La Columna De Hierro

1. LA REPUBLICA

1.1 Antecedentes

La historia del libro de la Columna de Hierro se centra básicamente en la segunda fase del gobierno de la cuidad es decir en la “Republica”, como ya hemos visto según la leyenda, en el año 510 a. de J. C., los patricios expulsaron al último rey de Roma, dando de ese modo las bases para la fundación de la república, la cual duraría aproximadamente 450 años.

La República Romana se rige por una constitución compleja, que se centró en los principios de una separación de poderes, controles gubernamentales, equilibrios de poder. La evolución de la República Romana fue fuertemente influenciada por la lucha entre la aristocracia, patricios, Y los romanos con riquezas, pero que no eran de familias nobles, que eran apoyados por los plebeyos por pertenecer a esta clase social.

Durante esta etapa se da la expansión del poderío romano, esta se da a raíz de la guerra contra Cartago, esta nación es derrotada por el ejército romano entre 264 y 204 a. de J. C., según la historia narrada por la autora Taylord Cadwell, esta guerra sucede en una etapa difícil en la vida del pequeño Marco Tulio Cicerón, ya que es cuando se encontraba, en la víspera de su ceremonia de madurez, es el auge de su amor por Livia, y sufre una perdida muy fuerte, la muerte de su abuelo; según la autora todos estos problemas hicieron que Marco no prestara atención a la situación por la que estaba atravesando su amada cuidad.

Sin lugar a dudas la expansión de Roma fue un punto clave para el surgimiento de la Republica. El secreto de la expansión de Roma radica en su capacidad de combinar un enérgico egoísmo colectivo con una inflexible disciplina, y esta combinación de utilitarismo con sentido de orden, y con la capacidad de ordenar y obedecer, ofrece al mismo tiempo un firme cimiento para el desarrollo del derecho.

Otros elementos favorables para la expansión era la intuición del senado para saber exactamente en qué instante abandonar momentáneamente su tenacidad, como ya se tiene conocimiento, el poder gubernamental en Roma, se encontraba dividido.

La expansión de Roma se debió en gran parte a una de sus instituciones “El Senado”, este organismo atreves de su prestigio, logro llevar al pueblo romano de triunfo en triunfo, hasta la época de los Gracos.

En resumen, de la organización interna de Roma, nació el poder exterior, y este a su vez provoco las fuerzas que causaron una nueva desintegración interna, y por consiguiente de los disturbios nació una forma de dictadura, que luego con la evolución de su derecho se transformaría en la autocracia del bajo imperio.

1.2 Las Instituciones Políticas Bajo la Republica

La republica fue el sistema que gobernó Roma por casi 500 años, las instituciones políticas de aquella época dieron a la cuidad una gran estabilidad, que solo fue posible gracias al equilibrio alcanzado por los tres poderes que representaban a los ciudadanos, los cuales eran:

• Las magistraturas

• El senado

• Los comicios

Durante el periodo republicano, se rompen las antiguas relaciones entre las denominadas gens y el senado, desde entonces, este cuerpo, compuesto de hombres libres y de nacionalidad romana, adquiere un gran poder para decidir sobre diferentes asuntos de la vida cotidiana en Roma.

En la historia contada por la autora Taylord Cadwell en su obra “La Columna de Hierro”, podemos darnos cuenta de la organización política de Roma, en el capítulo denominado “El Abogado”.

Ya que a lo largo de este capítulo podemos darnos cuenta, de que Marco Tulio tiene que tratar a diario con las personas que representaban estos tres poderes, sin embargo Marco Tulio se da cuenta de que el poder se encuentra en manos de gente a la que no le interesa legislar en beneficio del pueblo romano, sino esta en ese puesto solo para poder adquirir mayores riquezas y tener cierto control en la vida cotidiana de la cuidad.

Por lo visto en clase se puede comprender que el pensamiento de Marco Tulio es cierto, las decisiones sobre las Litis presentadas ante la instancias correspondientes, no eran decididas de manera justa, ya que no existía un análisis correcto sobre los asuntos.

Podemos notar claramente que la grandeza del poderío romano no se debía a la democracia, en el sentido que actualmente se da al vocablo, sin embargo no podemos negar que esta forma de política de gobierno puedo haber llegado a tener sus méritos, pero nos damos cuenta que la historia de la republica romana es una demostración práctica de la superioridad de la idea democrática.

Sin embargo la constitución republicana tenía ciertos aspectos que sin duda alguna podrían a ver logrado de las resoluciones de los magistrados y jueces fueran más adecuadas, como son:

• El veto

• El intercessio

Las instituciones políticas de la República parecen haber sido forjadas por la experiencia del pasado de Roma y la necesidad de adecuarse a los errores cometidos antaño, pero la realidad es que a lo largo de su historia, y de la evolución de sus instituciones estos mismos errores se vuelven a repetir por la ignorancia de dejar el poder en manos de gente incompetente.

1.3 El Senado en la época de Sila

El tiempo en Roma había cambiado ahora los ciudadanos romanos habían perdido la sencillez republicana, todos traban en este tiempo de superarse unos a otros con la viveza del color de sus túnicas, tanto largas como cortas, no había ni un solo color que no destacara a la luz del sol.

Pero sin embargo, la situación en roma comenzó a cambiar debido a la llegada de Sila, la cuidad de Roma no había conocido nunca un terror semejante, ni siquiera bajo la dominación de Mario, el viejo asesino, que había matado por locura y malicia infantil, Sila se regía por un ideología bastante diferente, mataba de un modo implacable y metódico.

Sila había colgado en el senado una lista con aproximadamente cinco mil proscritos, pero obviamente la cifra era de muchos más ciudadanos romanos en su mayoría de clase media; Sila se había llamado a sí mismo dictador supremo, este nombre por supuesto hiso que Sila diera a Roma su primera experiencia de una verdadera dictadura.

Sila proclamaba que había restablecido la paz en roma pero la gente tenía más miedo que nunca, decía que procuraría el tesoro de Roma, pero los impuestos eran más fuertes que en ninguna época de la ciudad, proclamaba “al final abra justicia, pero los ciudadanos temían con cada nuevo amanecer lo peor” .

Sila que ahora era el amo del Senado, nombre a sus favoritos en la asamblea publica, aumentando así su número a seiscientos, casi todos eran patricios o en su defecto hombres ricos que jamás habían favorecido a Sila, pero que

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