Hasta donde el destino nos lleve

Valdez

“Hasta donde el destino nos lleve”

Noah Hill, el típico chico de ciudad que no sabe lo que tiene, inteligente, pero holgazán, con habilidades desconocidas, un chico solitario, sigiloso y astuto. Noah nació un 20 de diciembre de 1997, vivía en las afueras de la ciudad de Sídney en Australia con su madre Jessica, él tenía la mejor madre que podía existir en el mundo, perdón, qué mundo, en el universo. Jessica era una madre multifuncional, trabajaba de secretaria en una oficina, vendía postres en el almuerzo, vendía ropa, hasta a veces hacía de nana en la casa de su amiga Rosita.

A Noah no le faltaba nada; ya que, Jessica hacía todo lo posible por darle estudios, alimento, vestimenta y el cariño incondicional de madre. Noah creció sin un padre, su padre se llamaba James, él murió en un accidente aéreo ocasionado por una falla en el sistema que hizo que el avión cayera al mar y se hundiera en lo profundo de las aguas del océano Indico.

Se podría decir que Noah era un “palomilla”, él era el payaso de la clase, el más bacán del grado. Noah estaba en 5to de Secundaria.

Pasaba el tiempo, ya casi a finales de 2012 donde para ese entonces Noah terminaba la escuela, a partir de ese tiempo Noah pasaría los momentos más felices, dramáticos y peligrosos de toda su vida. Apenas Noah se graduó salió a cumplir su sueño que era viajar a donde el destino lo lleve.

Noah tenía mucho dinero; puesto que, empezó a ahorrar desde que tenía ocho años para hacer realidad su sueño, pero este sueño no lo quería cumplir solo, lo quería hacer realidad con sus mejores amigos Sam y Will, ellos eran amigos de infancia, se conocían desde los tres años y siempre fueron mejores amigos.

Llego el día de partir, Noah junto Sam y Will se dirigieron  al aeropuerto de Sídney, los tres tenían planeado viajar a un punto central en Europa y después viajar de diferentes formas a una ciudad en Holanda llamada Groningen para así llegar a Tomorrowland, el lugar de los sueños de Noah.

Compraron pasajes aleartorios a algún lugar de Europa, por suerte les tocó Estocolmo, la capital de Suecia y justo en ese mismo lugar se encontraba el primo de Will que se llamaba Charlie.  

 Durante el viaje empezaron hablar de todas las buenas vivencias de su infancia. Apenas salieron del aeropuerto ya tenían su primer problema; Sam se había olvidado su valija en el puente de equipaje, rápidamente corrieron hacia donde se encontraba todo el equipaje, por suerte la encontraron justo antes de que una niña se la lleve.

Charlie, el primo de Will fue a recogerlos al aeropuerto en su camioneta para llevarlos a su casa a descansar. Lo único que hicieron al llegar a la casa de Charlie fue dormir porque estaban muy cansados del largo viaje.

Al siguiente día a tempranas horas de la mañana Charlie despertó a Noah, Sam y Will porque se tenía, que ir a Hamburgo para hacer unas cosas. Después de desayunar partieron en busca de su sueño. Tomaron un taxi al frente de la casa de Charlie, se dirigían a la estación de tren para ir a la ciudad de Goteborg en la parte baja de Suecia para de esa manera cruzar a Copenhagen en Dinamarca pero sucedió otro problema, se dieron cuenta que ninguno tenía euros, solo tenían dólares y como no querían cambiarlos tuvieron que salir corriendo del taxi hacia la estación lo más rápido posible.

Compraron sus tickets de tren y solo les quedaba esperar. Llego la hora de subir al tren, era un camino largo y podían aprovechar para descansar, Sam estaba preocupada porque cuando estén viajando no tendrían donde quedarse a dormir gratis.

Al fin llegaron a Goteborg, lo primero que hicieron fue encontrar una manera de llegar a Copenhagen. Por suerte saliendo de la estación de Goteborg había un puerto donde había unos barcos que podían llevarlos por un buen precio; entonces se embarcaron y partieron a Copenhagen.

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