EL ARTE DE LA GUERRA Sun Tzu

EL ARTE DE LA GUERRA

Sun Tzu

El arte de la guerra desde mi entender es un libro que definitivamente viene a ser el parteaguas entre estar conscientes de ganar en el sentido de poner las cartas sobre la mesa desde una perspectiva victoriosa con todo lo que conlleva, comunicación asertiva, coherencia entre mi sentir y mi actuar y por muchas cosas la convicción de hacer lo que mejor parece para los que tenemos un objetivo en común, y que siendo por otra parte la derrota desde lo que no se logra entender y aplicar por las creencias y experiencias que se han adquirido desde la creación del ser humano. Me parece interesante como los seres humanos vivimos en constante batallas, y no precisamente guerras de morir o matar, sino más allá de esta lucha que nos brinda cada una de la situación en la que la toma de decisiones va influir para el desarrollo de los planes o del cumplimiento de los objetivos. En un principio cuando escuche el nombre del libro “El arte de la guerra” imaginaba como es que me darían herramientas para definitivamente ganar una guerra pero de pelea, campal, bélica, y resulta que me topo con las herramientas y capacidades para precisamente no salir derrotado en el ámbito de las diferencias, y no para que siempre tenga la razón sino para que cuando existan estas diferencias se pueda lograr un ambiente de armonía. Dentro de cada uno de los capítulos se me hace imposible no imaginar situaciones de conflicto con mis iguales y de cómo actuaria con las herramientas o habilidades de las que estoy leyendo.

Me parece interesante como es que aun cuando tenemos esas guerras no llegamos a ver o hacer uso de todos los recursos que tenemos. Este libro me muestra como esas herramientas, decisiones, amigos, enemigos, alianza y traiciones y la importancia de hacer uso correcto de todo esto, me parece que siempre se tendrán enemigos, habrá derrotas pero también habrá victorias que mostrarán como es estar de este lado de manera satisfactoria por el uso adecuado de las estrategias y alianzas. En el libro como en la vida estaremos siempre de un lado o salimos victoriosos o salimos derrotados y desde esa visión es que podemos generar enemigos o amigos, aliados o traidores. Es curioso como al conocernos con nuestras fuerzas y debilidades podemos crear batallas con uno mismo o con los otros. Bien dicen, el conocimiento es poder, y en estos casos del libro del arte de la guerra encaja perfectamente y no quiere decir que porque lo sepas ya se está del lado de los ganadores, sino que el tener conocimiento es ir un paso delante de los enemigos, por eso es tan importante que generemos esas alianzas fuertes y con el mismo objetivo, si de pronto uno tiene el conocimiento y otro tiene el poder el equipo ya no solo va un paso adelante sino unos metros o kilómetros.

Otro de los aspectos que me llamó mucho la atención es que el conocimiento, conjugado con la fuerza y el uso de los recursos genera sin duda un equipo fuerte, y no porque se tengan todos los recursos quiere decir que la victoria está escrita, es importante saber en qué momento usar cada uno de los recursos estando en una batalla. He mencionado varios aspectos en las líneas anteriores pero algo que no puedo dejar de lado es el conocimiento a sí mismo, puesto que si no se hace desde ahí le estamos dando armas al enemigo, mostrando una vulnerabilidad sin precedentes. Eso de conocerse a sí mismo puede estar muy trillado pero es tan cierto porque si lo haces puedes conocer tus fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas, y todo esto es la diferencia entre la victoria y la derrota. Definitivamente haber leído este libro hace que tenga una percepción distinta no solo del libro sino de la vida misma, de los momentos de diferencias. Las fuerzas y lo que llamamos el temple, hace que de estar cabizbajo en una parte pase a tener la frente en alto, y no solo por la victoria de cierta situación sino es saber cómo enfrentarla independientemente de los resultados de la batalla, eso hace que se ganen fuerzas o se debiliten. Respecto a esto y el plano de la batalla genera tanta fortaleza cuando los terrenos se conocen y más cuando precisamos de uno en el que no esperamos ir a atacar a los enemigos sino a que los enemigos vengan y es ahí cuando podemos tener esa chispa de la victoria ya que estamos en conocimiento de nuestro espacio, que por otra parte considero que el ir a un lugar desconocido también puede acarrear una victoria puesto que vamos ampliando la conquista, me parece que es no dejar solo que vengan a querer conquistarnos y que ganen la batalla sino ir a conquistar y ganar no solo la guerra sino el terreno, es no dejar las cosas a medias, es no irse a los extremos sino buscar un equilibrio. Otra de las cosas que me parecen muy interesantes es como el libro plantea elementos que  van de cierta forma dirigidos a generar una victoria en una guerra los puedo aplicar en mis batallas cotidianas ya que constantemente estamos en enfrentamientos y no solo con los demás sino con nosotros mismos y el enfrentamiento y la toma de consciencia y de conocimiento además de decisiones hace que esas batallas tengan éxito o fracaso. En las batallas cotidianas de la vida siempre habrá personas que el ataque lo lancen de manera a que respondamos o a que mostremos esa parte vulnerable de quedarse callado, porque desde mi punto de vista el quedarse sin hacer nada es un acto de cobardía, diferente a cuando utilizamos el tiempo para poder crear estrategias y así poder atacar a nuestro rival con armas muy bien estructuradas y con el conocimiento a pie de cañón para así responder a los ataques, que si bien se puede tener en cuenta que no siempre quien huye pierde sino que pueden estar reservando energías para un ataque más potente. Todos los capítulos que nos muestra este libro me han generado mucha imaginación porque de pronto me imagino en una batalla en un campo y a primeras de cambio me imagino trabajando estos elementos en mi vida diaria.

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