Historia de los Mapuches

LOS MAPUCHES

El nombre del pueblo Mapuche viene del “mapu”= tierra y de “che” gente, es decir, significa gente de la tierra, en lengua mapuzungun.  Es el pueblo indígena más numeroso de nuestro país y posee una gran riqueza cultural que han sabido defender y mantener a lo largo del tiempo.  Antes de la llegada de los españoles, los mapuches habitaban entre el rio Itata (VIII región) y el rio Toltén (XI región).

Primero fueron cazadores nómadas, es decir, se trasladaban de un lugar a otro cazando huemules y roedores, y pescando en el mar peces y mariscos.  Poseían también rebaños de ovejas que utilizaban principalmente como medio de intercambio, para cambiarlas por una novia  y también para obtener la lana para sus tejidos.

Con el paso del tiempo, se transformaron en agricultores.

Aprendieron a trabajar la tierra, cultivando principalmente el maíz y la papa, y cuando la tierra ya no era buena para sembrar, buscaban un nuevo lugar donde instalarse.  Además se alimentaban de la recolección de frutos silvestres como los piñones  que son semillas de las araucarias y de la carne de guanaco.

Los mapuches vivían en unas casas llamadas rukas que instalaban en el centro de los bosques y a la orilla de pequeños ríos.  Estaban construidas con techos de paja o totora, sostenidas por unos palos de madera enterrados en el suelo y unidos arriba por otros palos colocados horizontalmente.  Las rukas podían tener forma circular o rectangular; en su interior estaban separadas en diferentes piezas y en su centro se encontraba el fogón que lo utilizaban para cocinar y para abrigarse en el invierno.  Hoy en día los mapuches conservan sus rukas para cocinar, tostar trigo y piñones en el fuego.

Los hombres y mujeres utilizaban para vestirse el Chamal, que era una camisa larga que se ataba a la cintura.  Para el frío se cubrían con pieles de animales como zorros, guanacos y pumas y se adornaban con collares de plumas, caracoles o piedras de diferentes colores.  Luego de la llegada de los españoles, los mapuches comenzaron a utilizar el poncho como vestimenta y además comenzaron a elaborar adornos de plata como el trapelacucha que eran un gran collar o pechera que usaban las mujeres.

Las familias mapuches estaban formadas por el padres, que tenía una o más esposas, sus hijos y los familiares más directos, ya que en general  ellos acostumbraban a vivir en grupos pequeños.  El padre enseñaba a sus hijos las diferentes tareas relacionadas con el campo, el cuidados de las ovejas, sacar el cuero de los animales, cortar leña, hacer pan, buscar agua.

La madre se preocupaba de la alimentación, vestimenta y limpieza de sus hijos, así como también de enseñar las costumbres de su pueblo.  Además, eran las encargadas de educar a las niñas, enseñándoles a tejer, a cultivar la tierra, a criar niños y hacer cerámica.  Las vasijas las hacían con barro negro cocido y también de madera y cuero.

A los niños desde pequeños se les preparaba para ser guerreros, entrenándolos en carreras, escaladas de cerros y diferentes juegos, con el fin de que tuvieran un cuerpo ágil y fuerte.  También se les enseñaba a manejar armas, como lanzas, flechas, boleadoras y macanas y a reforzar la memoria.  

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