Zoológicos Humanos
Enviado por DoncellaGotic • 18 de Abril de 2014 • 1.409 Palabras (6 Páginas) • 396 Visitas
Los Zoológicos humanos
“La civilización no suprimió la barbarie; la perfeccionó e hizo más cruel y bárbara”.
(Voltaire)
El término de zoo humano describe una actitud cultural de supremacía racial, que, según algunos investigadores, prevaleció en los imperios coloniales hasta la Segunda Guerra Mundial. Fue popularizado por la publicación en 2002 de la obra Zoológicos humanos, escrito por varios historiadores franceses especialistas del fenómeno colonial.
Las exposiciones coloniales fueron la ocasión de presentar al público de la metrópoli una muestra de los diferentes pueblos colonizados, puestos en escena, en situación forzada en un ambiente reconstruido.
Eufemísticamente también se las rotulaba como «exposiciones etnológicas» o «Ciudades de negros», enfatizando las diferencias culturales entre las naciones occidentales y las no europeas. Estos zoos etnográficos han sido criticados por alevosamente degradantes de la condición humana, y por racistas.
Uno de los primeros antecedentes de los zoológicos humanos fue la colección de Moctezuma en México, la cual no solo consistía en un auténtico zoológico, lleno de diversos animales importados de toda Mesoamérica y Aridoamérica, sino que también exhibía a personas poco comunes como enanos, albinos y jorobados.
Uno de las primeras exhibiciones públicas de humanos fue la exhibición de P.T. Barnum de la mítica supercentenaria de 161 años, Joice Heth el 25 de febrero de 1835 y, luego, los siameses Chang y Eng Bunker. Sin embargo, la noción de la curiosidad sobre otros humanos tiene una historia tan larga como el colonialismo. Por ejemplo, Cristóbal Colón lleva indígenas de sus viajes al Nuevo Mundo a la corte castellana en 1493. Otro famoso ejemplo fue Saartjie Baartman de la nación namaqua, con frecuencia referenciada como la Venus Hotentote, que fue lisa y llanamente exhibida en Londres hasta su deceso en 1815. Durante los 1850s, Máximo y Bartola, dos niños microcefálicos de México, se exhibieron en EE.UU. y en Europa bajo los nombres de "Niños Aztecas" y "Liliputienses Aztecas" (ver Aguirre, Informal Empire, ch. 4). Sin embargo, los zoos humanos se volvieron comunes solo en los 1870s, o sea a mediados del periodo del Nuevo Imperialismo.
París, 1881: En septiembre de 1881, once fueguinos fueron exhibidos en el Jardín de Aclimatación, no se tiene claro si eran Kawésqar o yaganes. Habían sido raptados en las costas del Estrecho de Magallanes por Johann Wilhelm Wahlen, marino alemán. En los primeros días, la hija menor de uno de ellos murió. Luego de París fueron exhibidos durante tres semanas en Berlín, donde los alojaron en el recinto de las avestruces. La gira siguió rumbo a Leipzig, Munich, Stuttgart y Nuremberg. Para entonces ya se encontraban bastante enfermos y camino a Zurich murió una mujer apodada Grethe, la salud del resto del grupo estaba tan frágil que debieron cancelarse todas las presentaciones en Suiza. Fue en este momento cuando el empresario Carl Hagenbeck intervino y envió de regreso a Punta Arenas a los cinco sobrevivientes de la gira, ya que el responsable de llevarlos había dado un depósito de garantía por los indios. En el viaje murió el último, apodado Andrés. Así es cómo regresaron tan solo cuatro de los once.
En la representaciones que hicieron de este grupo, nada hacía señalar que eran canoeros, sino todo lo contrario, los representaron como nómades terrestres.
La presentación, representación e interpretación, lo que el ojo veía era lo que la mente pensaba, así la mente estaba gobernada por los sentidos. Las fotografía tomadas y los gravados e ilustraciones realizados a partir de aquellas exposiciones fueron tomadas como verdaderas y adquirieron carácter científico con enfoque antropológico.
París, 1889: Desde el 6 de mayo hasta el 31 de octubre se celebró en París el centenario de la revolución en una Exposición Universal. En el marco de la celebración de igualdad, fraternidad y libertad, se exhibieron once indígenas Selk´nam (Onas). Maurice Maître raptó en la bahía San Felipe a toda una familia, a quienes llevó atados con cadenas. De los once, dos murieron en el viaje.
Fueron presentados tras rejas como caníbales, todas las tardes les arrojaban carne cruda de caballo y los mantuvieron sucios y sin posibilidades de higiene, para que tuvieran la apariencia de salvajes, todo para obtener beneficios comerciales. Ante las inhumanas condiciones de la exposición la S.A. Missionary Society comenzó a exigir la liberación y el retorno de esta familia a Tierra del Fuego. Fue tal la presión
...