La Revolución Mexicana

La Revolución Mexicana

Para comprender el proceso de nuestra historia que conocemos como Revolución Mexicana, hay que tomar en cuenta primero los antecedentes de esta y la situación en que el país se encontraba en el momento en que se dio.

La dictadura porfirista en la que vivió México de 1876 a 1911, era un gobierno autoritario y represor encabezada por Porfirio Díaz Mori, jefe militar que asumió la presidencia mediante el Plan de Tuxtepec, lanzado por él mismo para evitar la reelección de Sebastián Lerdo de Tejada como presidente de la república. A pesar de que en este plan Díaz defendía la idea de la no reelección, no fue un ideal que incorporara en su gobierno, puesto que se reeligió tantas veces como quiso hasta que la Revolución logró su renuncia.

Díaz, a pesar de mantener un país mayoritariamente empobrecido y decadente, con un 70% de la población sumida en la pobreza y en la explotación por parte del otro 30%, que estaba conformado por ricos hacendados y dueños de las tierras y las industrias, logró conseguir un país estable y pacífico, que venía de una etapa histórica caracterizada por gran irregularidad en los gobiernos, poca estabilidad política y social y un crecimiento muy bajo en todos los aspectos. Díaz cambió la manera en que vivía México y le trajo grandes avances en las comunicaciones y en la industria, pero también sometió a la sociedad con preceptos severos que no tomaban en cuenta las exigencias de la sociedad.

La idea inicial de la revolución tiene como objetivo principal lograr acabar con estos preceptos y con el gobierno de más de tres décadas de Porfirio Díaz, que no daba oportunidad alguna para que los ciudadanos accedieran al poder presidencial. El inicio de la difusión del descontento contra Díaz y contra la reelección tiene lugar en las palabras de Francisco I. Madero, un rico hacendado del norte del país, que después de haber estudiado en el extranjero y gozar de popularidad y aceptación por parte de la gente, intenta contender contra Díaz en la búsqueda de ganar la presidencia. Cuando Díaz se da cuenta de que Madero quiere derrocarlo del poder lo manda encarcelar en San Luis Potosí, donde éste redacta el “Plan de San Luis” en el que pedía a la sociedad mexicana que se levantara en contra de la dictadura de Díaz y que se convocara a elecciones para que otros pudieran acceder a la presidencia. Cuando logra escapar de prisión, Madero huye a Estados Unidos para promulgar su plan, y cuando vuelve a México se entera de que ya tiene mucho apoyo entre la población, y que incluso algunos caudillos ya han comenzado a reclutar gente y a formar ejércitos que lucharán a favor de su causa.

Cuando Madero se aproxima a la Ciudad de México, Díaz decide marcharse, y toma el barco a París del puerto de Veracruz para así exiliarse hasta el día de su muerte en 1915. Al lograr consumar su propósito, Madero asume

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