Reforma Laboral

REFORMA LABORAL

La nueva reforma laboral en contra de los derechos de los trabajadores. Se trata de una reforma que toma como referencia las propuestas fundamentales contenidas en la iniciativa de reforma laboral del Partido Acción Nacional del 18 de marzo de 2010 que afectan gravemente los derechos individuales, sumada a la ventaja empresarial que mantiene un modelo sindical que impide la participación de los trabajadores en la definición de las relaciones laborales y legitima la intervención gubernamental en la vida interna de los sindicatos y la anulación en los hechos del derecho de huelga y la contratación colectiva.

La reforma laboral 2012 está en plena marcha y los agentes sociales cumplen el papel de negociadores que tiene como límite el 13 de Enero para ver si llegan a un pacto definitivo. Mientras que, los sindicatos y la patronal pretenden lograr un mutuo pacto y poner en marcha la reforma laboral y ofrecerle al Gobierno de Rajoy.

Entre los pequeños acuerdos que se lograron uno de ellos se trata de lo referido a la solución extrajudicial de conflictos. Por otro lado hay principio de acuerdo en cuanto a la mejora de la formación continua, así como de las mutuas de trabajo y sobre los días festivos del calendario laboral.

Pero tanto Sindicatos y patronal desacuerdan en cuanto a materia de contratación, salarios y despidos. Mientras CEOE, Cepyme, UGT y CC OO ya le remitieron al Ejecutivo el documento en el que acuerdan en varios puntos para la reforma laboral.

Entre las propuestas tratan sobre: negociación colectiva, contratación, absentismo laboral, solución extrajudicial de conflictos, las empresas de trabajo temporal (ETT) y la formación.

Si bien en las negociaciones sobre salarios, contratos y despidos, no hay tanta distancia como en otras negociaciones y hoy las partes parecen más flexibles.

En cuanto a la negociación salarial, los sindicatos podrían terminar aceptando la subida salarial sea inferior al IPC es decir la inflación, eso si no desean que se congele.

En cuanto a contratos, también podrían aceptar el fomento de la contratación a tiempo parcial lo que permitiría crear empleo, bajo condición que se respeten los derechos de los trabajadores. Por el lado de las organizaciones sindicales terminarían aceptando el llamado descuelgue de los empresarios, este paso le daría paso a que las empresas no respeten los pactos sellados en los convenios colectivos amparándose en diferentes motivos.

Mientras que de parte de CCOO y UGT buscan desarrollar una política de moderación salarial, aunque también un estricto control de precios además de limitar los beneficios empresariales, y que las mismas empresas puedan reinvertir una parte de sus ganancias, en caso que los empresarios no cumplan con alguno de estos preceptos no podrán disfrutar de deducciones o bonificaciones.

Pero

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