Historia Universal Del Derecho

HISTORIA UNIVERSAL DEL DERECHO

TEMA VII DE LA PAZ DE WESTFALIA A LA REVOLUCION FRANCESA

FONDO HISTÓRICO GENERAL:

En el año de 1648 se dieron dos acuerdos firmados en las ciudades de Osnabrück y Münster, uno el 15 de Mayo y el otro el 24 de Octubre a los cuales se les llamaría “La Paz de Westfalia”. Con estos tratados se ponía fin a la Guerra de los 30 años, que había entre los Estados Beligerantes en Alemania como eran los Príncipes Protestantes por un lado y Sacro Imperio y católicos por otro, la cual había iniciado en 1618 con la Defenestración de Praga.

El rey Luis XIV, también llamado el Rey Sol fue la figura más importante de esta época, ya que gracias a Él se logra la consolidación de la Monarquía Francesa en contra de las fuerzas feudales y de la burguesía. Con el triunfo en la rebelión de la Fronda, convirtiendo la época Barroca en una fase esencialmente Francesa.

Después del conflicto que arrasa con Alemania y que suponía la ruina de las pretensiones de la Casa de Austria, se reúnen los representantes Diplomáticos del Sacro Imperio Romano-Germánico, España, Francia, Suecia, Países Bajos y una multitud de Príncipes Alemanes y firman el tratado.

Gracias al tratado de La Paz de Westfalia, no solo se hicieron reajustes territoriales, también triunfaba la idea de Estado Francesa la cual, rechazaba la injerencia de poderes extraños en los asuntos internos del reino; se rompe también con la idea de España y Austria de la universitas christiana por la cual antes del tratado el Emperador y el Papa mediaban en los asuntos de toda la cristiandad por considerar que era una Gran República de distintos Estados, sometidos a los poderes tradicionales. De este modo los conflictos clave como la religión del Estado quedaron solventados.

En 1685 la revocación del Edicto de Nantes lanza a la emigración a 300, 000 protestantes franceses, intelectuales e industriales hacia Holanda, Prusia, Inglaterra y América. En 1715 a la muerte del Rey Sol, los sucesores Luis XV y Luis XVI y sus regímenes hunden a Francia en una agonía Política y Social. Además de las constantes guerras que dejaban agotada a Francia, perfilando con todo esto a la revolución Francesa en 1789.

Entre el periodo barroco y la época rococó, se presenta la revolución científica e industrial, resultado de la liberación renacentista del pensamiento respecto a las trabas eclesiásticas, también de la ampliación de la perspectiva occidental. Desde mediados del siglo XVIII se multiplican los inventos, en combinación con los métodos matemáticos, introducidos en los siglos XVII y XVIII, además nuevos conocimientos científicos e instrumentos de observación, con esto Inglaterra se convierte en el primer país industrial, introduciendo paulatinamente a todo el planeta en la era tecnológica.

La moderna actitud de observación se manifiesta también en doctrinas humanitarias como las de Voltaire, Rousseau, Locke, Montesquieu y Vico; luego los déspotas ilustrados incorporan la nueva actitud racionalista a la política económica y social. De esta época llamada “Era de las Luces” nace el espíritu que provoca aquella revolución que estremecería a toda Europa y cuyos desordenes llevarían a la conquista y dictadura de Napoleón en Europa, trasladando a otros países la ideología de la Revolución Francesa.

Las nuevas ideas políticas fomentan los anhelos de independencia de las colonias inglesas, naciendo así Estados Unidos de América y también provocarían la independencia de Hispanoamérica. Durante esta fase la burguesía provoca las tres revoluciones que cierran este periodo: la americana, la francesa y la industrial.

Inglaterra se anuncia como el próximo súper poder y más tarde Prusia conquista un lugar en segunda fila. En este periodo la humanidad occidental casi llega a formar un inventario completo de las regiones del planeta: se alcanza un conocimiento del 83% de la totalidad del planeta en 1800. El resultado de estos conocimientos era el colonialismo ingles, portugués y holandés, en combinación con la revolución industrial contribuyo al surgimiento del capitalismo vigoroso del siglo XIX ayudado por la ideología del liberalismo e impulsado por la obra de Adam Smith, refutación del mercantilismo y del intervencionismo estatal o gremial.

LA FILOSOFÍA POLÍTICA:

Esta fase está llena de aportaciones de los intelectuales ingleses durante el siglo XVII, como THOMAS HOBBS que en su libro “LEVIATAN” llega a una conclusión lo natural no es la intuición de lo bueno, la obediencia de una voz interna que nos indique que es lo justo, sino la lucha descarada. Además el Estado-Leviatán que nos dice: “La soberanía puesta en manos del Monarca es indivisible por esencia y los que hicieron entrega de su libertad ya no están facultados para retirarla”, en el momento de originarse la vida estatal, se realiza el canje de la libertad individual por la paz social. Estas teorías le venían como anillo al dedo a los Estuardo: Jacobo I, Carlos I, Carlos II, Jacobo II y Enrique VIII, todos con ideas y características peculiares en sus regímenes como eran la intransigencia, la pereza, la irresponsabilidad y obsesiones por anular la política eclesiástica. Con el último de estos monarcas el Leviatán (Estado) se había vuelto ciego respecto de los límites de su poder y el resultado fue la revolución de 1688, fructífera para Inglaterra convirtiéndose en un modelo para los progresistas continentales de las próximas generaciones.

En esta fase de filosofía política Locke enriquece el pensamiento político con la idea de que ciertos derechos individuales sean inviolables. Después de la contribución de Inglaterra a la filosofía y la práctica político-jurídica del siglo XVII le toca el turno a Francia en el siglo XVII.

Montesquieu.- El Elabora en 1743 el libro denominado “El espíritu de las leyes”, el cual establece que la independencia del ciudadano depende de la separación del poder en tres entidades fundamentales para el estado; El ejecutivo que administra, El legislativo que crea las leyes, el judicial que aplica las leyes. Llama la atención sobre la intima conexión que existe entre el derecho de cada país y cada época y su ambiente material o cultural.

Voltaire se convierte en un apóstol de la tolerancia religiosa peleando por una modernización del arcaico sistema penal, dejando frases que identifican a esta etapa como “Podre no estar de acuerdo en lo que dices, pero defenderé hasta la muerte lo que piensas”.

Juan Jacobo Rousseau,

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