La función social de la historia

TITULO DEL LIBRO Y AUTOR

TEMA QUE ABORDA

RESUMEN

PROPÓSITOS DE LA LECTURA

LECTURA:

La función social de la historia

AUTOR:

Enrique Florescano

En la composición de este libro se encuentran dos temas fundamentales para explicar el objetivo y la manera de actuar de la historia. En primer lugar se localiza la función social de ésta En segundo lugar, el autor maneja como tema principal los pilares de construcción historiográfica [La historia es la disciplina del] auto-conocimiento humano [...] Conocerse a sí mismo significa conocer lo que se puede hacer, y puesto que nadie sabe lo que puede hacer hasta lo que intenta, la única pista para saber lo que puede hacer el hombre es averiguar lo que ha hecho. El valor de la historia, por consiguiente, consiste en que nos enseña lo que el hombre ha hecho y en este sentido lo que es el hombre.

En la composición de este libro se encuentran dos temas fundamentales para explicar el objetivo y la manera de actuar de la historia. En primer lugar se localiza la función social de ésta, Florescano explica que la historia ha tenido distintas funciones, en cuanto al rescate del pasado se refiere, no obstante, la principal de ésta es el dotar a las personas de una identidad y de un sentido colectivo. Debido a esto, el reconstruir el pasado ha servido como escudo para restablecer lo realizado por la humanidad, legitimar la posición de un territorio, sancionar el poder establecido, fundamentar en un pasado compartido la aspiración de construir una nación, o para darle sustento a proyectos disparados hacia la incertidumbre del pasado, creando una relación con la experiencia no vivida con la cual nos identifiquemos y establezcamos una idea en común con cada individuo. Aunque la historia como maestra de vida, si bien, no nos puede enseñar lecciones, se convierte en algo intrínseco en ella pues se vuelve una condición humana.

Así mismo, Enrique Florescano nos habla sobre la importancia de tener una tolerancia hacia las diferentes formas de pensamiento, pues el estudio del pasado es un acercamiento a estilos de vidas distintos que se vieron tocados por diversos medios naturales y culturales. Es por ello que la persona que ejerce el papel de historiador debe estar abierta a diversas formas de pensamiento, de vida y con una apertura hacia lo diferente, explica el autor. La historia se encarga de estudiar el cambio de los individuos y las sociedades en el tiempo, los historiadores se empeñan en indagar “lo que había, lo que no hay aquí, lo que no hay ahora”, es decir, su objeto de estudio es el cambio de las sociedades; a pesar de esto, es importante aclarar que el historiador debe de anteponer la mirada del pasado y estudiarla con ésta misma antes que con su mirada.

En relación con este punto, el autor expone las condiciones del gremio historiador con la sociedad. Expresa la poca relación existente con el producto final, es decir, con la investigación realizada por un historiador con la sociedad. Asimismo, él explica que debido a la complexión de los textos realizados por este gremio se olvida que la historia puede ser una ciencia social dirigida a todo público en general, convirtiéndose en una forma para complacer a las mismas instituciones que manejan un léxico en común, acotando el número de lectores potenciales de cualquier investigación.

En general, en esta primera parte de La función social de la historia, se tratan los avances que han experimentado el conocimiento histórico y las barreras que han tenido que superar para construir su propio campo, cimientos en teorías, métodos y prácticas que las distinguen de otras disciplinas y saberes.

En segundo lugar, el autor maneja como tema principal los pilares de construcción historiográfica.

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