Placeres, Amor E Interés En La Vida De Julio Cesar.
Enviado por alterchevo • 27 de Mayo de 2014 • 1.811 Palabras (8 Páginas) • 401 Visitas
Placeres, amor e interés en la vida de Julio Cesar.
Las Vidas de los doce Césares es considerando la obra primordial de Suetonio por ser la fuente que nos permite la mayor cantidad de información de relatos anecdóticos y biográficos en la época del Imperio, dentro de esta obra se encuentra el relato sobre la vida de Cayo Julio Cesar que es en la que se centra esta reseña. El cuerpo general de la obra consiste en doce libros, escrito en formato de biografía sobre los primeros doce emperadores, los cuales son: Julio César, Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio, Nerón, Galba, Otón y Vitelio, Vespasiano, Tito y Domiciano. El relato es ameno y sencillo, hay un gusto por el detalle y lo anecdótico-humorístico, así como por lo escandaloso, a los que da tantos ejemplos en las biografías. Además, se añade su interés fundamental por el carácter moral o éticos, el estudio del trasfondo histórico, a causa de que sus personajes fueron hombres públicos de la máxima importancia y ejemplo. Gayo Suetonio Tranquilo nació cuando los Flavios ascendían al poder, ya en plena etapa del Imperio Romano. Pasó gran parte de su vida en Roma, y ejerció como secretario bajo las órdenes de Trajano, aprovechó el cargo para acceder a los archivos imperiales, material que utilizaría en esta su obra más conocida.
Sin más retraso Quisiera saber sobre las relaciones que tuvo con las mujeres que le marcaron a lo largo de su vida. Es decir, ver con ello qué intereses y que tipo de relación mantuvo con ellas, a su vez tratar, la influencia que éstas ejercieron en el propio César en la vida pública, política y privada. Ahora bien, ¿eran intereses políticos enmascarados detrás de este tipo de relaciones? ¿Existió afecto con alguna de ellas? ¿Qué me dice el texto de Suetonio? ... Con César, como con otros muchos hombres de la época, detrás de las relaciones con mujeres de la aristocracia siempre existían intereses de carácter político y socioeconómico. Ya desde muy joven renuncio a Cossutia, quien procedía de una de las familias aristocráticas más ricas de Roma y habiéndosela ofrecido como esposa, y contrajera su primer matrimonio con Cornelia, hija de Cina. Este matrimonio, con claros tintes políticos, propició a César el nacimiento de su única hija legítima, Julia, y el poder fortalecer las relaciones con el partido popular. Así Sila, en calidad de dictador, le ordenó que se divorciara de Cornelia bajo amenazas de perder su condición de flamin dial e incluso su propia vida (con esta acción posiblemente si había un lazo verdadero entre Cornelia y Julio Cesar), César se negó viéndose obligado a perder el cargo religioso que estaba ejerciendo, perder la dote de Cornelia y tener que huir de Roma. No obstante, finalmente pudo regresar a la capital gracias a la mediación de su madre y otros contactos proporcionados por sus familiares. Esto lo vemos al inicio de la biografía:
Cayo Julio Cesar tenía dieciséis años de edad cuando murió su padre. Al siguiente año, nombrado flamin dial, repudio a Cossutia, hija de simples aunque opulentos caballeros, con la cual estaba desposado desde la niñez, tomó por esposa a Cornelia, hija de Cina, que había sido cónsul cuatro veces; de esta nació Julia, al cabo de poco, sin que el dictador Sila pudiese conseguir por ningún medio que la repudiase; por este motivo despojóle del sacerdocio, de los bienes de su esposa y de las herencias de su casa, persiguiéndole de tal forma que hubo de ocultarse, y aunque enfermo de fiebre cuartana, se veía obligado a mudar asilo a casi todas las noches y a rescatarse a precio de oro de los que le perseguían; consiguió ser perdonado al fin por mediación de las Virgenes Vestales , de Mermeco Emilio y de Aurelio de Cotta, parientes y allegados suyos…
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La estima que tenía a su esposa, al igual que a su tía Julia, era grande que siendo cuestor, y rompiendo con los cánones establecidos, pronunció un discurso fúnebre a la muerte de éstas en la tribuna; pero de nuevo esta mezcla de cariño y estima se convierte en prestigio; ya que en el discurso realza el origen de su tía y el de su padre, que de algún modo da legitimidad de su origen divino para gobernar.
Siendo cuestor, pronunció en la tribuna de las arengas, según era costumbre, el elogio de su tía Julia y de su esposa Cornelia, que acababa de morir. En el primero estableció de la manera que sigue el doble de origen de su tía y de su padre: Por su madre, mi tía Julia descendía de reyes; por su padre, está unida a los dioses inmortales; porque Anco Marcio descendieron los reyes Marcios, cuyo nombre llevo de mi madre; de Venus procedían los Julios Cuya raza es la nuestra. Asi se ven, conjuntas en nuestras familias, la majestad de los reyes, que son los dueños de los hombres y la santidad de los dioses, que son los dueños de los reyes…
Tiene un segundo matrimonio terminando en divorcio por los adulterios de su segunda esposa Pompeya con Publio Clodio durante la celebración de las festividades; hija de Quinto Pompeyo y nieta de Sila. César llegó con ella al matrimonio con el fin de aproximarse a la facción para el entonces difunto Sila. Suetonio menciona que el Senado es el que dictamina la sentencia que logra la separación con Pompeya.
…Para remplazar a Cornelia, casóse con Pompeya, hija de Q. Pompeyo y sobrina de L. Sila, de quien más adelante se divorció por sospecha de adulterio con P. Clodio,
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