Pura mamada

Profesor: Andrés Serrano Chacón

Alumno: Oscar Magallán Castañeda

INTRODUCCIÓN:

El presente ensayo, intenta analizar el cuento “Instrucciones para subir una escalera” del escritor argentino Julio Cortázar (1914-1984).

DESARROLLO:

Como el título mismo lo dice, el autor da las “instrucciones para subir una escalera” de la forma en que cualquier persona haría normalmente, y describe al tiempo, como es una escalera. Pero con la peculiaridad de explicarlo de una manera al revés, llendo de lo general a lo particular y lo abstracto a lo simple.

CONCLUSIÓN

 Estoy un poco confundido, no estoy seguro si la intención del autor es, como mencioné, describir las cosas de lo general a lo particular y de lo abstracto a lo simple, para hacer la lectura mucho más entendible (puesto que al final hasta nombra en concreto cada cosa: peldaño, pie, etc). O  su intención es describir, paso a paso, para ir desarrollando la imaginación del lector. Tal vez ambas.

En cualquier caso, existen algunas cosas en las que discierno en una de las descripciones y en dos puntos de las instrucciones, en concetro:

Primero. Por supuesto que el algoritmo al que refiere el autor de que una escalera está conformada por peldaños, que éstos a su vez “forzosamente” deben de ir primero en un ángulo recto con respecto al piso, y el siguiente paralelo a él. Me parece totalmente falso. Fácil. ¿Olvidamos las escaleras flotantes?

[pic 1]

Segundo. Yo sé cada cada quién es libre de subir o bajar escaleras como lo desee, y aunque concuerdo con el autor que la forma descrita (en cuanto a pose), es la manera tal vez más correcta y natural. Lo cierto es, que un servidor se ha visto, en diferentes ocasiones, en la “¿penosa?” necesidad de subir y bajar escaleras de formas poco particulares y ortodoxas. ¿Ejemplos simples que de inmediato saltaron a mi cabeza y me hicieron reir de inmediato?

1. Cuando he bajado con prisa (he de decir, bastante) las interminables escaleras de la estación “chabacano” para el transborde con dirección a Tacubaya, cuando visito a mi familia en el D.F. La posición del cuerpo (torso en específico) se encuentra ligeramente rotada hacia un lado (obvio tomando en cuenta la posición para ver “de frente” las escaleras”), y los pies apenas tocan con las puntillas precisamente para evitar que el pié caiga completo y perder así tiempo. Las piernas y su posición son en posición diagonal. Más o menos la misma técnica he aplicado cuando las he recorrido en el sentido contrario.
2. Hace unos 20 años, cuando tuve la brillante idea de entrenar para jugar americano (que joda), recuerdo que el coach nos hacía subir y bajar (unas 20 veces mínimo) las escaleras de lo que eran las gradas (forma de escalones o peldaños ¿cierto? De una plaza de toros. En ese caso, la posición del cuerpo era muy curveada, casi en 4, puesto que nos apoyábamos por comodidad (y seguridad) con las manos. Esto agilizaba también el recorrido.

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