Historia De La Arquitectura I

CLASE: 01

TEMA: Introducción

FRASE DEL DÌA: “La arquitectura es el arte de organizar el espacio” -Auguste Perret-

Las 7 bellas artes

Artes espaciales

Arquitectura: Arte de proyectar y construir edificios.

Pintura: Arte de pintar.

Escultura: Arte de modelar, tallar o esculpir en barro, piedra, madera.

Artes temporales

Música: Arte de combinar los sonidos de la voz humana o de los instrumentos, o de unos y otros a la vez, de suerte que produzcan deleite, conmoviendo la sensibilidad, ya sea alegre, ya tristemente.

Literatura: Arte que emplea como medio de expresión una lengua.

Artes espacio-temporales

Danza: (Baile) Acción de bailar.

Cinematografía: Captación y proyección sobre una pantalla de imágenes fotográficas en movimiento.

CLASE: 02

TEMA: Historia de los contenidos universales en las obras construidas, dadas como arquitectónicas.

FRASE DEL DÌA: “La arquitectura moderna no significa el uso de nuevos materiales, sino utilizar los materiales existentes en una forma más humana.” –Alvar Alto-

En el momento en que va a nacer la historia con la aparición de las primeras grandes civilizaciones, el hombre, sin saberlo, ha sentado las bases fundamentales que se encontrarán en los desarrollos futuros del arte.

CARNAC

Las ringleras de monolitos de Carnac nos suministran magnífica oportunidad para perseguir la sustancia que hace considerar a estas obras primitivas como la alborada de la arquitectura de una civilización. Quienquiera que, sin saberlo, llegue a este campo, se asombrará de encontrar una serie de megalitos, cuya colocación en ningún momento atribuirá a fuerzas de la naturaleza, sino a gigantesco esfuerzo humano.

¿Porqué se nos da esta ringlera de rocas como obra humana? Por que se ve artificialmente dispuesta la piedra, de manera inconfundible con la forma habitual de la naturaleza.

STONEHEGE

En este conjunto apreciamos con igual o mayor claridad el carácter de artificialidad, pues sólo presenta el sentido geométrico que antes hemos comprobado en las ringleras, según los arqueólogos, esta construcción megalítica es de aproximadamente mil quinientos de la era antigua.

De inmediato se impone lo que hemos aprendido en el caso de las ringleras de Carnac: el geométrico, la interpretación sensorial, y macroscópica del cosmos por medio de la geometría de las líneas, los planos axiales y el círculo que ordena la obra de modo que denominamos la composición.

Hay sin embargo al lado de esta composición eminentemente humano y de oblación a la deidad, otro aspecto que importa desentrañar: el del aprovechamiento de los espacios que delimitan los monolitos y que, a la vez, adquieren sentido.

LA GRAN PIRAMIDE DE KEOPS

La gran pirámide se alza sobre el desierto, explotando el contraste con el paisaje. El hombre, desde el primer balbuceo de lo arquitectónico, intuye este contenido sustancial de lo artificial: no intenta competir con la naturaleza, sino domeñarla, por ello aprovecha las fuerzas ciegas del cosmos torciéndolas en cierto modo según su voluntad. La pirámide se levanta imponente e impresionante en el desierto.

Las circunstancias, al igual que los monumentos primitivos que hemos estudiado, representan un aspecto de la existencia colectiva, pues si el faraón se afanaba en construirse su tumba inviolable, ¿esta construcción en que reposaría su cuerpo no era un aspecto de la vida egipcia de su tiempo?

Se construía una espacialidad acorde con la complejidad que se daba a la existencia colectiva. O sea, lo que hemos intuido en los casos anteriores se hace más complicado, pero sustancialmente significa lo mismo.

La pirámide del Sol, Teotihuacán.

Al contemplar nuestra pirámide teotihuacana, construida milenios de años después de las egipcias, encontramos que lo descubierto hasta ahora por los arqueólogos, hace ver que formas semejantes en lo geométrico a las egipcias, particularmente a la escalonada de abusir, ostentan sistemas constructivos diferentes, relacionados con la naturaleza geológica de la localidad, pero también un destino diferente; la pirámide de Teotihuacán es un templo o quizás un ara o simple adoratorio. Pero como acontece en los casos antes observados, es construcción en que el hombre desenvuelve porciones de vida colectiva. Lo arquitectónico es manifiesto e inconfundible.

CLASE: 03

TEMA: El espinazo de la noche

FRASE DEL DÌA: “Llegaron a un agujero redondo en el cielo… que resplandecía como el fuego. Esto, dijo el cuervo, era una estrella” –Mito esquimal de la creación-

Durante mucho tiempo el instinto humano de entender quedó frustrado por explicaciones religiosas fáciles, como en la antigua Grecia, en la época de Homero, cuando había dioses del cielo y de la Tierra, la tormenta, los océanos y el mundo subterráneo, el fuego y el tiempo y el amor y la guerra; cuando cada árbol y cada prado tenía su dríada y su ménade.

Luego, hace 2500 años, hubo en Jonia un glorioso despertar, se produjo en Samos y en las demás colonias griegas cercanas que crecieron entre las islas y ensenadas del activo mar Egeo oriental. Aparecieron de repente personas que creían que todo estaba hecho de átomos; que los seres humanos y los demás animales procedían de formas más simples; que la Tierra no era más que un planeta que giraba alrededor del Sol. Y que las estrellas estaban muy lejos de nosotros.

Esta revolución creó el Cosmos del Caos. Los primitivos griegos habían creído que el primer ser fue el Caos, que corresponde a la expresión del Génesis, dentro del mismo contexto: “sin forma”. Caos creo a una diosa llamada Noche y luego se unió a ella y su descendencia produjo más tarde todos los dioses y los hombres.

Pero en el siglo sexto antes de Cristo, en Jonia, se desarrolló un nuevo concepto, una de las grandes ideas de la especie humana. El universo se puede conocer, afirmaban los antiguos jonios, porque presenta un orden interno: hay regularidades en la naturaleza que permite revelar secretos. La naturaleza no es totalmente impredecible; hay reglas a las cuales ha de obedecer necesariamente. Este carácter ordenado y admirable del universo recibió el nombre de Cosmos.

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