ENSAYO LIBRO PADRE RICO, PADRE POBRE

Ensayo

Cuando el conocimiento, perseverancia y lucha diaria se conjuntan, se pueden lograr cambios en nuestras vidas de manera considerable, tal como lo menciona el escritor Robert Kiyosaki en su libro acerca de la Educación Financiera. Por otro lado, desde edades tempranas no se nos educa financieramente, sería importante tomar en consideración consejos y herramientas de este libro para cambiar malos hábitos que en la mayoría de las ocasiones se pueden volver un verdadero suplicio cotidiano.

Cualquier padre que ama a sus hijos quisiera proveer los recursos necesarios para bienestar de sus hijos  y así alcancen sus metas, es bien sabido, desafortunadamente hay enseñanzas que se pasan por alto y no por ignorancia, por ejemplo, el enseñar a que administren sus finanzas personales, los valores que comúnmente son inculcados son estudiar arduamente, ser profesionistas, encontrar un buen empleo que nos brinde estabilidad laboral y consecuentemente económica, comprar la casa deseada y forjar un futuro para el retiro digno en la vejez, entre otros.

        Uno de los factores importantes del libro son las primeras páginas en donde Robert Kiyosaki hace un recuento de su niñez, y porque  cataloga a “Padre Rico y Padre Pobre”, el primero es el progenitor de su mejor amigo, el segundo del propio Kiyosaki, afortunadamente para él ambos fueron figuras elementales que contribuyeron en su bien formada educación financiera, de una u otra forma tomó los mejores consejos  que han forjado hasta el día de hoy el  éxito en los negocios  que emprende y de los cuales es poseedor.

        Imagínense sí un padre alentara desde los nueve años a su hijo para obtener ingresos de manera autónoma. Eso fue lo que vivió Kiyosaki teniendo en  claro desde su corta edad en como lograr sus metas  y como aprender decir “sí puedo” a pesar de la situación tan precaria que pasó en esa época de infancia.

        Padre rico, como lo llama él, es un personaje singular, basto de conocimiento financiero quien aconseja a los dos pequeños, quienes gracias a esas lecciones emprenden un negocio propio y así comienza su camino hacia un futuro prometedor.

        Padre pobre sin en cambio un hombre culto, empleado del sector gubernamental quien en su particular forma de pensar impulsa a su hijo a seguir sus pasos, trabajar duro, ocupar puestos importantes dentro de las organizaciones, en pocas palabras, ser esclavo del trabajo a cuesta de un empleador para toda la vida. Kiyosaki termina su carrera universitaria y decide seguir las enseñanzas de Padre Rico y no por oponerse a su padre, simplemente se dio cuenta que ese camino no era para él, sencillamente esa filosofía de vida no aplicaba para alcanzar su independencia económica.

        “Los ricos no trabajan por el dinero, el dinero trabaja para ellos” como lo menciona en el primer capítulo del libro. Sin en embargo la contraparte trabaja duro para solventar deudas lo cual es empujado por emociones y no por el raciocinio, es decir, se obtienen ingresos efímeros porque inmediatamente se emplean para cubrir gastos innecesarios, por consiguiente estos se suman a la columna de pasivos. La idea es generar conceptos en los activos, es por ello que  Kiyosaki hace hincapié en cuan importante  es cambiar los vicios financieros  y comenzar una vida sana económicamente hablando.

        ¿Qué persona responsable no ha tenido miedo de perder su empleo y su seguridad? El factor que ocasiona esta emoción de vulnerabilidad es la falta de administración monetaria al no poder cubrir deudas a tiempo, lo que a su vez se traduce en temor al ser despedidos y así pues se perdería el único ingreso del que es poseedor, por tal razón muchos adoptan la idea de continuar  en su puesto laboral hasta que las deudas o compromisos que tienen sean cubiertos en su totalidad. Un grave error ya que los gastos se seguirán generando hasta que se decida determinantemente  comenzar en el camino correcto de la administración financiera.

Hoy en día tenemos un ritmo de vida agobiante y estresante, muchos de nosotros pasamos por alto los pequeños detalles que hacen la gran diferencia, por ejemplo, aprovechar oportunidades que a veces llegan a nosotros y que por temores infundados desperdiciamos, que podrían darnos cambios en nuestras vidas,  como lo ahondaré  en un párrafo posterior. Este camino pertenece a los sagaces y atrevidos, quien desea salir adelante enfrenta sus temores, y los usan para su beneficio y así alcanzar sus objetivos financieros.

        Una de las experiencias que cuenta Kiyosaki y que vale la pena mencionar por ser motivadora y ejemplar es cuando los dos pequeños emprenden el negocio de historietas, aprovechando la oportunidad de rescatar las que se desechaban, consiguieron rentarlas a los demás niños del vecindario por algunos centavos, así pues comienza a formarse su verdadera educación financiera como la cataloga Padre Rico.

        ¿Por qué no se nos educa desde temprana edad a ahorrar y administrar los recursos económicos que llegan a nuestras manos?  ¿Será acaso porque durante generaciones se ha seguido un patrón en común? o ¿Será una forma de sobrevivir de manera lineal en una sociedad?

        La mayor parte de nuestras vidas nos ocupamos en preocupamos por el “dinero”, se lucha arduamente en obtener recursos para vivir o sobrevivir. Para ello es importante prepararnos e informarnos ya sea por medio de la educación que adquirimos en las escuelas, contratar asesoramiento de profesionales expertos en el tema o simplemente de manera autónoma, siempre y cuando el compromiso sea principalmente para el beneficio propio.

        ¿Quién no anhela ser millonario de manera fácil y rápida?. Un ejemplo claro sería ganar la lotería.  Hemos visto casos en los que la falta de administración financiera lleva a la banca rota en poco tiempo, obtener lujos desmedidos sin prever el futuro próximo. Lo anterior es parte de la falta de conocimiento en el tema ya que lo adecuado sería  invertir inteligentemente y generar más activos.

        Deberíamos ocuparnos y preocuparnos en trabajar para nosotros y no para enriquecer a alguien más, y en consecuencia contar con el tiempo disponible para compartirlo con nuestros seres queridos o hacer lo que más nos gusta. La realidad es distinta, mucha gente trabaja sin cesar hasta sus últimos días, y al final no obtienen ninguna gratificación moral o peor aún económica.

        Debemos de pagar impuestos al gobierno durante nuestra vida laboral, sin embargo los ricos invierten para sí mismos. La finalidad de Kiyosaki es transmitirnos su experiencia y conocimientos en este libro, es contar con una base de ingresos sólidos, un ejemplo, sería conservar el empleo actual, el segundo paso es comenzar el hábito del ahorro y para lograrlo es necesario reducir obligaciones y compromisos  de manera progresiva, para que el dinero restante se destine al ahorro.

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