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Nuevos Horizontes en Outer Banks


Enviado por   •  29 de Noviembre de 2024  •  Apuntes  •  2.744 Palabras (11 Páginas)  •  21 Visitas

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Outer Banks  y tn

Nuevos Horizontes en Outer Banks**

El sol caía lentamente sobre el horizonte mientras el auto de la familia Cortez recorría las costeras de Outer Banks. La brisa marina entraba por la ventana entreabierta, y Luciana observaba las olas romper a lo lejos, deseando que la libertad que veía en el mar también pudiera ser parte de su vida. Su padre, un hombre de negocios exitoso con múltiples empresas a su cargo, conducía concentrado, mientras su madre, una profesora universitaria, revisaba correos en su tablet.

-Llegamos,- anunció su padre

 Habían decidido mudarse a Outer Banks por los negocios de su padre, pero Luciana sabía que, incluso en ese paraíso costero, las expectativas de sus padres la seguirían. No era la primera vez que vivian en Outer Banks, cuando Luciana era mas pequeña, vivieron un tiempo, pero se fueron cuando los problemas surgieron. A Luciana le costaba adaptarse en la escuela causando dificultades en sus calificaciones, por lo que sus padres decidieron irse a otra ciudad.

-Por fin,- murmuró su hermano pequeño, Max.

Max, el favorito de su padre, siempre conseguía lo que quería, y se las arreglaba para estar un paso por delante de Luciana en la casa. No había rivalidad que no intentara ganar.

Mientras se bajaban del auto, Luciana echó un vistazo a su alrededor. La casa era hermosa, con grandes ventanales que daban directamente al mar, y justo al lado de la propiedad de los vecinos, los Carrera. La familia había mencionado a Kiara, una chica de su edad, que vivía allí. Aunque eso no la preocupaba tanto; lo único que podía pensar era en las olas y en su skate, dos de sus escapes preferidos.

Desde niña, Luciana siempre había amado andar en skate, algo que nunca fue del agrado de sus padres. Mientras sus compañeras de escuela practicaban deportes como tenis y se preocupaban por estar siempre impecables, ella prefería lanzarse por las colinas sobre su tabla. Era un estilo de vida que su familia no entendía, ya que para ellos el skate no era “elegante” ni “propio de una dama”. Tener un skate a su lado hizo que consiga a muchos amigos pero por la mudanza tuvo que alejarse. La única actividad que compartían y en la que sus padres se relajaban realmente era el surf. Solían hacer competencias familiares para ver quién atrapaba la ola más grande, y esos breves momentos en el agua eran los únicos en los que Luciana sentía que sus padres se comportaban como padres de verdad, sin presiones ni exigencias, solo disfrutando el presente.

Después de descargar las maletas, su padre se acercó con una lista.

-Necesitamos algo de comida para la cena de hoy. Iremos a pescar, y tú y Max pueden ir al mercado por lo que falta.- Conozcan el lugar, me dijeron que hay muchos chicos de sus edad asique sean educados ante todos.

-Max, hacele caso a tu hermana- le dijo con una expresión seria a su hijo

-Claro, como siempre- dijo Luciana de forma sarcástica. Agarró su skate, lista para cualquier oportunidad de alejarse un poco. Su hermano, por supuesto, iba detrás caminando, pero como siempre buscaba la manera de molestarla, le tiraba piedritas q encontraba en el camino.

Cuando llegaron al mercado, Luciana se deslizó sobre su skate, sintiendo cómo las ruedas se deslizaban suavemente sobre el pavimento desgastado del lugar. De repente, notó a dos chicos más o menos de su edad fumando en la entrada del supermercado, conversando y riendo entre ellos. Uno de ellos, con el cabello rubio desordenado y una sonrisa despreocupada, parecía estar contando una historia que hacía que su amigo, con un aire más serio, riera también.

Mientras Luciana entraba al mercado con su hermano, Max, como siempre, decidió que era el momento de hacer un espectáculo. Se acercó a los dos chicos con la actitud más descarada que pudo reunir.

-Oigan,- dijo Max, con una sonrisa traviesa, -¿les parece linda mi hermana?-

Luciana sintió cómo su cara se encendía de inmediato, deseando que el suelo se la tragara en ese momento. Los dos chicos se detuvieron por un segundo, mirándose entre ellos y luego a Luciana.

El rubio, que más tarde descubriría que era JJ, fue el primero en romper el silencio, lanzando una risa contenida. -Depende,- dijo con una sonrisa pícara, -¿ella qué opina de chicos como nosotros?-

John B, su amigo, le dio un leve codazo a JJ, aunque también sonreía divertido por la situación. -Esos son temas complicados, amigo- dijo John B, intentando suavizar la incomodidad.

Max, lejos de sentirse avergonzado, siguió con sus preguntas. -¿Sabían que ella nunca ha tenido novio? ¡Ni uno solo! Quizás ustedes podrían ayudarla con eso.-

-¡Max!- exclamó Luciana fulminándolo con la mirada, mientras los chicos apenas podían contener la risa. -Vete a buscar las cosas que necesitamos,- le ordenó, deseando que su hermano desapareciera de la escena.

Los chicos, todavía riendo, la miraron con una mezcla de simpatía y diversión. JJ se inclinó un poco hacia ella. -Parece que tienes un gran fan en tu hermano. -

-Lo siento por eso. Está en una fase de… molestarme en todo momento. -

John B le sonrió. -Todos los hermanos son así en algún momento. Nos vemos por ahí... *kook*,- dijo, lanzándole una pequeña broma antes de entrar al mercado.

Luciana no pudo evitar notar que ellos trabajaban ahí. nunca más volveré.

Cuando ella y Max regresaron a la casa, Luciana lo reprendió.

-¿Qué carajos fue eso? ¡Me hiciste quedar como una tarada!, te odio -

Max solo se encogió de hombros, con una sonrisa de satisfacción.

 -Solo estaba siendo honesto. Nunca se sabe cuándo podrías necesitar un empujón. -

Ella lo miro, y subió para su habitación, mientras subía le grito -SI TUVE NOVIO MAX-

Fin

Cap 2

Para este momento Luciana después de dos dias haberse mudado, ya había acomodado todo, no sabia que iba a terminar de ordenar todo tan rápido.

Su padre estaba en una reunión con alguien importante de las islas. Su madre fue a la universidad a buscar algunos libros con Max.

Era la primera vez que me quedaba sola en la casa nueva. Me di cuenta de que era una casa enorme para una persona. No entiende para que una casa tan grande para una familia de 4. Por el aburrimiento decidió salir al patio para prácticar, del otro lado de la reja, la vi. Kiara Carrera, hija de los Carreras. Escuche que eran dueños de un restaurante y daban fiestas, parecía que sus padres eran importantes en la ciudad, pero ella no parecía importarle lo superficial, estaba fumando porro.

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