Ensayo pensamiento ambiental.

Cuestiones

Se pretende explicar la idea acerca sobre el “pensamiento ambiental”, también que sinteticen, problematicen, infrinjan y que propongan ideas con dimensiones ambientales y juzgar fuertemente el ambientalismo. Como dice la profesora Patricia Noguera en su libro “gracias a la trivialización y uso indiscriminado del término “pensamiento ambiental”, se ha tomado el camino neo cartesiano del metodologicismo propuesto como panacea”, para solucionar algunos problemas que tan solo tienen que ver con apenas uno de los múltiples aspectos que conforman la complejidad ambiental: el de los recursos naturales no renovables, la cultura se aleja cada vez mas de la naturaleza, la naturaleza es vista desde la cultura como algo inferior  a la especie humana, la relegas tanto hasta el punto que lo renombramos, le dimos otro sentido al pensamiento ambiental donde definimos pensamiento ambiental como un cuidar de la naturaleza, conservarla, protegerla, pero protegerla de ¿quién? De nosotros mismos, “los seres racionales” que hemos acabado con ella, la naturaleza tiene la capacidad de cuidarse sola, o ¿cómo se conservó antes de la existencia del hombre? , decimos ese cuidar la naturaleza de una forma imponente y altanera como si nosotros fuésemos los que creamos la naturaleza.

¿Qué nombra el pensamiento ambiental?  Nombra al ser humano como expresión de la cultura (Nicho Simbólico), nombra también al ser humano como emergencia de la naturaleza (Nicho Biótico).

¿Cómo emerge el pensamiento ambiental? En el reconocimiento de las crisis ambientales y en el reconocimiento del giro ambiental.

La realidad caótica que se presenta en el  mundo actual, es el resultado de un proceso del desarrollo de la civilización humana, cuya particularidad principal ha sido el del fraccionamiento de los desarrollos, centrados esencialmente, en el afianzamiento económico.

En Este sentido de la realidad, se origina fundamentalmente de lo que históricamente conocemos como La Revolución Industrial o mejor como aparición de la modernidad,  lo que identificamos como sentido de progreso  , en dónde la vida humana, parece haberse separado del "tejido básico de la trama de la vida " , pero dónde, a la vez, se dio inició a un proceso de universalización de ese afirmación económica, lo cual ha desencadenado  en un escalonado desgaste universal de ese "tejido básico de la trama de la vida " , del cual  la vida humana parece no formar parte, lo que está   poniendo en riesgo, la existencia misma de la especie.

“Para superar la crisis ambiental es necesario formular las bases de una nueva cultura” Augusto Ángel Maya (El Retorno de Ícaro/2002).

¿Será que el medio ambiente se está cansando de que lo cambien?, ¿Será que el medio ambiente se está cansando de los seres humanos?, estas preguntas se plantean por el hecho de que se nota un medio ambiente más agresivo, en los últimos tiempos se han visto mas catástrofes naturales, como terremotos fatales como el ultimo pasado en Japón y el de Chile, largos   periodos de invierno como los ocurridos en  Colombia o en Brasil, con las lluvias, inundaciones, derrumbes, o en Estados Unidos, con la nieve, tiempos de sequia, Huracanes. Todo esto se debe a la búsqueda de poder, de ser mejor que el vecino, de la ambición, como dice el libro “La cultura moderna se consolido gracias a la creencia de que la naturaleza era ilimitada y estaba disponible como recurso para la racionalidad tecno-científica   infinita del ser humano”.

“No es posible desprenderse de la herencia cultural como si se tratase de una capa de peregrino” Augusto Ángel Maya (El Retorno de Ícaro/2002).

Todo desprendimiento implica un desencadenamiento.

Es necesario desencantarse de la civilización occidental.

En un principio el sentido inicial era habitar, convivir con lo que el medio ambiente nos brindaba, pero después de un tiempo se quiso dominar el medio ambiente para poder calmar nuestras ganas de poder, de dominar a las demás especies de la tierra y hasta para dominarnos a nosotros mismos.

En un fragmento del libro “La escisión es una expresión del dominio, mientras que la integralidad es expresión del habitar. Por esta razón, el problema del como convivimos con el medio ambiente tiene que ver directamente con el problema de dicha La escisión fundamental y fuente de una cultura caracterizada por el dominio.”, esto nos quiere dar a entender eso de lo que estábamos hablando, las ganas de dominar, de separación, de no tomar a todos los seres como seres iguales sino querer clasificarlos en una escala de poder absurda nos ha llevado a dejar de convivir con el medio ambiente, nuestra hogar, en una total calma, con integridad y respeto para demostrar quién es el “rey” de esta escala.

La idea de la escala de poder se nota en la clasificación de los países como desarrollados y subdesarrollados.

“La guerra representa al mismo tiempo al mayor empresa de la civilización industrial, el producto e instrumento de la movilización total” Joan Patoska.

A lo largo del tiempo, el ser humano ha tenido diferentes conflictos, de diferentes tipos, que como clasificaría Michel Serres en su obra el contrato natural: “Cuando todos luchan contra todos no hay estado de guerra, sino violencia, crisis pura y desencadenada, sin posible final, y amenaza de extinción de la población que se entregue a ella.”, es decir, podríamos clasificar ese estado de lucha en violencia o guerra. Por lo que es evidente que el contrato social surge por conveniencia, la conveniencia del grupo en general, es la esencia del ser humano el buscar equilibrar las cosas a su favor, pero en su afán de hacerlo ha dejado atrás su esencia y se ha convertido en un monstruo de la naturaleza.

Ahora la pregunta que se puede plantear es ¿Cómo debe ser ese acuerdo o contrato con el medio ambiente?, será que tenemos la suficiente voluntad para hacer esto y admitir que no somos los seres dominantes sobre el medio ambiente, sino que hacemos parte de él, como parte del entramado de la vida. Este acuerdo es en gran medida especial, ya que no puede ser concebido con los lineamientos de un mundo cartesiano, debe ser concebido desde un punto de vista diferente, para concebir este acuerdo se hace necesario que el ser humano cambie su forma de ver el mundo, es necesario primero “el reencantamiento el mundo”, como lo denomino Patricia Noguera. Si concebimos un tratado similar a los que concibe la ciencia actual, el mundo seguirá igual, falto de encanto y admiración por lo que nos rodea; el ejemplos más claro del fracaso del hombre cartesiano por mitigar su impacto sobre la naturaleza es el protocolo de Kioto, que hace poco fue noticia por el retiro de Canadá del mismo, el cual refleja que con una simple reducción de cifras no subsanaremos el mal causado a la Naturaleza, mucho menos imponiendo multimillonarias multas a los responsables que preferirán pagarlas o limpiarse las manos antes de dejar sus medios de lucro. Es necesario pues un cambio radical, no en los instrumentos del hombre, sino en la forma de ver y pensar el mundo.

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