Programa de Apertura de Cultos Juveniles

Programa de Apertura de Cultos Juveniles.

Lectura Bíblica: ______________________________

Mensaje Reflexivo:

Pasaje Bíblico: Lucas 15:1-7

En este pasaje vemos que Jesús como en otras ocasiones estaba rodeado de gente, probablemente de diferentes razas, nacionalidades y estatus social, dice que se le acercaban publicanos y pecadores.

Un publicano en aquellos entonces, para los judíos antiguos era considerado traidor del Estado de Israel, puesto que estos le trabajaban al Imperio Romano, recaudando impuestos a los judíos.

Estas personas eran rechazadas por la sociedad religiosa, eran considerados despreciables lo más vil, ni siquiera eran permitidos en las sinagogas (lugar de reunión para orar) sino que eran repudiados.

Otro tipo de personas que estaban alrededor de Jesús eran los Fariseos, los líderes religiosos de aquel entonces, estaban atentos a cada paso que daba el Señor, para ver que tenían para acusarlo. Y el texto menciona que comenzaron a murmurar en contra de Jesús por estar con pecadores y publicanos.

Y él da la parábola de la oveja perdida.

Actualmente los jóvenes estamos acostumbrados a vivir el momento, a disfrutar de la vida porque solo hay una. Decidimos alejarnos de un rebaño que está bien cuidado, para ir en busca de nuestra felicidad, saltamos la cerca que nos rodea, la cerca que nos cuida porque creemos que eso está impidiendo que seamos libres.

Y comenzamos a vivir una vida lejos de Dios, nos aventuramos a nuevas fronteras, a descubrir nuevos amores, a probar nuevos retos, a gozar de la vida con alcohol, cigarrillos, sexo y drogas. Y decimos estar bien, nos sentimos libres porque no hay nadie que nos esté prohibiendo nada, vivimos bajo nuestra propia corriente. Pero en un momento esa vida que parece de color rosa, comienza a tornarse gris cuando las cosas no comienzan a salir como esperábamos, las tormentas, los huracanes, los terremotos y golpes de la vida empiezan a matarnos lentamente. Y nos damos cuenta que el tiempo que para nosotros parecía eterno empieza a agotarse, y nuestra vida que parecía feliz, llena de libertad, solo está llena de heridas, remordimientos, tristezas y vacíos.

Y ahí es cuando llega Dios, buscándonos hasta que nos encuentra en una condición que él no hubiera permitido si nos hubiéramos quedado en el rebaño. Y en vez de maltratarnos, regañarnos decirnos “YO TE DIJE” no nos dice nada, solo nos toma en sus brazos de amor, y nos carga, sabiendo que vamos heridos, nos lleva en sus brazos gozoso. Y hace una fiesta celebrando nuestro encuentro.

¿Te saliste del redil? ¿O quieres pertenecer al redil de Jesús? Talvez has estado viviendo una vida de acuerdo a tus impulsos, pero que sabes que ante los ojos de Dios no está bien.

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