La falta de inteligencia emocional, un problema que obstruye el desarrollo personal y social a nivel preescola

       UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA DEL ESTADO DE SINALOA[pic 1][pic 2]

       ORGANISMO PÚBLICO DESCENTRALIZADO DEL GOBIERNO DEL ESTADO

Licenciatura en educación preescolar [pic 3]

Asesor: Daniel Gómez Alfaro

Alumna: Karen Lucero Zañudo Rosas

Tema: falta de inteligencia emocional, un problema que obstruye el desarrollo personal y social a nivel preescolar

Materia: investigación de la práctica docente propia

Tercer semestre, Grupo: 305

Culiacán, Rosales, Diciembre del 2015

INTRODUCCIÓN

En este ensayo se describe el problema llamado: la falta de inteligencia emocional, un problema que obstruye el desarrollo personal y social a nivel preescolar.

Se explica donde se genera el problema, cómo es que se genera, cuáles son sus características y consecuencias si no es tratado, además se dan algunas propuestas para tratarlo.

Se ponen en descubierto todas las interacciones que se dan entre los elementos que conforman específicamente el jardín de niños al que asisto a realizar mis prácticas docentes.

Como dice un dicho la practica hace al maestro, y para nosotras las futuras maestras es importante siempre estar dentro de la acción para identificar problemas, conceptualizarlos y buscar estrategias que nos permitan resolverlos, es algo que me ha dejado muy en caro la universidad.

Anteriormente estuve en otro jardín de niños y el problema fue el mismo, es algo que desgraciadamente prevalece hoy en día en la sociedad pareciera que ya no hay más espacios para los niños, se encuentran sumergidos en el mundo de los adultos.

Es importante que las educadoras reconozcan que nuestro trabajo va mas allá de solo educar y enseñar, personalmente considero que en preescolar podemos crear un ambiente ameno donde al niño le guste ir y llevarlo de la mano al presente, un presente que podemos adecuar a sus necesidades y brindarles una buena experiencia además que nuestra recompensa será la misma buena experiencia para nosotras.

No debemos caer en el lema de muchas maestras que dicen “no somos psicólogas no podemos resolver sus problemas, ya que no se necesita serlo para aprovechar al máximo las capacidades del niño y si algún niño necesita la ayuda específica del psicólogo se canaliza y es obligación de nosotras el pedir consejos de cómo podemos adecuar la planeación que los incluya a estos casos especiales y no caer en la exclusión

INICIO

El jardín de niños Antonio Caso se encuentra ubicado en la colonia infonavit las flores, pertenece a la zona 032, sector V en la ciudad de Culiacán. Ahí mismo se encuentra la supervisión, cuenta con patio de juegos el cual esta serrado con candado y solo se abre en hora de receso, hay una sección de baños para niños y otra para niñas, cuenta con comedor, una dirección con equipo de computo, copiadora, refrigeración y teléfono; hay cuatro aulas dos de ellas destinadas a segundo grado y las otras dos a tercer grado de igual manera refrigeradas, además de ser muy amplias.

El personal docente se conforma por 4 maestras, un maestro de música y otro de educación física, y la directora, el personal administrativo lo conforma un intendente, y la asociación de padres de familia. Desconozco al personal de la supervisión que se encuentra ahí mismo, solo observo que entran y salen varias personas.

La mayoría de los niños tienen cuatro y cinco años de edad solo uno cuenta con seis años. Los niños viven alrededor del jardín, al igual que el intendente, solo el personal docente vive retirado del lugar.

DESARROLLO

La problemática expuesta se genera en el hogar de los niños y niñas, pero también se presenta en el jardín de niños, incluso en cualquier lugar, siempre y cuando los niños no desarrollen las competencias y aprendizajes esperados que conciernen al campo formativo desarrollo personal y social.

“Uno de los problemas frecuentes en el hogar y el preescolar es la represión la represión se define como perturbaciones psíquicas que se encuentran en el adulto, es una revelación de sí misma” (El niño, el secreto de la infancia, María Montessori, pág. 35)

En el hogar el niño y la niña son reprimidos constantemente por los adultos a cargo, esto posteriormente lo reflejan en el salón de clases y la consecuencia es que la maestra los vuelve a reprimir.

Otra de las causas, es que los maestros o padres a cargo del niño les quitan sus  ideas propias, diciéndoles que sus tareas o trabajos realizados están mal hechos sin comprender porque lo isieron así.

Esta acción les causa baja autoestima y falta de confianza, además que no se pueden rescatar los verdaderos saberes de los niños, la semana pasada aplique clase y la maestra interrumpía a cada rato su actividad, diciendo está mal hecho, no es así, la maestra no dijo eso y luego les daba las respuestas.

En el medio sociocultural los niños y niñas se encuentran inmersos de malos ejemplos mismos que, como ya dije, los reflejan en el salón de clases y la consecuencia es un tache de este niño es un grosero un maleducado, y no estoy exagerando esa es mi desafortunada experiencia  

Me gustaría ver alguna mamá o papá que al llegar por su niño le diga ¿cómo te fue hoy? ¿Qué aprendiste? o un confortante te extrañe hijo, en cambio se observa un “apúrate no tengo tu tiempo” o “te portaste bien”. En las actividades para padres e hijos se aprecia mucha ausencia  por parte de la mamá o papá.

Por parte de la maestra se observa falta de respeto, en la manera en que los niños trabajan, y al dirigirse hacia ellos, incluso ella misma dice que ya se quiere jubilar y muestra preferencia por ciertos niños, cayendo en la discriminación de otros.

Son por estas razones que conceptualizo mi problemática como la falta de inteligencia emocional en los niños y niñas, ya que cuando se es inteligente emocionalmente podemos lograr cualquier aprendizaje, es decir, al desarrollarse plenamente como persona social dentro del salón de clase, tiene la posibilidad de desarrollar, cualquier aprendizaje y lo proyectan fuera del jardín.

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