METODOLOGÍAS PARA EL APRENDIZAJE DE LA HISTORIA

“METODOLOGÍAS PARA EL APRENDIZAJE DE LA HISTORIA”

A primera vista se nos antoja un nombre rimbombante y excesivo para denominar uno de esos talleres de actualización que de cuando en cuando nos vemos obligados los profesores a cursar para requisitar nuestra permanencia o incorporación a la carrera magisterial; Puede parecer también que se trata de alguna colección de conocimientos técnicos para mejorar el desempeño de alguien que enseña o aprende Historia; Sin embargo, ha resultado un ejercicio académico interesante y provechoso en el que se ha tenido la libertad de trabajar en las propuestas particulares y las colectivas al tiempo de ir conociendo y reconociendo algunas estrategias de la metodología propiamente dicha.

A través de los instrumentos de la actual tecnología de información y comunicación los profesores de Historia se presentan en la internet con la creación de sitios conocidos como blogs en los que publican sus ideas y avances en las tareas que el propio curso ha demandado, sin evadir de forma alguna el reto que para muchos ha representado iniciarse en los avatares de la navegación en la nombrada red mundial.

A contrapelo de una realidad que los culpa del fracaso escolar y de los bajos índices de resultados, los maestros persisten en educarse, en saber, en ser mejores y más profesionales. También son los portadores de la lámpara de Diógenes que a pleno día trata de “encontrar al hombre”, en sí mismos, en sus estudiantes. Las maestras lo mismo, pues ya no existen diferencias determinadas por el género en el trabajo educativo. Tenaces, decididas, participan en el curso y la labor educativos. Ellas también persisten, igual que todos en mejorar la calidad de la enseñanza y no se arredran ante los vientos contrarios al progreso y al mejoramiento educacional de nuestro pueblo.

Me despido de Ustedes con unas coplas de la gran Judith Reyes, tamaulipeca y mexicana, cantora de los grandes movimientos sociales de México en 1968 y 1971.

“La ciencia es universal y débese impartir

Así lo dijo el primer virrey y lo he de repetir:

Un pueblo sin universidad no puede subsistir”

...