Historia de las falsedades. Las rayas que se cruzan indican contradicción.

Historia de las falsedades

En la antigua China las primeras referencias grafológicas:

Los trazos rígidos indican energía.

Las rayas dobles indican perseverancia.

Las rayas que se cruzan indican contradicción.

Confucio que decía “La escritura puede infaliblemente demostrar si viene de una persona noble o una vulgar”

Los Faraones egipcios y los reyes de Pérgamo rivalizaban por nutrir sus bibliotecas, en lo posible, con manuscritos originales, y debido a ello, fueron burlados con frecuencia. En este sentido, merece destacarse cómo Ptolomeo Filadelfi dio lugar a algunas falsificaciones al pagar a elevado precio las obras de Aristóteles, con lo que indujo a algunas gentes a poner el nombre de este autor a los escritos de otros.

El investigador francés Champollion hace mención al fraude más antiguo en la historia de las falsificaciones: el que realizaron los reyes en los jeroglíficos murales de Egipto, sustituyéndose en el lugar de los victoriosos, a fin de eliminar sus derrotas anteriores engañando probablemente a sus contemporáneos y a las generaciones de muchos siglos.

En Grecia, Aristóteles relacionaba la personalidad de un individuo con su escritura.

También eran frecuentes en Grecia las falsificaciones de discursos, de testamentos, contratos, libros de cuentas, y declaraciones testimoniales escritas[vii], así como los fraudes en materias militares, tal como relata Aristofanes en lo referente a la manipulación de las listas de los llamados a filas. Conscientes de la graves consecuencias de algunas de estas falsificaciones, se dictaron diversas medidas para prevenirlas, como el uso testigos en la redacción de documentos, la estampación de sellos y la custodia de los mismos en el domicilio de ciudadanos honorables.

Nerón intentaba descubrir a través de la escritura si las personas que le rodeaban eran de fiar o eran traidores.

Suetonio, biógrafo cortesano de los Césares, nos dice que, Titus (Tito Flavio Sabino Vespasiano) había podido ser el más grande falsificador de su tiempo.

Refiriéndose a la letra del emperador Augusto, que no separa las palabras y que no pasa a la línea siguiente las palabras que le sobran al final de una línea, sino que la coloca debajo, envueltas en un rasgo

En España

El monasterio de San Millán, próspero hasta fines del siglo XII, sufre, a principios del XIII, las consecuencias de la aparición de gran número de nuevos centros de peregrinación.

Los monjes emilianenses compensan las pérdidas con una serie de documentos falsos (1210-1250)

La falsificación más osada fue la del Privilegio de Fernán González, llamado de los Votos de San Millán Según ese documento, todos los pueblos de Castilla y partes de Navarra debían pagar a San Millán una cuota anual, supuestamente establecida por Fernán González en 934

destaca una famosa bula de 1297 del papa Nicolas IV que permitía el matrimonio de Sancho IV (Hijo de AlfonsoX) con su tía María de Molina, que legitimaba su descendencia

Francia falsificación de la firma de Carlos IX, en un documento en que el soberano abdicaba del trono de Francia. Para el examen de ese documento fueron comisionados jurídicamente, por su saber y competencia, los más eminentes hombres de la época. Dio lugar a la fundación, al año siguiente, (1570), de la "Comunidad de escritores expertos verificadores", cuyos componentes tuvieron, durante varios años, la mayor consideración oficial.

Leyes y normas

En la cultura Hitita (XVIII y XII a. C.):

“Quien altere las palabras del Rey será reo de muerte”

Quien quiera que altere las palabras de la tableta será aniquilado por el Dios de la Tormenta”

Roma Año 78 a. C. Se dicta por Lucio Cornelio Sila la denominada “Ley Cornelia”. donde establecía la comparación de escrituras cuando se sospechara la veracidad de un manuscrito. En cualquier caso, el cotejo de documentos era el último recurso probatorio, cuando no se hubiera podido hallar otra prueba (testifical, declaraciones del notario, etc), lo cual indica la escasa validez otorgada al mismo.

Con el inicio de la Edad Media, tras la caída del Imperio a finales del siglo IV de nuestra era, se detuvo la evolución de las ciencias jurídicas, sustituyéndose la prueba de testimonios y de comparación por la confesión del imputado, generalmente obtenida a partir de torturas. Durante este período, proliferaron los títulos nobiliarios falsos o adulterados, como así también, los privilegios reales y las bulas papales que, al no existir un método para diferenciar lo falso de lo verdadero, circulaban con total impunidad

"Fuero Juzgo" siglo XIII traducción del Liber Iudiciorum: Si existe sospecha sobre lo escrito, debe confeccionarse lo que hoy llamamos cuerpo de escritura, para proceder a cotejar lo dudoso con lo auténtico.. El obispo de la zona y el juez examinen los documentos y determinen si los escritos son similares para declarar sobre la legitimidad de lo dubitado

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