El siglo de la industria: la revolución industrial.

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE QUERÉTARO

FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES

“EL SIGLO DE LA INDUSTRIA”

BREVE ENSAYO SOBRE LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL

LUIS FELIPE HERNÁNDEZ ZÚÑIGA

Área Interdisciplinar 2° Semestre
Docente: Omar Arcega
Conformación del Mundo Moderno

Junio de 2015

                                                           INTRODUCCIÓN
Comúnmente al iniciar una carrera de humanidades o al hablar de la modernidad hay una época histórica que es muy importante tomar en cuenta, los siglos  XVIII Y XIX representan más que nada el origen de la época moderna. Un enorme cambio radical surgió a partir de esta época, comparado con la historia de siglos atrás donde la mayor oligarquía eran sistemas bastante teológicos y monárquicos. Es en Europa donde este desarrollo comienza llevarse al cabo, a partir del surgimiento de movimientos basados en diversos postulados que ofrecían una alternativa al sistema establecido. El proceso de la superación del feudo (en gran parte), se llevaría al cabo con una gran serie de revoluciones en ámbitos religiosos, económicos, científicos y políticos, entre otros factores.

La muy citada “Revolución Francesa” es el punto referente de partida del gran movimiento que cambiaría la realidad y el sistema predominante de aquel entonces, la Ilustración, donde uno de los mayores ideales es la razón humana y la ciencia como principales modelos para la explicación y resolución de los problemas tanto cotidianos como universales del ser humano. A partir de aquí se concibieron los mayores pensadores que postularían gran parte del funcionamiento de la sociedad moderna y una buena parte de esas ideas estarían hasta hoy en día vigentes.

Sin embargo, esa revolución de ideas solo sería el mayor antecedente de otros grandes cambios, ya que a partir de aquí existió una mayor posibilidad de romper los esquemas anteriores a ese tiempo. Conforme la burguesía predominaba la nueva oligarquía y las naciones potencia necesitaban extender su dominio comercial o lograr una mayor participación en el mercado, eran necesarias las estrategias para producir, vender y asegurar la mayor ganancia posible. El desarrollo tecnológico y científico fue también factor importante para desarrollar los mecanismos industriales que acelerarían la explotación de materia prima y la transformación de esta en diferentes productos, y la sociedad, que una vez se sustentaba mayormente de la agricultura y el trabajo artesanal pasaría a obtener una oferta de empleo basada en la manufactura, llevando  a esto una explosión demográfica y acelerada urbanización. La Revolución Industrial trajo consigo grandes avances para la humanidad y cambios drásticos en la sociedad… ¿pero a qué precio? ¿Y qué repercusiones trajo? ¿Y quiénes fueron los mayores beneficiarios?

Auge

La revolución Industrial es generalmente definida como la transformación sobre producción y consumo ocurrida a finales del siglo XVIII y principio del siglo XIX, aunque también se extiende hasta la mitad de este siglo (en algunos casos se hablan de dos revoluciones industriales). Esta época se remota a la Gran Bretaña, en efecto, gran parte de los logros de la revolución industrial es mayormente exclusiva para Gran Bretaña, mientras un conjunto de países Europeos se ven influidas por esta transformación, a tal grado que también se incluye el concepto de “Segundo Orden Mundial”, pero la potencia que impero en esta etapa fue sobre todo Gran Bretaña.

Anterior a esta época, países como España, Portugal, Holanda, Francia e Inglaterra (Kennedy, 1989) se habían disputado grandes extensiones de territorios, que fueron administrados por estas potencias durante muchos siglos, así como el dominio de rutas comerciales. Para las últimas décadas del siglo XVIII, surgen conflictos y transformaciones, Francia después de su Revolución se dio a la tarea de expandir su dominio durante el régimen de Napoleón.
Solo los británicos pudieron afrontar estos acontecimientos, donde España y Portugal perderían su poderío (sobre todo con las independencias latinas), Francia estaría destrozado por las Guerras y el poco poderío de Holanda y Rusia.            

El Reino Unido tenía el ambicioso objetivo de establecer un nuevo orden global, comenzando con cuestiones internas, a pesar de las guerras europeas o la pérdida de su colonia americana. A pesar de ser vencedor, a Gran Bretaña tenía que distanciarse de intervenir con el resto de Europa (Principio de Intervención). A raíz de esto se establecieron las políticas nacionalistas de la “Splendid Isolation”, las cuales “liberó recursos para consolidar la presencia Británica en Canadá, iniciar la conquista, el poblamiento de Australia y someter a India” (Ibídem, 1989)

El comercio Inglés se verá mayormente desarrollado en la rama industrial, se le atribuye a la invención de la Máquina de Vapor de James Watt en 1782 como precursor de las tecnologías que servirían para cambiar la forma de hacer Industria. Cabe destacar que no hay una fecha fijamente establecida para el inicio de la Revolución Industrial, sin embargo, el contexto nos permite explicar que llevaría a cierta nación a desarrollar un fenómeno que no se había visto en décadas o siglos antes.

La Industria

Nuevas técnicas agrarias, crecimiento de inversiones, nuevas técnicas de cultivo, maquinaria agraria como la sembradora mecánica y el desarrollo de técnicas químicas para la protección del campo fueron algunas de las innovaciones que protagonizarían la llamada “Revolución Agrícola” (Ferreyro, 2010). Aunado a esto, la manufactura inglesa aumentó en cuanto comenzaron a incurrir y fabricar más industrias, desde los textiles de algodón, y después, el ferrocarril, la metalmecánica y la siderurgia. Los propietarios no solo estaban de acuerdo en que la producción se masificara y se consumiera dentro de las islas británicas, también habían visto oportunidades en diversos países, sobre todo en los que la Corona Inglesa tenía a su merced. Por ende, los industriales vieron en cada nación recursos que solo ellos podrían explotar y fabricar, así aumentar su oferta, además, como estaban en competencia con otras potencias era necesario convertirse en un mayor exportador de productos, en este caso Gran Bretaña impuso aumentos a las importaciones e intensificó la exportación, convirtiendo a buena parte del mundo en cliente de la industria Británica.

...