Introducción al Derecho Constitucional Ensayo El Príncipe
Enviado por 140411 • 22 de Julio de 2022 • Ensayo • 1.798 Palabras (8 Páginas) • 89 Visitas
Introducción al Derecho Constitucional
Ensayo El Príncipe
Introducción:
Maquiavelo pretende en este libro exponer las características de la política en los diversos principados, concluyendo que el ejercicio de la política involucra ambientes existentes con hombres y poblaciones reales, cuyas conductas, decisiones y acciones, no responden precisamente al decoro, sino a las leyes del poder.
Asimismo, Maquiavelo presenta formas en que el gobernante debe enfrentar las diversas situaciones o escenarios a los que se le expongan, y establece que lo primordial del ejercicio político es conservar exitosamente el poder. Maquiavelo aprovecha escenarios históricos reales, que van hilados de pasado a hasta su presente.
Es preciso mencionar que, El príncipe es la obra que da origen a la expresión maquiavélico, utilizado con predisposición despectiva para condenar actitudes inmorales o malévolas, debiendo ser una obra invaluable, por su discernimiento de la mente humana, y el sentido común, que es lo menos común que poseemos.
Es un libro de estrategia política, que bien puede utilizarse el la practica empresarial, y el proceder individual del ser humano.
Desarrollo:
Dentro de los primeros capítulos se explican los distintos tipos de principados que hay y las formas en que estos pueden obtenerse. Así mismo hace referencia a que los Estados pueden ser repúblicas o principados, y que estos pueden obtenerse por herencia o conquista, por suerte, por uso de fuerza militar en alianza hasta por virtud.
En El Príncipe de Maquiavelo, surgen al menos dos arquetipos de obediencia política, las cuales, dentro de un régimen totalitario sirven a la conservación de la política. En el capítulo II respecto de los principados hereditarios, en los cuales este es mandado hacer al heredero, es decir, ya hay un antecedente, un camino que ha venido preparándose, y solo bata con un podo de prudencia del nuevo príncipe, para que todo camine de acuerdo al orden de sus antepasados.
Los principados hereditarios, obligan a mantener lo ya establecido en lugar de cambios radicales que puedan perturbar la vida y prácticas de la población.
A diferencia de los que denomina mixtos, que son nuevos, pero que se adhieren a uno antiguo, necesitan tratos diferentes, de acuerdo a los escenarios políticos que se suscitaron en su adquisición.
Se habla también sobre los conflictos de asumir el gobierno de un principado nuevo, y avisa especialmente sobre la importancia de imponerse al grupo de poder anterior, de oprimir rebeliones y de manipular la política interna con virtud.
Aconseja de ser posible hacer uso del poder absoluto, pues compartiéndolo, el príncipe tendría una menor autoridad.
En las conquistas, maneja, que tiene el gobernante radique dentro del principado, y lo reestructure, o bien que mantenga las costumbres del lugar y se apoye con un grupo leal a el para su gobierno, y obligarlos a pagarle tributo, esta figura la vemos como la colonia.
Advierte que, sin embargo, esta clase de Estados mantiene orgullo por su libertad, por la cual persistentemente estarán dispuestos a alzarse para reconquistarla. Así, pues, la única opción segura que tiene el príncipe para mantener el poder es destruyéndolo y dispersar a la población.
También se habla de adquirir los principados: con las armas propias y con virtud, o con las armas y la fortuna de otros.
En el primer caso, señala que, si bien estos principados son más difíciles de adquirir, son, a la larga, más fáciles de mantener, siempre y cuando se disponga de las suficientes fuerzas.
En el segundo, explica que los principados adquiridos con las armas y la fortuna de otros aunque resultan muy fáciles de obtener, son, al contrario, difíciles de mantener, pues se depende de un conjunto de factores que lo condicionan.
El buen y mal uso de la crueldad
Maquiavelo también advierte sobre el uso de la crueldad y la forma en que esta debe ser aplicada. Sostiene que es bien usada si se cometen todos los crímenes al principio, lo que permite que luego, poco a poco, se pueda empezar a otorgar beneficios a los súbditos, para hacerlos olvidar las ofensas recibidas previamente.
La crueldad es mal usada cuando no son cometidas todas en un inicio, lo que fuerza a que deban seguir cometiéndose en lo sucesivo, lo que le atrae la enemistad del pueblo y conduce al príncipe al fracaso.
Principados civiles y eclesiásticos
Son también referidos otros tipos de principados, como lo son el civil y el eclesiástico. El primero, el civil, se obtiene con el favor de los ciudadanos (de los poderosos o del pueblo); para él se requiere sobre todo de astucia política, principalmente para mantener al pueblo del lado del príncipe.
El segundo, el eclesiástico, por su parte, es bastante difícil de adquirir en un principio, pero luego es muy fácil de mantener, puesto que se apoya en las leyes de la religión.
Sobre la forma de medir las fuerzas de los principados
Maquiavelo explica la forma en que han de ser medidas las fuerzas en los diferentes principados. En este sentido, lo principal, comenta, es si el príncipe es capaz de valerse por sí mismo o no.
Tener hombres, dinero y un ejército adecuado lo calificarían como capaz. En cambio, si no posee ninguno de estos elementos, entonces deberá refugiarse tras sus murallas y resistir los ataques enemigos.
Sobre el ejército
Con relación al ejército y los soldados que el príncipe debe tener a su disposición, Maquiavelo afirma que estos pueden ser de tres tipos: propio, auxiliar y mixto. Advierte sobre los soldados mercenarios, que luchan por dinero y no por lealtad.
...