Ficha texto: Sarramona, Jaume (1989) “Fundamentos de la Educación”, Barcelona, CEAC.

Ficha texto: Sarramona, Jaume (1989) “Fundamentos de la Educación”, Barcelona, CEAC.

                  Capitulo II. Concepto de Educación.

1. Tesis del autor

        El termino educación que, según el autor, es igual de antigua que el hombre, surgió de la necesidad de criar y cuidar a sus hijos, para que algún día pudieran cuidarse a sí mismos. Un término habitual en nuestras vidas que tiene diferentes formas de analizarse y ejercerse, por supuesto claro viendo las diferentes visiones de la educación. Tenemos el primero de los casos en los que al momento de referirse a la educación, también hablamos de un sistema educativo dándole más bien una índole histórica-comparativa o socio-política. También es utilizada para referirse al resultado de una acción, la cual puede ser buena o mala, según la educación que se tenga. Y por último se refiere a esta como un intercambio reciproco en la cual se relacionan dos o más personas. Por supuesto estas tres interpretaciones están muy ligadas entre si. Es importante destacar además que Sarramona trata a la educación como posibilitadora de los ideales humanos, a través de lo antes explicado:
“El término educación es de uso habitual en la vida cotidiana puesto que a todos nos afecta de algún modo  (…) La educación aparece precisamente como posibilitadora de los ideales humanos.” (Sarramona, 1989)
Hay una parte del texto denominada Los Fines de la Educación que deja mucho de que hablar. En primer lugar se plantea que no hay educación sin una clarificación de los fines a lograr (Sarramona, 1989), los cuales también se han visto relacionados con los valores. Estos fines cumplirán con ciertas funciones generales: La función referencial, organizadora, integradora y prospectiva. Sin embargo se explica que hay cierta problemática al intentar buscar solo una finalidad de la educación, para finalmente llegar a tres niveles educacionales muy generales, pero que sin embargo pueden ayudar a resolver esta problemática de finalidades. El Nivel filosófico, social y el personal.
“Los tres niveles están estrechamente vinculados. La realización como individuo está condicionada al contexto social que la posibilita, del mismo modo que la interpretación filosófica del mundo y de la vida es fruto de una cultura y momento histórico determinado; aunque siempre se puede adoptar una posición crítica”. (Sarramona, 1989)
Habiendo puesto en evidencia estos puntos, cabe finalizar en que la educación, a pesar de poder orientarse bien, es un término ‘’utópico’’ por naturaleza, ya que nunca se podrán alcanzar en plenitud la cantidad de finalidades que tiene esta. Limitaciones, señaladas por Herbart, basadas en lo siguiente: El momento histórico, las condiciones del medio y propia naturaleza del educando. Sin embargo, y para concluir, se deja muy en claro que estas limitaciones no serán siempre fijas, lo que se ha visto con el correr de los años y la evolución de la educación a la par con estos.
“Adviértase, finalmente, que los límites de la educación no constituyen algo fijo, puesto que el constante avance de las mismas Ciencias de la Educación hacen posibles unos resultados anteriormente impensables.” (Sarramona, 1989)

1. Palabras clave

        Educación: Sin duda alguna esta es la palabra con mayor importancia en el texto, la cual casi está significada como el medio para un fin, como por ejemplo poder defenderse, sobrevivir, comunicarse, etc. Esta educación no solo recae en sus ámbitos más tradicionalmente vistos, los cuales se reducen a un aula de clases, sino también a situaciones más generales, del diario vivir, viendo a esta educación como algo fundamental en la supervivencia del hombre.
Finalidad: Una de las grandes incertidumbres que se deben plasmar a la hora de educar es: ¿Con que finalidad lo estoy haciendo? Sin una finalidad la educación carece totalmente de sentido, o así lo expresa Sarramona, dejando en claro también que aún no hay una finalidad determinada para la educación.
Límites: Por supuesto claro siempre habrá limitaciones para los avances que se pueden alcanzar, partiendo claro desde la base de que un ideal educacional es totalmente soñado sin más. Pero sin embargo hay que evidenciar que quizás en tiempos ya pasados, los mismos niveles educativos que tenemos actualmente, eran solo un sueño para el resto, lo que nos deja muy en claro que nos encontramos más que nada en una crisis temporal, y no en una crisis histórica, y que seguramente las ataduras que nos impiden llegar a ese ideal soñado de Educación no sean tan difíciles de cortar.  

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