PARACAIDISTAS DE LA COLONIA MARÍA ISABEL Y DOS DE DICIEMBRE EN ATOYAC DE ÁLVAREZ

UNIDAD ACADÉMICA DE FILOSOFÍA Y LETRAS

LICENCIATURA EN SOCIOLOGÍA

NOMBRE DEL MAESTRO:

FAUSTO ÁVILA JUÁREZ

NOMBRE DE LA ALUMNA:

GRISELDA LUVIANO ALFARO.

MATERIA:

MOVIMIENTOS URBANOS POPULARES

TEMA DE ENSAYO:

PARACAIDISTAS DE LA COLONIA MARÍA ISABEL Y DOS DE DICIEMBRE EN ATOYAC DE ÁLVAREZ, GRO.

ÁREA MAYOR:

SOCIOLOGÍA POLÍTICA

ÁREA MENOR:

GESTIÓN MUNICIPAL

GRUPO: ÚNICO.

TURNO: MATUTINO.

MATRICULA: 07237881

Chilpancingo, Gro. A 14 De Marzo Del 2014

INTRODUCCIÓN:

Para Manuel Castells, los movimientos sociales urbanos, son aquellas prácticas sociales que convierten y modifican el orden establecido a través de la manifestación pública; efecto de los modelos de regulación, de un Estado gestor, incapaz de atender la necesidades o demandas de un población.

La problemática urbana es: “Una serie de actos y de situaciones de la vida cotidiana cuyo desarrollo y características dependen estrechamente de la organización social general” […] los movimientos sociales urbanos, son: “sistemas de prácticas sociales contradictoras que convierten el orden establecido a partir de las contradicciones específicas de la problemática urbana” (Castells, 2004).

La creación de un MSU se da como un rompimiento, entre la lógica de gestión Estatal (en este caso) de los servicios públicos y la pasividad de los individuos; para obtener un cambio social, mediante la manifestación de la inconformidad. No solamente son los problemas urbanos los que definen la existencia de un MSU, sino el grado de pasividad, el impacto social que tenga un problema urbano y otros factores.

Paracaidistas de la colonia María Isabel y dos de Diciembre en Atoyac de Álvarez, Gro.

“Dos factores claves que se convierten en causales de la emergencia de estos tipos de movimientos populares urbanos:

• 1) las contradicciones del desarrollo capitalista de las ciudades mexicanas

• 2) las implicaciones políticas del proceso de urbanización.

• La concentración de fuerzas productivas en el espacio urbano determina que la ocupación y apropiación del suelo y la instalación de redes, infraestructura y servicios privilegien la reproducción del capital relegando la atención de las necesidades inherentes a la reproducción de la fuerza de trabajo”

La colonia María Isabel y la dos de diciembre son el producto de la necesidad urgente de obtención de vivienda de las comunidades urbanas de escasos recursos económicos, o de migrantes llegados de zonas rurales, empujadas a abandonar sus tierras por múltiples motivos, y al no existir, generalmente, políticas que habiliten a estas personas a adquirir por medios legales viviendas dignas.

Estos asentamientos informales se caracterizan por ciertas condiciones en común:

• Viviendas con limitado acceso a los servicios tales como agua potable, gas para calefacción y cocina y red cloacal;

• Difícil acceso a vivienda ya que frecuentemente no hay caminos consolidados de acceso;

• Multiplicidad de condiciones económicas y sociales en un mismo barrio;

• Dificultades de acceso de ambulancias, bomberos y policía ante distintos eventos.

El surgimiento de estos asentamientos informales tiene varias causas, uno de los principales es la poca fuerza que dedican al tema del ordenamiento territorial los gobiernos locales y regionales que generalmente no tiene propuestas válidas para ofreces soluciones habitacionales a las poblaciones de baja renta y a los migrantes que continuamente llegan de las áreas rurales a inflar los cordones periurbanos.

Estas áreas se caracterizan por poseer un nivel muy rápido de desarrollo, no estructurado y no planeado. Para evadir la ley con la esperanza de mejorar su posición económica. Típicamente, la dinámica política y social interna está caracterizada por la solidaridad y/o la confrontación. Sin embargo, el conflicto interno es inherente en relación a la situación de la comunidad y los agentes externos, como las autoridades y los residentes circundantes. Una comunidad puede actuar en solidaridad al negociar con las autoridades o al invadir un terreno. Las autoridades, por lo general, adoptan una actitud pasiva respecto a estos barrios degradados, interviniendo tan sólo cuando su crecimiento genera desórdenes sociales, disturbios o crimen organizado.

La solidaridad puede ocurrir durante las negociaciones con las autoridades, pero las disputas pueden ocurrir durante la implementación de los programas acordados con las autoridades y durante el funcionamiento pleno del mismo establecimiento.4

Los líderes de la comunidad actúan como guardianes, las relaciones con las autoridades tienden a ser informales y por lo tanto, no reguladas. Debido a esto, es difícil que las instituciones formales de ordenamiento territorial puedan hacer repartos equitativos.

Los acuerdos se pueden elaborar sobre una base cotidiana. Debido a la complejidad de esta situación, muchos proyectos de mejoras no logran alcanzar los resultados deseados por las autoridades. En particular, muchos observadores critican a proyectos que entregan arrendamientos individuales, especialmente propiedad libre de impuestos. Sin embargo, también existen problemas asociados con el uso de formas comunales de arrendamiento (Fourie 1993).

El predio de tres hectáreas, donde viven unas 100 familias, fue invadido hace varios años, lo que originó la división de la tierra en dos partes: la colonia María Isabel, encabezada por el líder Eliseo Rebolledo Pérez, y la Lucio Cabañas Barrientos, por el representante del CCCLCB, José Luis Arroyo Castro.

Al principio los grupos trabajaron juntos. Gregorio Hernández Serrano –seguidor de José Luis Arroyo– reseñó que se dividieron “por fraudes del contrario”, como identifican a la familia de Eliseo Rebolledo. Acusó que esa fracción ha vendido 12 lotes a comerciantes y maestros, y que “lo mismo hizo en la (colonia) 18 de Mayo, donde negoció con los lotes y (ahora) reaparece como vividor”.

El dirigente del CCCLCB aseguró que Eliseo Rebolledo “cambió” algunos lotes por automóviles y llantas, e insistió que originalmente esa colonia “era para gente de escasos recursos” y ahora sus “contrarios” están lucrando con los espacios.

El Consejo Cívico Lucio Cabañas tomó el terreno a pesar de que el otro grupo no lo había desalojado. Calcula que podrían hacerse 15 viviendas ahí, y lo cercó con alambre de púas, lo que

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