas complejas. Son ideas elaboradas por la mente del sujeto mediante la combinación de ideas simples. Son conceptos abstractos que no se refieren a una realidad empírica de forma directa, sino de un modo indirecto. Existen tres tipos de ideas complejas:

      1. Relaciones. Son ideas formadas a partir de ciertas conexiones establecidas entre varias ideas simples, que pueden no ser directamente perceptibles. Un ejemplo es la idea de paternidad.

      2. Modos. Son los estados, propiedades o afecciones de las cosas percibidas o sentidas. No pueden ser percibidos en sí mismos. Un ejemplo es el color.

      3. Sustancias. Son las ideas formadas por la mente a partir de la experiencia de diferentes sensaciones que recibe unidas. La mente supone que son inherentes a un sustrato no observable denominado sustancia. Un ejemplo es la idea de cualquier realidad, pues percibimos sus cualidades, pero nada que se corresponda con la sustancia en sí.  La mente forma tres ideas de sustancia.

• La idea de sustancia extensa o Mundo. Deriva de la sensación de las cosas externas que causan en la mente la idea de su existencia. De la existencia del mundo tenemos un conocimiento sensitivo.
• La idea de sustancia pensante o Yo. Deriva de la reflexión interna que causa en nuestra mente la idea de la existencia de un Yo pensante. De la existencia del Yo tenemos un conocimiento intuitivo.
• La idea de sustancia infinita o Dios. Se forma en nuestra mente conforme a una demostración racional. No es una idea innata, por lo tanto. De la existencia de Dios tenemos un conocimiento demostrativo.

 Según Locke podemos conocer la existencia de estas realidades, pero no su naturaleza, el ser humano no sabe cómo son las cosas en sí mismas, la esencia es inaccesible al conocimiento humano. El conocimiento obtenido, por lo tanto, es probable. Esta conclusión, sin embargo, no da lugar al escepticismo radical, pues Locke acepta la existencia de las sustancias. Esto se sabe por sensación del Mundo externo, por intuición del Yo y por la demostración de Dios, aunque no podemos llegar a un conocimiento mayor, el conocimiento humano es limitado.

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