Territorio Comanche

Los corresponsales de guerra:

Saben que parte pero no si vuelven

En un campo de batalla se coloca en riesgo la vida, algunos re-porteros logran sobrevivir en cambio otros no.

Al límite entre la vida y la muerte está un corresponsal reporteando en una guerra, ya que su trabajo muchas veces lo obliga a insertarse en zonas peligrosas donde en cualquier momento puede morir. Esto lo vivieron los corresponsales Bárles y Márquez, trabajando para el canal Televisión Española TVE, han cubierto muchos conflictos bélicos como la guerra: Croata-Bosnia –ex Yugoslavia-, entre otras.

En la guerra Croata-Bosnia después que cayó un puente cerca de la localidad de Bijelo Polje en la República de Bosnia y Herzegovina, los corresponsales de TVE vivieron los momentos más al límite, ya que el lugar que estaban comenzó a hacer atacado, justo después de haber capturado el derrumbe del puente. Cuando huían a Bárles casi le llegó una bala que venía sin fuerza.

Así como Bárles y Márquez, otros corresponsales no corrieron la misma suerte y perdieron la vida en diferentes guerras, en la ex Yugoslavia; por ejemplo, un productor de la ABC llevaba menos de 20 minutos en el territorio y una bala lo mató. Mientras que un fotógrafo francés llegó a la 10 de la mañana y a las 11 ya le había caído un mortero, por ello que el promedio de permanecía es un par de semana.

En un guerra un corresponsal puede morir de 3 formas: la primera por suerte, es como si saliera su número en una tómbola y eso es inapelable, la segunda por inex-periencia ya que lleva poco tiempo y todavía no sabe cómo moverse y la tercera, la más frecuente, por la ley de probabilidades, es decir, que al cabo de un determinado tiempo le toca a un reportero morir.

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