La Revolución Industrial del Siglo XIX

1. Introducción

La Revolución Industrial del siglo XIX tuvo a todas luces y esto se nota en la actualidad, una repercusión positiva en la vida de las personas de esa época, pues cambió radicalmente las actividades económicas de quienes ahí vivían, creando nuevas formas de subsistir dentro de la más creciente modernidad y  productividad, ya que estas se basaban en los últimos adelantos científicos y en una producción más mecanizada y efectiva para avanzar en un nuevo mundo de creatividad y trabajo. El trabajo, lleno de adelantos científicos mecanizados de una tecnología creciente y contemporánea, distinta a la anterior que era menos activa. Es entonces menester decir que estos cambios a parte de crear una nueva forma de producir, crearon una nueva sociedad, mejor preparada para los tiempos que ya se avecinaban.

1. Argumentación:

En primer lugar, la Revolución industrial del siglo XIX mejoró el nivel  de vida de la sociedad emergente de esa época.

En medio de un ambiente de cambios y de adelantos científicos en la industria emergente de la época del siglo XIX, se puede decir que esta sociedad estaba predestinada a mejorar, pues las estructuras sociales se transformaron y produjeron más, creándose clases sociales más sólidas e importantes por su destacado y fortalecido desarrollo, así como crecimiento desmedido. La sociedad creciente de ese momento entonces se volvió más compleja y mejor, pues se basaba en el adelanto reinante de una época plagada de adelantos científicos y creación de maquinarias que a la larga mejoraría el estado de vida de los países hoy llamados industrializados.

“A un nivel la revolución industrial, creó un sistema social maravillosamente integrado, con sus propias tecnologías distintivas, sus propias instituciones sociales y su propios canales de información, todos ellos perfectamente ensamblados entre sí”. La tercera ola de Alvin Toffler,

“A juicio personal, creo que la Revolución es totalmente lo contrario al planteamiento anterior, ya que si bien efectivamente se reemplazó la mano de obra por las máquinas, esto permitió un aumento en la producción, un crecimiento económico, demográfico y también tecnológico. Por otro lado, no se dejó gente sin trabajo, puesto que las industrias debían poseer obreros para la realización de los productos, siendo esta una salida para muchas personas que antes de la revolución no tenían un trabajo” Ensayo acerca de la Revolución industrial de Gonzalo Pattinelli D.

En segundo lugar la mecanización provocó el aumento de la productividad en esta sociedad que ya se vislumbraba como industrializada y moderna.

Uno de los elementos sustanciales y primordiales  de la mecanización y modernización industrial de la época, fue la utilización de un nuevo tipo de energía que desplazaría a todas las anteriores: James Watt haría entonces su aparición para inventar la máquina del vapor, cuya producción requería en su momento de la utilización del carbón y que se convertiría en el primer motor de la bien llamada Revolución industrial del siglo XIX. La invención de este elemento hizo que se trabajara con más energía y eficacia en la producción de elementos industriales, las factorías hacen su aparición como el ejemplo más claro de la producción en masa que haría de esta actividad económica, más automatizada, eficiente y rentable por donde se le viese. La mecanización exigía además de una capacitación continua y del mejoramiento de los trabajadores que estaban ávidos de conocer nuevas formas de trabajo, de ahí que aparecieron los primeros técnicos y una incipiente ingeniería preocupada por lo procedimientos y por su producción más rentable.

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