Desarrollo De La Niñez Intermedia

Desarrollo de la niñez intermedia

La niñez intermedia es el periodo que comprende de los 6 y 11 años de edad aproximadamente, a esta etapa comúnmente se le denomina etapa escolar en la cual se presentan cambios físicos, cognitivos y psicosociales. Se considera que a escuela es la experiencia fundamental durante este tiempo en donde las diferencias personales se tornan más evidentes al igual que las necesidades especiales debido a las competencias escolares que se comienzan a generar en este periodo, según Papalia (2001).

Generalidades

Musen (1971), explica que durante la niñez intermedia el infante comienza a desarrollar y a adquirir diversas destrezas intelectuales y académicas, muestra mayor motivación para la realización de éstas actividades, aprende a interactuar con su medio social, inicia con la práctica de roles lo cual le ayuda a aclarar más su identidad y su papel sexual dentro de la sociedad, aumenta la autonomía y la independencia, se comienzan a construir normas morales y mayor consciencia, e inician con la interacción de situaciones de mayor ansiedad y conflicto.

La conducta psicológica se desarrolla a partir de las interacciones de un organismo y su ambiente. El desarrollo psicológico se considera una conducta psicológica que abarca los cambios en la interacción entre un niño que madura progresivamente así como los cambios sucesivos en su ambiente. De esta manera el desarrollo de un niño dependerá de las formas concretas en que los eventos biológicos y sociales pasados y presentes alteren metódicamente su conducta transformándolo a partir de un estado de completo desamparo hasta alcanzar relativa independencia según Sidney y Bijou (1986).

El ambiente se considera simplemente un conjunto de estímulos que interactúan con el infante, estos se pueden originar del ambiente externo, otros de su propia conducta y algunos vienen de su funcionamiento biológico, motivo por el cual el niño es la fuente de toda su conducta psicológica y de una parte de su ambiente así lo mencionan Sidney y Bijou (1986).

Mussen (1971), menciona que cuando el niño llega a la edad escolar, sus áreas de desarrollo se amplían y queda sometido a una serie de influencias cada vez más amplias, en las cuales se encuentran, los maestros, compañeros, libros y televisión.

Mussen (1971), menciona que durante los años de la niñez intermedia, se van estableciendo nuevas normas y estándares dentro del espacio de desarrollo en el que se encuentra el niño, los cuales le proveen de nuevos problemas a lo largo de su crecimiento. Si el niño a esa edad está preparado adecuadamente para enfrentar estas situaciones problemáticas y con el tiempo llega a dominarlas, la imagen de sí mismo se volverá más clara y su propia estimación se fortalecerá.

Covarrubias (2005), explica que los niños constantemente están sujetos a interacciones cotidianas en las cuales experimentan éxitos y fracasos, en cada una de estas situaciones se va construyendo un significado y una representación de sus habilidades y capacidades, las cuales determinara si se siente una persona competente para resolver problemas o se siente incapaz para solucionarlos.

Según Erickson (1965) citado Martínez, S. (2010), describe ocho etapas epigenéticas del desarrollo, en cada una se debe de afrontar y dominar cierto problema fundamental, a medida que se resuelve cada etapa, el individuo pasa adaptativamente a la siguiente etapa. La infancia y la adolescencia abarcan las primeras cinco fases: 1) sentido de confianza básica, 2) sentido de autonomía, 3) sentido de la iniciativa, 4) sentido de la industria y 5) sentido de la identidad.

Este mismo autor menciona que Erickson ubica el fundamento de todo el desarrollo posterior dentro de la primera etapa de sentido de confianza básica vs desconfianza. Esta se basa en el sentido de confianza la cual brinde comodidad física y una experiencia mínima del temor o la incertidumbre. Si se aseguran estos elementos, extenderá el infante su confianza hacia nuevas experiencias, sin embargo si esta etapa no se pasa de manera satisfactoria las experiencias físicas y psicológicas insatisfactorias determinarán un sentido de la desconfianza, conduciéndolo a una percepción temerosa de las situaciones desconocidas.

Erickson citado por Berryman (1994), menciona que durante el periodo de la infancia, el niño aprende si el mundo es un lugar bueno y satisfactorio o si es un lugar de sufrimiento, frustración e incertidumbre, llamando a este estadio o etapa del desarrollo psicosocial de la niñez como confianza vs desconfianza. El descuido y la indiferencia son los mayores obstáculos para el desarrollo de la independencia y la capacidad para tener sentido de realidad.

Influencias de la familia durante la niñez intermedia

Mussen (1971), menciona que el tipo de padres que tenga el niño y las relaciones que este sostenga con ellos, serán uno de los factores ambientales más importantes, para determinar la calase de persona que llegará a ser, el tipo de problemas a los que se enfrentará en la búsqueda de su madurez y la manera en la que resolverá problemas que se le presenten a lo largo de su vida.

Según el mismo autor, los ajustes y las exigencias que vayan aconteciendo a lo largo del desarrollo del niño ya sean adecuados o no para su desarrollo, provienen

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