PENSAMIENTO SISTEMICO CAPITULO 1

Más allá de lo obvio con el pensamiento

¿Qué es un sistema?

Un sistema es una entidad cuya existencia y funciones se mantienen como un todo por la interacción de sus partes. El pensamiento sistémico contempla el todo y las partes así como las conexiones entre las partes y estudia el todo para poder comprender las partes.

Sistemas formados por partes muy distintas y con funciones completamente diferentes pueden estar organizados en torno a las mismas reglas generales. El pensamiento sistémico permite estudiar la conexión que existe entre diversas disciplinas para predecir el comportamiento de los sistemas.

Cada uno de los sistemas funciona como un todo en el que se combinan muchas partes distintas, es un conjunto de partes que funcionan como una sola entidad. Puede estar compuesto de muchas partes más pequeñas o ser él mismo parte de un sistema mayor. El mayor tamaño no implica un mejor funcionamiento, suele ser al revés. Cada sistema tiene un sistema óptimo y si aumenta o disminuye de forma notable sin experimentar ningún otro cambio, es muy probable que deje de funcionar.

Las propiedades emergentes sobresalen de los sistemas esas propiedades no se encuentran en las partes que los componen, no hace falta comprender el sistema para beneficiarse de él.

Las propiedades de un sistema surgen del conjunto del sistema, y no de sus partes, si lo descomponemos perderemos sus propiedades.

Análisis es el nombre que damos a la separación de las partes de un todo para ver cómo funciona, sirve para conocer, no es posible comprender las propiedades de un sistema entero si lo descomponemos en las partes que lo forman. El complementario es la síntesis que sirve para comprender.

La relación entre las diversas partes de un sistema determinan el funcionamiento del mismo, todas las partes son dependientes entre sí, mantienen una interacción recíproca.

Los sistemas complejos están trabados por muchos vínculos, por lo que suelen ser muy estables. Todo sistema actúa como una fuerte red elástica. La estabilidad de un sistema depende de muchos factores; el tamaño, la cantidad y diversidad de los subsistemas que abarque y el tipo y grado de conectividad que exista entre ellos. No puede haber estabilidad sin resistencia

El efecto palanca es saber dónde intervenir para obtener un gran resultado con un pequeño esfuerzo. El principio clave del pensamiento sistémico es observar las conexiones que sujetan la parte que queremos mover, cortarlas o soltarlas y el cambio resultara fácil.

Al manejar un sistema no podemos nunca hacer solo una cosa.

Capitulo dos

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