SECTORES DE LA ECONOMÍA

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INTRODUCCIÓN

La economía es la ciencia que busca la buena utilización de los recursos, misma que se divide en varios sectores, donde cada sector es una parte fundamental de acuerdo a los procesos que conlleva cada uno de ellos. Los sectores son: sector primario que es agropecuario, sector secundario que es lo industrial y sector terciario que son los servicios. Parte del sector terciario es el sector financiero; siendo este de suma importancia dentro de la actividad económica de un país ya que en la mayoría de las actividades que se desarrollan en el mundo implican dinero, bonos, acciones o cualquier tipo de herramienta financiera. Para ello existen organizaciones intermediarias entre las personas, negocios o transacciones para así obtener dicho capital. Así mismo, en este sector se confirma que su función principal es contribuir con el crecimiento económico del país atribuyendo funciones como la creación, intercambio, transferencia y distribución de activos y pasivos financieros entre los agentes económicos.

En esta investigación se tiene como objetivo evaluar y conocer el sector financiero para poder confirmar su aportación al crecimiento económico y su influencia en los negocios, personas y gobierno, ya que, todos necesitan frecuentemente obtener recursos de capital para poder financiar sus inversiones y hacer uso de las organizaciones intermediarias.  

SECTOR FINANCIERO

El Sector financiero es una actividad comercial, prestadora de servicios de intermediaria relacionándose al ámbito de la generación de valor a través del dinero. Es fundamental para el desarrollo de la economía de un país, ya que, se encarga de canalizar los recursos hacia una persona individual como a una empresa para realizar operaciones comerciales e inversiones. Estas unidades pueden pertenecer al sector privado ya sean familias, empresas financieras y privadas o sector público que son las administraciones del gobierno. Y para esto existe el sistema financiero siendo un mecanismo que ajusta la oferta y demanda. “El sector financiero de una economía es el sistema circulatorio que liga los bienes, los servicios y las finanzas en los mercados domésticos e internacionales. Es mediante el dinero y las finanzas que las familias y las empresas obtienen sus préstamos y se prestan entre sí con el fin de consumir e invertir” (Samuelson, 2005, p.176).

Dicho sector pertenece al sector terciario de la economía ocupando un lugar especial, por ser este el canal a través del cual se captan, movilizan y asignan los recursos financieros, con los que se efectúan la producción, distribución y consumo de bienes. Siempre cumpliendo con el mecanismo que presta sus fondos para garantizar lo necesario para la inversión de las actividades, lo que genera el flujo de un país.                Las actividades que se realizan en el sector financiero son: Bancos e instituciones financieras: Bancos internacionales, nacionales y extranjeros. Contratación de seguros: seguros en general, corredores y reaseguradoras. Administradoras de fondos: Generales, pensiones, vivienda e inversión. Mercado de valores: Bolsas de comercio, bolsa de valores y corredores. Otros servicios financieros: Arrendamiento financiero, asesoría financiera, cobranzas. Bolsa de valores, inversión a largo plazo entre países del cual se obtiene facilidad de negociaciones de compra-venta.

Los servicios financieros aumentan y con ello las transacciones adaptándose a la tecnología actual, social y económica. Con ello también incrementa la seguridad que se debe manejar y así evitar fraudes, vigilando los recursos para asegurarse de que sean utilizados de la mejor manera, “que, si colapsa el sistema financiero, las empresas no pueden conseguir el dinero que necesitan para continuar con los niveles corrientes de producción, y mucho menos para financiar la expansión mediante nuevas inversiones. Una crisis puede desencadenar un círculo vicioso por lo cual los bancos recortan su financiamiento, empresas recortan actividad, lo que a su vez reduce la producción y las rentas. Cuando la producción y las rentas se retumban algunas compañías se ven abocadas a la quiebra. Cuando las empresas entran en quiebra, los balances de los bancos empeoran y estas entidades recortan aún más sus créditos, lo que aumenta la coyuntura negativa” (Stiglitz, 2006, p.150).

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