La Pertinencia Del Recurso De Gracia

La pena de muerte en Guatemala, y en términos generales, es el recuso con el cual se pretenden penalizar, los más graves delitos cometidos dentro de la sociedad, entendiendo que el mismo debe ser reservado para los casos más paradigmáticos que pudieran suscitarse, y bajo ningún punto de vista es permisible su utilización como un disuasivo de delincuencia.

En materia internacional, tanto la Convención Americana de Derechos Humanos, como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, han asumido el compromiso de garantizar y proteger la vida y todos los derechos fundamentales destinados a garantizar la dignificación de la misma, utilizando todas las instituciones y recursos que estén a su alcance.

Ahora bien, en Guatemala no sólo es pertinente políticamente proponer la vigencia del recurso de gracia, considero que es una obligación asumida por la República de Guatemala, el resolver este impase jurídico. Lo anterior en consecuencia de la abolición progresiva de la pena de muerte, que los tratados internacionales han plasmado en sus textos normativos y de los cuales Guatemala forma parte, dada la ratificación de los mismos.

Así pues, el hecho de que Guatemala no de una solución a esta problemática, deja de manifiesto dos afectaciones fundamentales: la primera, la antes mencionada, que como consecuencia derivará en el incumplimiento a normativas internacionales plenamente vigentes. La segunda, se enfoca en la falta de compromiso moral y también político, del Gobierno de Guatemala, dado que se está, evitando dar una respuesta a situaciones jurídicas plenamente establecidas.

Con lo anterior, me refiero a que cada persona condenada a muerte en la República de Guatemala, merece una resolución jurídica a su caso concreto, no es concebible que un Estado, deje en un impase jurídico, a personas cuyas condenas ya se encuentran plenamente establecidas. Más aún, también es irresponsable, no dar respuestas efectivas, a las víctimas o a sus familiares, que sufrieron los delitos, por los cuales se desprenden estas condenas a muerte. También es pertinente pensar que el no dar una solución jurídica pronta a esta temática, evidencia y crea, inestabilidad jurídica y falta de confianza en la administración de justicia.

Por último, debo manifestar que el Organismo Judicial, a mi consideración, a través de Corte Suprema de Justicia, es el ente encargado de otorgar en última instancia el recurso de gracia, motivado en que, al permitir que el Organismo Ejecutivo intervenga y modifique una decisión jurisdiccional, existe una clara intromisión a la independencia judicial, resabio histórico de la división de poderes, fundado en la figura de frenos y contrapesos, para permitir un pleno gobierno democrático.

En conclusión, debo decir que es imperante la vigencia del recurso de gracia, a través de un procedimiento

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