MATRIMONIO DE PAREJAS DEL MISMO SEXO
Enviado por Juan Bernal • 26 de Marzo de 2016 • Monografía • 3.320 Palabras (14 Páginas) • 320 Visitas
UNIVERSIDAD EXTERNADO DE COLOMBIA
MATERIA: METODOLOGÍA
MATRIMONIO DE PAREJAS DEL MISMO SEXO
NOMBRE: JUAN MANUEL BERNAL RUBIANO
DOCENTE: INGRID ALVARADO
BOGOTÁ D.C
14 DE ABRIL DE 2015
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
CONTEXTO HISTÓRICO
MATRIMONIO HOMOSEXUAL
MATRIMONIO HOMOSEXUAL EN EL MUNDO
MATRIMONIO HOMOSEXUAL EN COLOMBIA
PERSPECTIVAS DEL MATRIMONIO ENTRE PAREJAS DEL MISMO SEXO
CONCLUSIONES
BIBLIOGRAFÍA
INTRODUCCIÓN
El objeto de esta monografía es ilustrar el tema relacionado con el matrimonio entre parejas del mismo sexo. El tema será abordado en cinco momentos: primero, se hará un breve análisis histórico, mostrando como la homosexualidad ha estado presente a lo largo de la evolución humana; segundo, se reflexionará en la lucha del movimiento LGTBI en materia de igualdad de derechos; tercero, se estudiará la legalidad del matrimonio homosexual en el mundo y cuarto, la regulación de estas relaciones en Colombia. Por último, se examinaran las diversas perspectivas sobre el matrimonio entre parejas del mismo sexo, haciendo énfasis en la realidad que se vive actualmente en Colombia.
CONTEXTO HISTÓRICO
La homosexualidad ha acompañado a la humanidad a lo largo de la historia, no es un acontecimiento novedoso del cual no se tenga referencia alguna. Existen datos que verifican dicha afirmación, un ejemplo muy claro en la antigüedad puede llevarnos a La Antigua Roma, donde incluso, la práctica, actitudes y aceptación eran abundantes. Hay obras de diferente índole, tales como, literatura; poemas, dibujos; grafitos y comentarios relativos a las predilecciones de distintas clases de personajes, incluidos los emperadores. La Copa Warren[1] evidencia de forma concisa dicha afirmación, ya que se trata de una copa de plata hecha en Palestina hacía el año 10 de nuestra era, donde se ilustran escenas de acoplamiento sexual entre hombres adultos y muchachos adolescentes.
No obstante estos datos eran mucho más escasos que los de la Grecia Clásica, donde en su cultura estaba arraigada la llamada pederastia[2] homosexual según Dover[3]. Igualmente, al emprender el estudio de la antigüedad, se debe tener en cuenta que no es válido referirse a un concepto de homosexualidad, por consiguiente, es más certero darle un contexto de “prácticas homosexuales”, ya que si se daban, lo más común era la bisexualidad. Durante este periodo el matrimonio no era una institución fundada en el amor, sino un modo de obtener beneficios y de ganarse un estatus.
Con la Edad Media se extiende el teocentrismo y la intolerancia hacia la homosexualidad crece rápidamente, autoridades religiosas comienzan a perseguir metódicamente a quienes tengan dichas preferencias a partir del siglo XII. Según la narración bíblica de Sodoma, surgen interpretaciones cristianas donde los homosexuales deben ser castigados, se empieza a considerar también, que como en el relato bíblico, su práctica puede atraer la furia divina sobre los territorios donde se permitiera la sodomía[4].
Al transcurrir de los siglos XVII y XVIII, se manifiestan los primeros focos de subcultura homosexual moderna en las ciudades magnas de la época, París, Londres y Ámsterdam. Lo que provocó reacciones violentas por parte de las naciones, tratando de controlar estas conductas, imponiendo miedo y terror, condenando a las personas con estas preferencias a la muerte, eran asesinadas como escarmiento. El acontecimiento más extremo fue La masacre de Ámsterdam de 1730[5], considerada como la persecución más grave, realizada antes de la hecha por los nazis según el historiador Luis Cropton[6], y donde comienza el abandono de la idea de la sodomía como un vicio causado por la lujuria y nace la convicción de que se trataba del gusto particular de una minoría.
MATRIMONIO HOMOSEXUAL
Desde finales del siglo XIX el movimiento LGTB[7] conduce su lucha para conseguir igualdad en derechos, y sólo hasta el siglo XX verían un pequeño rayo de luz con la Declaración Universal de Derechos Humanos, la cual reivindicó al finalizar la Segunda Guerra Mundial, el 10 de diciembre de 1948 en la Asamblea General de las Naciones Unidas lo siguiente:
“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.” [8]
“Toda persona tiene los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.” [9]
Lo que sirvió en gran medida para lograr la despenalización de la homosexualidad en América y Europa, además de equiparar en algunos países el reconocimiento de uniones civiles y del matrimonio entre personas del mismo sexo. Se alcanzaría así, una equidad entre heterosexuales y homosexuales en materia jurídica en ámbitos como la herencia, los beneficios fiscales o el acceso a coberturas sociales de la pareja.
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